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Dra. Karen Courville, FACP

Egresada de la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá.
Realizó estudios en Medicina Interna y Nefrología en el Complejo Hospitalario Dr. Arnulfo A. Madrid.  Tiene un Fellow en Investigación Renal del Instituto Mario Negri en Bérgamo, Italia.  Investigadora del Instituto de Ciencias Médicas de Las Tablas, es presidenta de la Sociedad Panameña de Nefrología e Hipertensión

Las mujeres con enfermedad renal crónica terminal tienen problemas de fertilidad debido a una gran cantidad de factores, entre ellos las alteraciones del eje hipotálamo- hipófisis – gónadas, que producen deficiencia en los niveles hormonales que permiten que fisiológicamente pueda producirse un embarazo.

Además, las pacientes que reciben terapia de reemplazo renal sustitutiva mantienen ciertos niveles de alteraciones bioquímicas y metabólicas ya que, aun cuando reciban adecuadamente su tratamiento, estos no logran reemplazar la función del mismo riñón al 100%, manteniendo un ambiente que, si bien es cierto permite que los pacientes vivan por muchos años gracias a la disponibilidad de filtros de hemodiálisis nuevos y disponibilidad de tratamientos de diálisis en casa, es un ambiente tóxico para un producto fetal.

Dentro de los tres tipos de terapia de sustitución renal, el trasplante renal es el que le permite aumentar la esperanza de vida a los pacientes y regresarlos casi a la normalidad, ya que está demostrado por los estudios de seguimiento, que mejora la calidad de vida y la supervivencia de los pacientes.

¿Puede ser madre una paciente con trasplante renal?

Muchas cosas han evolucionado en la historia del trasplante renal:  antes de 1960, los diversos medicamentos que se utilizaban para evitar el rechazo del órgano trasplantado, contraindicaban que se produjera un embarazo en estas pacientes. 

El conocimiento científico permitió que en 1963 se produjera el primer embarazo en una mujer trasplantada y tuviera un niño totalmente sano.

Con la introducción de nuevos tratamientos inmunosupresores, se disminuyeron los riesgos de toxicidad fetal sin disminuir el efecto de protección inmunológica que se le ofrece al órgano trasplantado. 

A todas las pacientes en edad fértil, la enfermera de trasplante y el nefrólogo se encargan de explicarles que luego del trasplante, se abre la posibilidad de que se produzca un embarazo, por lo cual se orienta a las pacientes para que cuando sea el momento, este se lleve a cabo de la manera más segura posible, tanto para la madre como para el producto, ya que algunos de estos medicamentos pueden tener efectos tóxicos para un feto en formación y deberán ser reemplazados por aquellos en los que se ha demostrado seguridad durante todo el embarazo.

¿Existen riesgos para el órgano trasplantado o el bebé en formación?

Se sabe que el embarazo no afecta la función del riñón trasplantado ni la cantidad de años que pudiera funcionar ese riñón.   Los estudios recomiendan esperar uno a dos años luego del trasplante para permitir una estabilización en la función y en el valor de creatinina del nuevo órgano. Existe un riesgo de desarrollo de hipertensión arterial, preeclampsia y/o diabetes gestacional durante el embarazo, ligeramente mayor que en las mujeres sin trasplante de la población general.

El parto vaginal es seguro y si el embarazo ha evolucionado sin complicaciones, esta es la vía de elección. Está indicada la cesárea si existieran razones obstétricas urgentes.

En cuanto a los riesgos fetales, los más importantes son la prematuridad y el bajo peso al nacer. El bajo peso al nacer se ha visto asociado a edad de la madre (menor de 25 años); y la tasa de nacidos vivos se reporta mayor que el de la población en general.  El riesgo de mortalidad perinatal en mujeres con Trasplante renal no es mayor que el de la población en ausencia de factores de riesgo como hipertensión o proteinuria. 

Recomendaciones para mujeres con enfermedad renal crónica

El embarazo en mujeres trasplantadas en edad fértil es una opción viable, que puede presentar un resultado exitoso: una hija o hijo sano. 

Es importante que la paciente y su familia sean informados de los riesgos y beneficios del trasplante renal en cuanto a la maternidad y al producto fetal. 

Todas las pacientes en diálisis en edad fértil deben completar sus protocolos de trasplante renal, para poder ingresar a la lista de espera nacional y así poder disfrutar un día de esa maravillosa oportunidad de recibir un trasplante renal y poder convertirse en madres.

Por: Dra. Karen Courville, FACP