Proclamación del Dr. Omar Aizpurúa como nuevo rector de la UTP

Violeta Villar Liste

El Dr. Omar Aizpurúa fue proclamado como nuevo rector de la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP) para el periodo 2023-2028, en acto celebrado en el auditorio del campus central, tanto en modalidad física como virtual.

En presencia de la comunidad académica, universitaria e invitados especiales, entre otros, el Dr. Eduardo Flores Castro, rector de la Universidad de Panamá (UP) y quien actuó como observador en el proceso electoral, inició el acto de proclamación del rector Omar Aizpurúa, quien asumirá el cargo en febrero de 2023.

Arles González, presidente del Gran Jurado de Elecciones de la UTP, abrió la sesión con agradecimiento a todos los jurados de mesa que apoyaron el día de la votación, saludo extensivo a los 14 jurados de elección, “lo cual garantiza que todos los miembros de la UTP puedan participar de las actividades electorales de manera democrática y transparente”.

Indicó que el nuevo rector obtuvo el 46.82% del total de los votos. Agradeció a las autoridades salientes y entrantes por su participación en el proceso.

Al nuevo equipo rectoral solicitó su apoyo “ya que vienen las reformas y ajustes a los reglamentos de elección”.

El Dr. Aizpurúa fue elegido el 26 de octubre, como el nuevo rector. Las elecciones se desarrollaron en todas las sedes de la UTP. También participaron la Ing. Vivian Valenzuela y el Dr. Martín Candanedo, ambos presentes en la ceremonia de proclamación del rector electo.

25 años de vida al servicio de la UTP

Acto seguido, se procedió a la entrega del acta que proclamó como nuevo rector de la UTP al Dr. Omar Aizpurúa.

El nuevo rector de la UTP recordó que fue hace siete años cuando “comenzamos a estructurar un proyecto rectoral; hace cinco años presentamos una propuesta que si bien no fue favorecida con el voto mayoritario de la institución, generó empatía, experiencias, amistades y permitió formar un equipo de trabajo robusto, con ideas nuevas, capaz de llevar adelante un proyecto rectoral”.

En el camino, sostuvo, tuvimos la gran dicha de poder unificar un proyecto con dos damas que habían liderado hace cinco años otra iniciativa rectoral, “pero que desprendiéndose de todas sus aspiraciones personales, caminaron con nosotros estos meses y dio como resultado este triunfo. Son ellas la Dra. Mariana  de McPherson  y la Dra. Angela Laguna”.

Dio gracias a Dios porque fue posible “conformar un equipo comprometido, fuerte y a la vez flexible, tenaz y humilde”.

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Gratitud también a toda la comunidad de la UTP, por la confianza.

Señaló que es el interés de su administración “trabajar para tener una universidad de excelencia”.

Hizo un especial llamado a la unidad: “Ofrecemos a la UTP una administración basada en principios, valores, sin colores, sin distinción de camisetas o de bandos. Nos une ahora la UTP; nos convoca el futuro institucional; nos convoca llevar la universidad a otros escenarios”.

“La excelencia es una utopía así que siempre debemos estar mejorando en oferta, programación y plataformas y todo lo que podamos hacer de la mano con el Estado, las empresas y las hermanas universidades”.

Visión y compromisos

Durante estos cinco años y más allá, el nuevo rector de la UTP reflexionó que “nuestro modelo educativo debe avanzar e ir en busca de ese nuevo modelo educativo”.

“Cuando yo estudiaba no había internet. Hoy el estudiante aprende diferente y eso hay que incluirlo en todos los programas, por medio de la enseñanza activa”.

Subrayo que “el nuevo rol de la educación es un reto y es importante porque la educación nos capacita para la vida, en sociedad y la convivencia grupal”.

“Mediante principios como el compañerismo y prácticas colectivas, debemos pasar de los tiempos en que enseñábamos para competir, a enseñar para compartir y cooperar: ningún investigador se puede encerrar entre cuatro paredes”.

Los grupos, precisó, deben ser multidisciplinarios para lograr tener éxito, mayor imaginación y creatividad.

“La educación es un proceso elemental en la correcta estructuración de la psique y en la maduración cognitiva y emocional:  debemos enseñar con valores éticos y morales”.

Por otra parte, afirmó que la universidad también debe responder a la realidad de la digitalización y a los retos de la industria 4.0.

“Debemos avanzar en esa dirección: nuestra visión es que vislumbramos a nuestra universidad con un reconocimiento nacional e internacional, referente regional en aspectos de investigación, desarrollo e innovación, soportada con una plataforma tecnológica robusta y eficiente, que facilite el acceso a la información, la automatización de los procesos y la formación y capacitación presencial y a distancia”.

De igual modo, concibe a la UTP construyendo un lazo permanente entre universidad, empresa y Estado, para formar con los más altos estándares y pertinencia, basado en valores  de inclusión, equidad y cuidado del ambiente

Cerró con un mensaje de esperanza e invitación al servicio para dedicar estos cinco años a llevar a la UTP “a escenarios nunca antes soñados”.