Cribado, estadificación y seguimiento de la diabetes tipo 1 en estadios preclínicos: Consenso de las sociedades científicas SED, SEEN y SEEP, es un documento con recomendaciones para estandarizar el control de las fases presintomáticas de la enfermedad
Redacción LWS con información de SEEN | SEMEDLAB
La ciencia avanza, y en el caso de la diabetes tipo 1, permite impulsar nuevos enfoques preventivos que favorece la detección e intervención tempranas, incluso antes de la aparición de síntomas clínicos.
El Dr. Fernando Gómez Peralta, coordinador del Área de Diabetes de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), observa que la detección precoz de los estados presintomáticos de la diabetes tipo 1 en personas en riesgo, “permite reducir drásticamente el riesgo de cetoacidosis y preparar adecuadamente a la persona y su entorno para iniciar de forma adecuada la terapia insulínica”.
En este sentido, el endocrinólogo especifica que el diagnóstico clínico de la diabetes tipo 1, caracterizado por hiperglucemia, está precedido por meses e incluso años de una fase presintomática de la enfermedad, lo que evidencia la importancia de la detección precoz para evitar posibles complicaciones.
Ante la importancia de llegar a tiempo a los estados preclínicos de la diabetes tipo 1, la SEEN junto con la Sociedad Española de Diabetes (SED) y la Sociedad Española de Endocrinología Pediátrica (SEEP) han difundido recientemente el documento ‘Cribado, estadificación y seguimiento de la diabetes tipo 1 en estadios preclínicos: Consenso de las sociedades científicas SED, SEEN y SEEP’ en el que se recogen una serie de recomendaciones para estandarizar el control de las fases presintomáticas de la enfermedad a nivel nacional.
Cambio de paradigma en el diagnóstico preclínico

El diagnóstico preclínico de la diabetes tipo 1 representa un cambio de paradigma en el abordaje de la enfermedad. Al respecto, los expertos en Medicina de Laboratorio han presentado las novedades y retos, en el marco de la celebración del XIX Congreso Nacional del Laboratorio Clínico (LABCLIN 2025), organizado por la Sociedad Española de Medicina de Laboratorio (SEMEDLAB).
A través del simposio, “Abordaje de la Diabetes mellitus tipo 1 en estadios preclínicos. Nuevos retos”, los especialistas de laboratorio clínico han revisado los avances más recientes en biomarcadores inmunológicos y su utilidad para identificar personas en riesgo, así como las estrategias clínicas para el manejo de los pacientes en estadios tempranos y asintomáticos.
Por otro lado, se ha profundizado en los programas de cribado en desarrollo y las perspectivas de su implantación en nuestro entorno.
La diabetes mellitus tipo 1 (DM1) es una enfermedad autoinmune crónica caracterizada por la destrucción progresiva de las células beta pancreáticas productoras de insulina, lo que conduce a una deficiencia de esta hormona.
En cambio, como ha explicado la moderadora del simposio y responsable del Servicio de Laboratorio Clínico del Complejo Hospitalario Universitario de Toledo, la Dra. María Carmen Lorenzo Lozano, la diabetes tipo 2 está asociada con la resistencia a la insulina y factores metabólicos o de estilo de vida.
La especialista explicó que la DM1 es una patología heterogénea que puede presentarse tanto en la infancia como en la edad adulta.
En España, la incidencia media en menores de 15 años se estima alrededor de 20 casos por 100.000 habitantes/año, con una tendencia creciente en los últimos años. “Aunque históricamente se ha considerado una enfermedad pediátrica, más del 50 % de los diagnósticos se producen en adultos”, señaló la Dra. Lorenzo Lozano.
En su debut clínico, suele manifestarse con síntomas como poliuria, polidipsia, pérdida de peso y cetonuria; mientras que, en un porcentaje significativo de casos, se presenta con cetoacidosis diabética (CAD), “la complicación aguda más grave y costosa de la DM1”.
En los últimos años, se han logrado avances significativos en la comprensión y manejo de la diabetes tipo 1.
La facultativa especialista del Servicio de Análisis Clínicos del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria, en Santa Cruz de Tenerife, la Dra. María Dolores Martín, destacó que “la identificación de fases presintomáticas ha permitido redefinir la enfermedad como un proceso continuo y no solo como un evento clínico”.
Gracias a esta perspectiva, la facultativa especialista del Servicio de Endocrinología del Hospital Universitario Virgen del Rocío, en Sevilla, la Dra. Virginia Bellido, dijo que es posible identificar la enfermedad, “cuando aún es posible prevenir la cetoacidosis, preparar al paciente y su entorno para el diagnóstico y, potencialmente, acceder a terapias modificadoras de la afección”.
El Laboratorio Clínico, en colaboración con otros especialistas como los endocrinólogos y los pediatras, desempeña un papel esencial en todas las fases del proceso asistencial, entre ellas, la detección precoz.
La Dra. Bellido detalla que el proceso autoinmune se identifica mediante la medición y positividad confirmada de dos o más autoanticuerpos frente a los principales antígenos de la célula beta: GAD65, IA-2, ZnT8 e insulina. “Estos análisis deben realizarse con técnicas de alta sensibilidad y especificidad, idealmente en laboratorios clínicos de referencia o con programas de control de calidad, y los resultados deben confirmarse en una segunda muestra y, preferiblemente, con una técnica distinta».
Por su parte, la Dra. Dolores Martín ha resaltado los avances logrados en la optimización y aplicación de técnicas avanzadas para la medición de autoanticuerpos.
Redacción LWS con información de SEEN | SEMEDLAB

