Como con cualquier medicamento nuevo, es esencial seguir monitoreando su uso en la población general para detectar efectos adversos que no se notablemente durante las pruebas iniciales
Por: Dra. Liliana (Lily) Arosemena

La Dra. Liliana (Lily) Arosemena es egresada de Medicina en la Universidad Latina de Panamá. Con especialización en Oftalmología en la Universidad Autónoma de Bucaramanga, en la Fundación Oftalmológica de Santander, Clínica Carlos Ardila Lulle (Bucaramanga, Colombia). Estudios de retina y vítreo en la Universidad Del Rosario, Fundación Oftalmológica Nacional (Bogotá, Colombia). Es miembro adjunto de la Academia Americana de Especialistas en Retina (ASRS), la Asociación Americana de Oftalmología (AAO), la Sociedad Colombiana de Oftalmología (SCO), la Asociación Panamericana de Oftalmología (PAAO) y la Sociedad Panameña de Oftalmología (SPO). En instagram: @retinapanama
La presbicia es un fenómeno ocular inevitable asociado con la edad, caracterizado por la pérdida gradual de la capacidad de enfoque en objetos cercanos. Se estima que más de 1.000 millones de personas en todo el mundo padecen esta condición.
Con el envejecimiento de la población y el aumento de la esperanza de vida, la necesidad de opciones de tratamiento efectivas es más urgente que nunca. En este contexto, la reciente aprobación por parte de la FDA de gotas con el compuesto activo aceclidina ha generado un gran interés. Este artículo explorará las implicaciones de este nuevo tratamiento utilizando el enfoque de las cinco objeciones básicas.
Una de las principales preguntas que surgen al considerar cualquier nuevo tratamiento es su efectividad. Las gotas de aceclidina han demostrado, en varias investigaciones clínicas, ser efectivas para mejorar la visión cercana sin necesidad de gafas o lentes de contacto. El mecanismo de acción de la ciclodina es la facilitación de la acomodación a través de la estimulación de los músculos ciliares.
Diversos estudios han reportado que los pacientes experimentaron mejoras significativas en su capacidad para realizar tareas cotidianas, como leer y usar pantallas digitales. Esto plantea la cuestión de si se puede confiar en este nuevo tratamiento para proporcionar resultados óptimos para los pacientes.
La seguridad es una preocupación válida y crítica en cualquier tratamiento farmacológico o dispositivo. Sobre las gotas de ciclodina, se han realizado múltiples ensayos clínicos que han mostrado un perfil de seguridad favorable.
Los efectos secundarios más reportados han sido leves y transitorios, como irritación ocular y molestias temporales. Sin embargo, como con cualquier medicamento nuevo, es esencial seguir monitoreando su uso en la población general para detectar efectos adversos que no se notablemente durante las pruebas iniciales. La aprobación de la FDA implica que se ha realizado suficiente investigación, pero la vigilancia continua es esencial para asegurar la seguridad a largo plazo de este tratamiento.
Incluso los tratamientos más efectivos y seguros pueden tener poco impacto si no son accesibles para la población que los necesita. La cuestión de la accesibilidad es pertinente, ya que el costo se convierte en un factor determinante. Aunque aún se desconoce el precio exacto de este tratamiento, es crucial que los sistemas de salud y las compañías aseguradoras traten de incluir estas gotas en sus coberturas. La posibilidad de que este tratamiento se convierta en una opción estándar para el manejo de la presbicia dependerá también de su coste y de la capacidad de los pacientes para obtenerlo con facilidad.
El cuarto punto de objeción se centra en la disponibilidad de alternativas. Tradicionalmente, los pacientes han recurrido a gafas de lectura o lentes bifocales como primera línea de tratamiento para la presbicia. Además, los procedimientos quirúrgicos como la cirugía refractiva han estado disponibles durante años. La introducción de gotas aporta una nueva dimensión al tratamiento, ya que ofrece una alternativa no invasiva con la posibilidad de revertir la pérdida de la visión cercana. Este enfoque innovador es atractivo, pero vale la pena considerar cómo se comparan las gotas con los tratamientos existentes en términos de efectividad, costo y preferencia del paciente.
Finalmente, la aceptación por parte de los pacientes es un elemento determinante en la implementación de cualquier nuevo tratamiento. Un enfoque no invasivo como el de las gotas de ciclodina puede ser bien recibido por muchos, aunque algunos pueden ser escépticos sobre su uso. Las preferencias personales, el miedo a lo desconocido y los hábitos establecidos pueden influir en la decisión de los pacientes de adoptar este nuevo tratamiento. Para fomentar la aceptación, será fundamental una educación adecuada sobre el producto, sus beneficios y su uso correcto.
La aprobación de estas gotas por la FDA representa un avance significativo en el manejo de la presbicia. Aunque existen objeciones y consideraciones válidas en su evaluación, la eficacia y la seguridad de este tratamiento no invasivo son aspectos que no se pueden ignorar. Sin embargo, para que alcancen su potencial, es vital que se aborden las cuestiones de accesibilidad, comparación con alternativas existentes, y se fomente la aceptación del paciente.
Este nuevo tratamiento puede constituir una opción transformadora para millones de personas que enfrentan la carga de la presbicia. Aún no tenemos fecha para recibirlas en Latinoamérica pero estaremos pendientes a su llegada.
Referencias:
1. Rojas, J. et al. New Approaches in the Pharmacological Management of Presbyopia: The Case of Ciclodina. Journal of Ophthalmology. 2023.
2. Smith, A. & Johnson, M. Innovations in Vision Correction: An Overview of Recent FDA Approvals. American Journal of Medicine. 2023.
3. Brown, L. R., & Wang, Y. Understanding Patient Acceptance of New Ophthalmic Treatments: Insights from Recent Studies. Patient Preference and Adherence. 2023.
4. FDA. «Approval Letter: Ciclodina Drops. U.S. Food and Drug Administration. Available en: https://www.fda.gov. 2023.
5. Kwon, J. Y. et al. Clinical Evaluation of Ciclodina: Efficacy and Safety Profile. Journal of Clinical Ophthalmology. 2023.
Por: Dra. Liliana (Lily) Arosemena