Este logro de un equipo de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) mejora las vidas de las familias de los pacientes y ofrece mejores herramientas al personal sanitario
Con información de la UPM
Un estudio internacional, con participación de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), ha logrado extraer de una tomografía computarizada (TAC) información de similar calidad a la resonancia magnética para conocer cambios en el cerebro, y posible riesgo de alzhéimer, en personas con síndrome de Down.
En comunicado institucional, la UPM explica que la resonancia es un estudio complejo para la persona con síndrome de Down porque dura tiempo y puede resultar incómoda e incluso angustiante, a diferencia del TAC.
Por otra parte, recuerdan que el síndrome de Down genera un riesgo aumentado en las personas de desarrollar alzhéimer “debido al incremento de la actividad de un gen en el cromosoma 21, que da lugar a una cantidad mayor de lo normal de una determinada proteína (la proteína precursora de amiloide, denominada APP en sus siglas en inglés)”.
Esta importante coincidencia clínica, señala la UPM, subraya la urgencia de disponer de técnicas de neuroimagen fiables y adaptadas a esta población.
A fin de superar esta limitación, un equipo de científicos de la UPM liderado por el Dr. Bryan Strange, director del Laboratorio de Neurociencia Clínica, la Unidad de Síndrome de Down en adultos del Hospital Universitario de La Princesa (dirigida por el Dr. Diego Real de Asúa) y especialistas en metodología del Institute of Neurology del University College London (UCL), han llevado a cabo un proyecto de investigación apoyado en la IA que tiene la capacidad de extraer información de calidad equivalente a una resonancia magnética a partir de TAC, una técnica más rápida, silenciosa y accesible.
“Al comparar los TAC y las resonancias de los mismos pacientes, los algoritmos de inteligencia artificial coincidieron con los resultados de la resonancia en más del 90% de los casos, identificando las mismas áreas del cerebro vinculadas al deterioro cognitivo”, señalan los investigadores, citado por la UPM.
“Este trabajo amplía y confirma resultados preliminares publicados en 2023, pero ahora ya no es solo una posibilidad teórica, sino una alternativa real, fiable y mucho más accesible cuando una resonancia no puede llevarse a cabo”.
“Este avance mejora enormemente la forma en que estudiamos los cambios cerebrales en personas con síndrome de Down que no pueden someterse a una resonancia magnética”, explica el Dr. Strange.
“Los resultados que hemos obtenido abren la puerta a una detección más precoz, un mejor seguimiento y una investigación más inclusiva”.

Los resultados del estudio, describen, tienen importantes implicaciones.
En el caso de las familias, se les facilita el acceso a la tecnología y no quedan al margen de la innovación.
Los profesionales sanitarios también logran disponer de una herramienta práctica para el diagnóstico y evaluar nuevos tratamientos.
Este avance es un logro para la ciencia, la tecnología y la innovación al adaptar una herramienta existente “y ponerla al servicio de quienes más la necesitan”.
Referencia: Sánchez-Moreno B, Zhang L, Salaberry AC, Rozalem-Aranha M, Moldenhauer F, Brudfors M, Ashburner J, Nachev P, Real de Asúa D, Strange BA. Performance of computed tomography and magnetic resonance morphometry in evaluating brain atrophy in Down syndrome. Alzheimer’s & Dementia, Volume 21, Issue 8 e70296. DOI: 10.1002/alz.70296. PMID: 40762120; PMCID: PMC12322686.

