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El paciente ha logrado una remisión sostenida del VIH después de recibir un trasplante alogénico de células madre para tratar una leucemia mieloide aguda. / Adobe Stock
Se trata de un hombre alemán de 60 años, quien lo ha logrado gracias a un trasplante de un donante con solo una copia de una mutación relacionada con la resistencia al virus. Según los autores, esta circunstancia amplía las opciones de donación.

Por: Ana Hernando | Agencia SINC

La revista Nature publica hoy el caso de un varón de 60 años de Berlín que ha logrado una remisión sostenida del VIH después de recibir un trasplante alogénico de células madre para tratar una leucemia mieloide aguda.

Es el séptimo caso documentado en el mundo y, a diferencia de la mayoría de precedentes, el donante no era portador de dos copias de la mutación CCR5 Δ32 —que impide la entrada del virus en las células—, sino solo de una. Hasta ahora, la práctica totalidad de las remisiones duraderas se había asociado a injertos de donantes homocigotos para esta variante poco común.

En este caso, no se logró encontrar un donante completamente resistente al virus. “Se eligió porque no pudimos identificar ninguno homocigoto y era la mejor opción para tratar la leucemia”, explica a SINC Christian Gaebler, investigador principal y experto en inmunología viral, especialmente VIH, en la Universidad de Berlín.

El paciente interrumpió la terapia antirretroviral tres años después del trasplante y, seis años más tarde, los investigadores no han detectado virus con capacidad replicativa mediante ensayos de alta sensibilidad. “Ha estado más de seis años sin tratamiento y sin rebote viral; no encontramos VIH activo y, además, realizamos modelos matemáticos para estimar la probabilidad de cura. Tenemos confianza en que el paciente está curado”, añade Gaebler.

Una nueva vía hacia la remisión

El estudio demuestra que la ausencia total del correceptor CCR5 en el injerto no es imprescindible para lograr una remisión duradera. Aunque los primeros casos apuntaban a que la mutación Δ32 en ambas copias del gen resultaba determinante, trabajos más recientes sugerían que otros procesos podían intervenir. Este nuevo caso refuerza esa idea y añade un elemento relevante: la actividad inmunitaria del propio paciente.

Gaebler subraya un fenómeno poco habitual. “Los anticuerpos del paciente mostraron una actividad ADCC (citotoxicidad celular dependiente de anticuerpos) excepcionalmente fuerte, y es probable que las células NK —un tipo de linfocitos que destruyen células infectadas— contribuyeran a su eliminación junto con la respuesta inmunitaria del donante”, señala.

Según los autores, esta combinación podría haber reducido de forma decisiva el reservorio viral, un reto central en la investigación hacia la cura del VIH. “La eliminación del virus puede depender de mecanismos inmunitarios además de la resistencia genética”, afirma el investigador.

Más opciones para pacientes

La rareza de los donantes homocigotos para la mutación CCR5 Δ32 ha limitado históricamente esta vía terapéutica. Este caso sugiere que un abanico más amplio de donantes podría resultar válido. “Nuestros resultados muestran que la cura es posible sin un donante homocigoto, lo que podría ampliar las opciones a donantes heterocigotos o incluso con CCR5 en su forma natural [tipo salvaje], centrando la atención en la inmunidad y no solo en la resistencia genética”, explica Gaebler.

Pese a ello, el investigador recalcó que esta estrategia no puede aplicarse a personas con VIH sin otra indicación médica. “El trasplante alogénico es demasiado arriesgado para utilizarlo solo frente al VIH. Sigue siendo adecuado únicamente para quienes lo necesitan por una neoplasia. La relevancia más amplia está en usar este conocimiento para diseñar terapias inmunitaria más seguras y escalables”, afirma.

Dos estudios más en la misma dirección

El artículo liderado por Gaebler se publica junto a otros dos trabajos independientes que profundizan en el papel del sistema inmunitario en la remisión del VIH. Uno, dirigido por Steven Deeks, de la Universidad de California, San Francisco, identifica características de las células T asociadas al control viral en personas que recibieron inmunoterapia combinada.

Un tercero, dirigido por David Collins, del MIT y Harvard, describe patrones similares en participantes de ensayos previos destinados a inducir remisiones.

En conjunto, estos estudios refuerzan la idea de que la respuesta inmunitaria —y no únicamente la resistencia genética al virus— desempeña un papel central en la supresión duradera de la infección.

El nuevo caso alemán, conocido ya como el ‘el segundo paciente de Berlín’, vuelve a demostrar que la remisión del VIH puede lograrse mediante rutas diversas y ofrece claves para diseñar futuras estrategias terapéuticas que reproduzcan estos procesos sin recurrir a un trasplante de alto riesgo.

Referencias:

Christian Gaebler et al. “Sustained HIV-1 remission after heterozygous CCR5Δ32 stem cell transplantation”.  Nature, 2025.

Steven Deeks et al. “Correlates of HIV-1 control after combination immunotherapy”. Nature, 2025.

David Collins et al “CD8+ T cell stemness precedes post-intervention control of HIV viremia”. Nature, 2025.