Educación universitaria y seguridad financiera fueron condiciones que garantizaron mejor salud mental y menos condiciones de estrés, demuestra estudio liderado por el INDICASAT AIP con participación internacional
Redacción LWS
“Los estudios sobre los efectos psicosociales de la pandemia en Panamá mostraron que los adultos mayores reportaron menor depresión, ansiedad y estrés, fueron más resilientes y, en general, se sintieron menos afectados por la pandemia en comparación con los adultos más jóvenes”.
Los resultados, que se presentan en la revista COVID, desafiaron la hipótesis inicial y las percepciones del equipo de investigación, y en general de cualquier ciudadano, que vincularía la pandemia a la afectación de la salud mental del adulto mayor.
Este estudio panameño aporta datos significativos que comprueban cuán resilientes fueron las personas mayores durante este periodo y cómo estas lecciones deben ser tomadas en cuenta en políticas públicas de envejecimiento saludable.
En general, se trata del “primer estudio transversal y longitudinal que examina a adultos mayores antes y durante la pandemia de COVID-19 en Panamá. Estos hallazgos contribuyen a un creciente corpus de investigación sobre el envejecimiento durante la pandemia de COVID-19, que podría orientar las políticas públicas que protegen a las poblaciones vulnerables durante las crisis de salud pública. Destacan la necesidad de abordar las barreras sociales y tecnológicas que impiden la participación en la investigación longitudinal, especialmente en tiempos de crisis como la pandemia de COVID-19. Estudios futuros deben garantizar que las poblaciones en riesgo no sean ignoradas”, subraya el equipo.
La investigación fue liderada por el Grupo de Neurociencias del Instituto de Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología (INDICASAT-AIP) de Ciudad de Panamá (Panamá), junto con la Escuela de Psicología de la Universidad Latina de Panamá y la Universidad Santa María La Antigua (Panamá).
También participa personal de investigación afiliado a la Universidad Estatal de Pensilvania, de University Park, Universidad de Florida (EE. UU), de la Universidad Estatal de Florida en Ciudad de Panamá y de Cevaxin (Panamá).
Son los autores y autoras del estudio, Análisis transversal y longitudinal de la función cognitiva y el bienestar de los adultos mayores en Panamá durante la pandemia de COVID-19, las siguientes personas y sus afiliaciones:
Stephanie Lammie1,2,Sofía Rodríguez-Araña1,3,Camilo Posada Rodríguez1,4 ,Julio Flores-Cuadra1,5,6,7,Ámbar Pérez-Lao1,8,Gabrielle B. Britton1,9,10,11,*,Diana C. Oviedo1,3,11,*yAdam E. Tratner9,11,*
1Grupo de Neurociencias, Instituto de Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología (INDICASAT-AIP), Ciudad de Panamá, Panamá
2Escuela de Psicología, Universidad Latina de Panamá, Ciudad de Panamá , Panamá
3Escuela de Psicología, Universidad Santa María La Antigua, Ciudad de Panamá, Panamá
4Departamento de Psicología, Universidad Estatal de Pensilvania, Center Valley, EE. UU.
5Departamento de Biología, Universidad Estatal de Pensilvania, University Park, EE. UU.
6Programa de Posgrado en Neurociencia, Institutos Huck de Ciencias de la Vida, University Park, E. UU.
7Instituto de Neurociencia de Penn State, Universidad Estatal de Pensilvania, University Park, ,EE. UU.
8Departamento de Psicología Clínica y de la Salud, Universidad de Florida, Gainesville, EE. UU.
9Universidad Estatal de Florida, Ciudad de Panamá, Panamá
10Cevaxin, Ciudad de Panamá, Panamá
11Sistema Nacional de Investigación (SNI), de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SENACYT), Ciudad de Panamá, Panamá








Cambios en la salud mental
Describen en la investigación que fue el objetivo principal del estudio determinar “si se observaron cambios en la función cognitiva, la salud física y la salud mental en una muestra de adultos mayores panameños evaluados antes y durante la pandemia”.
En general, “los análisis exploratorios examinaron si los factores sociodemográficos clave (sexo, edad, educación, enfermedades crónicas e ingresos suficientes) se asociaban con la función cognitiva y la salud mental, y se encontró que solo la función cognitiva se relacionaba con las variables sociodemográficas”.
Los participantes no mostraron ningún cambio significativo en la depresión a lo largo del tiempo.
“Estos hallazgos se desvían de muchos estudios en los que las personas informaron más síntomas de enfermedad mental durante la pandemia.
De hecho, los adultos mayores reportaron menor depresión, ansiedad y estrés, fueron más resilientes y, en general, se sintieron menos afectados por la pandemia en comparación con los adultos más jóvenes lo que también puede explicar por qué esta muestra de adultos mayores no reportó cambios en los síntomas de depresión.
Las razones de la resiliencia

En el estudio se analiza que este resultado puede deberse, en parte, a las características de la muestra.
La mayoría de los participantes tenían ciertas características y dos fundamentales:
Educación universitaria y reportaron ganar un ingreso mensual más alto que el ingreso medio de los adultos panameños.
Observan que “las personas con más años de educación formal a menudo se benefician de una mayor reserva cognitiva, lo que puede proteger contra el impacto de la edad y factores estresantes como la pandemia”.
Por otra parte, la seguridad financiera “también juega un papel crítico en la salud cognitiva al reducir el estrés crónico y aumentar el acceso a entornos y recursos estimulantes”.
“Por lo tanto, es posible que los participantes no hayan experimentado cambios en la función cognitiva a lo largo del tiempo debido a los efectos protectores de la educación superior y los ingresos sobre la cognición”.
Menos enfermedades crónicas
El grupo de estudio no solo reflejó mejor salud mental:
“Los participantes informaron inesperadamente menos enfermedades crónicas durante la pandemia que antes de ella, en contraste con la investigación que documenta el deterioro físico durante la pandemia de COVID-19”.
Las y los autores demuestran su sorpresa “dado que el propio COVID-19 con frecuencia causaba complicaciones de salud y exacerbaba enfermedades preexistentes, particularmente en poblaciones de mayor edad”.
Este hallazgo lo interpretan con cautela porque ocurre que muchas personas dejaron de acudir a la consulta regular por temor a enfermar de COVID-19.
“Es posible que los participantes recibieran evaluaciones de salud con menos frecuencia durante la pandemia y que no hubieran considerado las condiciones de salud crónicas que no estaban bajo tratamiento. Como resultado, los participantes podrían haber subestimado las enfermedades crónicas en el momento de la entrevista a mitad de la pandemia”.
Los jóvenes con mayor nivel educativo e ingresos suficientes para cubrir sus gastos también presentaron una mayor función cognitiva durante la pandemia.
“Esto concuerda con un gran cuerpo de investigación sobre factores protectores del envejecimiento cognitivo”, resaltan.
En este caso, poder cubrir las necesidades básicas reduce el estrés.
¿Qué pasa con un nivel socioeconómico inferior?
Las y los autores también investigaron la situación de los participantes con un nivel socioeconómico más bajo y con más deteriorado.
Ocurre que este perfil abandonó el estudio en más de la mitad (51%) y no participaron en la entrevista de seguimiento.
Esto ha ocurrido con otros estudios longitudinales realizados durante la pandemia de COVID-19, “que a menudo enfrentaron desafíos similares para mantener la participación de los participantes”.
Demostraron “que aquellos que no completaron la segunda entrevista eran, en promedio, menos educados, recibían menos ingresos mensuales, tenían una función cognitiva más baja” y tenían más síntomas depresivos, en comparación con el subgrupo de participantes que permanecieron en el estudio cuando se comparó al inicio.
En general, “los adultos mayores más vulnerables (aquellos con dificultades para realizar actividades cotidianas, inseguridad financiera o desafíos cognitivos y emocionales) pueden haber experimentado mayores descensos durante la pandemia, pero estuvieron subrepresentados debido a la deserción”.
Destacan que a pesar de las limitaciones, esta investigación es una de las pocas en examinar función cognitiva y bienestar de los adultos mayores en el contexto latinoamericano “y aumenta la representación de las poblaciones de países de ingresos bajos y medios en la investigación sobre adultos mayores durante la pandemia de COVID-19”.
Referencia: Lammie, S., Rodríguez-Araña, S., Posada Rodríguez, C., Flores-Cuadra, J., Pérez-Lao, A., Britton, GB, Oviedo, DC, & Tratner, AE (2025). Un análisis transversal y longitudinal de la función cognitiva y el bienestar de adultos mayores en Panamá durante la pandemia de COVID-19. COVID , 5 (8), 128. https://doi.org/10.3390/covid5080128

