Un suministro mundial limitado de vacunas contra el cólera ha obligado al Grupo Internacional de Coordinación (ICG), el organismo que gestiona los suministros de emergencia de vacunas, a suspender temporalmente el régimen estándar de vacunación de dos dosis en las campañas de respuesta al brote de cólera, utilizando en su lugar un enfoque de dosis única.
El giro en la estrategia permitirá que las dosis se utilicen en más países, en un momento de aumento sin precedentes de los brotes de cólera en todo el mundo.
Desde enero de este año, 29 países han reportado casos de cólera, incluidos Haití, Malawi y Siria, que enfrentan grandes brotes. En comparación, en los últimos 5 años, menos de 20 países en promedio notificaron brotes. La tendencia mundial se está moviendo hacia brotes más numerosos, más generalizados y más graves, debido a inundaciones, sequías, conflictos, movimientos de población y otros factores que limitan el acceso al agua potable y aumentan el riesgo de brotes de cólera.
La estrategia de una dosis ha demostrado ser eficaz para responder a los brotes, aunque la evidencia sobre la duración exacta de la protección es limitada, y la protección parece ser mucho menor en los niños. Con un régimen de dos dosis, cuando la segunda dosis se administra dentro de los 6 meses posteriores a la primera, la inmunidad contra la infección dura 3 años.
El beneficio de suministrar una dosis sigue siendo superior a la ausencia de dosis: aunque la interrupción temporal de la estrategia de dos dosis conducirá a una reducción y acortamiento de la inmunidad, esta decisión permitirá que más personas se vacunen y les brindará protección a corto plazo, en caso de que la situación mundial del cólera continúe deteriorándose.
El suministro actual de vacunas contra el cólera es extremadamente limitado.
Su uso para la respuesta de emergencia es coordinado por el ICG, que gestiona la reserva mundial de vacunas orales contra el cólera.
Del total de 36 millones de dosis que se prevé producir en 2022, 24 millones ya se han enviado para campañas preventivas (17%) y reactivas (83%) y el ICG aprobó 8 millones de dosis adicionales para la segunda ronda de vacunación de emergencia en 4 países, lo que ilustra la grave escasez de la vacuna. Como los fabricantes de vacunas están produciendo a su máxima capacidad actual, no existe una solución a corto plazo para aumentar la producción.
La suspensión temporal de la estrategia de dos dosis permitirá que las dosis restantes se reorienten para cualquier necesidad durante el resto del año.
Esta es una solución a corto plazo, pero para aliviar el problema a largo plazo, se necesitan medidas urgentes para aumentar la producción mundial de vacunas.
El GCI continuará monitoreando las tendencias epidemiológicas mundiales, así como el estado de la reserva de vacunas contra el cólera, y revisará esta decisión regularmente.
Comunicado OMS
