fbpx
Julio De La Lastra, CEO de ONE Panamá, y el capitán Douglas Rodríguez, ambos panameños, cuentan la historia y vida de esta naviera líder
Violeta Villar Liste Foto: VVL | Capitán Douglas Rodríguez | Cortesía PSA

Julio De La Lastra, CEO de ONE Panamá, y el capitán Douglas Rodríguez, ambos panameños, cuentan la historia y vida de esta naviera líder que nace de la fusión de Mitsui  OSK Lines (MOL), Nippon Yusen Kaisha (NYK) y Kawasaki Line (Kline), las tres más grandes del Japón. Explican los desafíos ambientales, de capacitación, la vida y logística que transcurre entre tierra y a bordo

Los cinco años de la naviera ONE Panamá son parte de un camino que describen dos panameños, “capitán en tierra”, Julio De La Lastra, su CEO, y capitán en barco,  Douglas Rodríguez, formado en la Universidad Marítima Internacional de Panamá (UMIP).

Contribuir a la formación del personal panameño y crecer con sostenibilidad ambiental, en impulso al hub logístico panameño, son desafíos de esta historia que desde Panamá también forma parte de una trayectoria global.

ONE tiene más de 170 servicios y cubre cerca de 120 países, con la misión de trasladar mercancías de manera eficiente.

Las personas ven barcos: allí, detenidos, o en tránsito, por las aguas que de uno a otro océano circulan por el Canal de Panamá, pero cada barco es casa, familia, empresa, destino, encuentro y desafío.

Esta fascinación por los barcos, y el mar y la tierra que los cruzan, explican los 44 años de experiencia de Julio De La Lastra en una industria vital para la economía de Panamá.

Dos días como mensajero y a partir de allí, un forjarse camino en una industria que ahora lo tiene como presidente y CEO de Ocean Network Express (ONE) Panamá, que nace de la fusión de las tres navieras más grandes de Japón: Mitsui  OSK Lines (MOL), Nippon Yusen Kaisha (NYK) y Kawasaki Line (Kline).

Magenta, explica, es el color que identifica a la marca, asociado a la energía, la vitalidad y el espíritu de transformación y renacimiento que el magenta y el propio presente de ONE invoca, así como la de su capitán entre tierra y mar.

Su camino en la industria marítima inicia en el año 1979 cuando pasa a trabajar con la naviera   Vapores Boyd.

El día de la entrevista, el gerente de Boyd le dijo que estaba disponible la posición de mensajero. Si bien quería el puesto de oficial de abordaje, estuvo de acuerdo.

A los dos días, le aclaran que sí estaba abierta la posición de oficial y de inmediato lo promueven, pero siempre celebra este inicio anecdótico como mensajero porque conocer cada fase del proceso es parte del éxito en toda gestión de un negocio.

Se hizo a pulso: en esa época no existían programas de estudios marítimos logísticos. La práctica lo acompañó en una larga carrera de 24 años en  Boyd Steamship Corporation:  fue  oficial de abordaje, supervisor, subgerente, gerente y vicepresidente de línea, cargos de responsabilidad que le permitieron conocer en profundidad el negocio marítimo.

A las nuevas generaciones les recomienda aprovechar las ventajas del bachillerato marítimo, y de las carreras universitarias, porque ofrecen contexto y habilidades a quienes deciden escoger el camino de la industria marítima.

“En 1979 era distinto y, a falta de opciones académica, me costó más trabajo, dedicación y compromiso aprender”.

En 2002 tenía la convicción de dedicarse a los negocios familiares, cuando su trayectoria lo consigue en 2003 con la oferta de ocupar la presidencia de Mitsui  OSK Lines (MOL) Panamá, reto que acepta.

En 2018 ocurriría la transición hacia ONE Panamá que es la fusión de los segmentos  portacontenedores de MOL, la naviera para la cual trabajaba, NYK y Kline, es decir, las tres navieras japonesas más grandes del mundo.

El 1° de abril de 2023 marcó el quinto aniversario de esta fusión que en Panamá lideró Julio De La Lastra junto con su equipo de colaboradores.

En retrospectiva, analiza que la digitalización acelera los procesos en la industria y le imprime mayor velocidad. Pero también la dinámica de la comunicación vía correo electrónico y celular, pone al tiempo contra reloj y obliga a conciliar con una parte del negocio que es fundamental: el contacto humano con el cliente.

“De mi época de oficial de abordaje me encantó el intercambio cultural y distintas nacionalidades. Lo más importante es la interacción con las personas. ”.

Joven y posicionada en el mercado internacional

ONE es la naviera más joven en recorrido, con el respaldo del prestigio y la trayectoria de las tres que marcaron su nacimiento.

“Se ha posicionado muy bien en el mercado logístico panameño y a nivel internacional. Apostamos a ser la sexta naviera de portacontenedores más importante del mundo e incluso a subir al peldaño cinco”.

Observa que para alcanzar esta quinta posición se apoyan en las fortalezas de su talento humano que ha adoptado las mejores prácticas.

“Somos flexibles como el bambú y esta resiliencia nos permite adecuar tecnologías, tendencias y procesos”, observa.

Formación universitaria y tutorías, fórmula del éxito en ONE

Son 51 personas quienes forman parte de ONE Panamá, organización que obtuvo el sello de “gran lugar para trabajar” concedido por la organización Great Place to Work.

Reportan a la casa regional en Brasil y apoyan en el servicio a los países de Centroamérica, Caribe y América del Sur.

“La gran ventaja de Panamá no es solo que hablamos el mismo idioma: conocemos los mercados y es un gran hub de trasbordo, tanto de pasajeros como de carga. Une a todos los países y esta posición nos ha dado la versatilidad que el negocio requiere: si hay un problema, es mejor enfrentarlo cara a cara, lo cual nos ha permitido gran desempeño y desarrollo”.

El CEO de ONE Panamá explica que el personal de la empresa en el país se ha formado en distintas universidades panameñas y además complementan con un programa propio de tutorías.

En particular enfatizan en los jóvenes que se acaban de graduar y requieren una práctica profesional en el área marítima, logística y portuaria.

“Forman parte del talento ONE y son expresión de nuestro deseo de contribuir al impulso del entorno local, al entregarles herramientas que potencien sus conocimientos y ayuden a mejorar las demandas de la industria marítima al rotar siguiendo los lineamientos de su centro de estudio y recibiendo capacitación adicional en operaciones, finanzas y logística, entre otras áreas”.

En el caso de la formación de los oficiales, recuerda que cuando era presidente de MOL Panamá firmó acuerdo que permitía a los cadetes de la Universidad Marítima Internacional de Panamá (UMIP) realizar su práctica laboral en los buques de esta empresa e incluso tener la opción de trabajo al culminar la pasantía.

Hay que destacar que el embarque es requisito que deben cumplir los egresados de las carreras de Ingeniería Náutica en Navegación o Ingeniería Náutica en Máquina Naval de la UMIP para ser certificados por la Autoridad Marítima de Panamá como Oficial de Marina Mercante.

A la fecha, este programa permanece y permite a ONE contar con oficiales y capitanes graduados por el convenio.

En la oficina de ONE Panamá opera en particular personal administrativo y de operaciones que se ocupa de finanzas, ventas y control de contenedores.

Observa que el elemento diferenciador de ONE es su personal, “dedicado y muy profesional, comprometido con la visión y misión de ser lo suficientemente grande para subsistir , pero lo suficientemente pequeña para que nos importara el cliente”. 

En el ámbito de las operaciones, el desafío para los clientes significa ofrecerle nuevas rutas y posicionarse atendiendo los nuevos retos sociales y ambientales.

“No se trata solo de hacer negocios: el valor reside en trabajar con aportes a la sociedad y al ambiente”.

“Como naviera estamos construyendo una línea de nuevos  10 barcos con estrategias de consumo de hidrocarburos biodegradables y modelos sostenibles en su diseño que ayudan a reducir la huella de carbono”.

El tema agua que es demandante en la vida del Canal de Panamá, también tiene en ONE esfuerzos por apoyar las decisiones que emanen de las autoridades para garantizar la sostenibilidad del entorno marítimo.

De igual modo, son respetuosos de las limitaciones que ayuden a proteger a las ballenas y otras especies de fauna marina.

Estas decisiones en mar también operan en oficina con políticas de reciclaje, reducción de consumo de aire acondicionado, menor consumo eléctrico y acciones de Responsabilidad Social Empresarial (RSE).

“Las navieras siempre tendrán un lugar en la historia de los países, porque el movimiento de carga óptimo y eficiente se hace a través de barcos, entendiendo que los aviones son más rápidos pero costosos”.

En sus 44 años en la industria, considera que los desafíos también involucran a la dirigencia y actores del negocio marítimo, porque imposiciones excesivas de costos a las navieras pueden comprometer la sostenibilidad de la operación.

En lo personal, y como equipo, “es ser tu mejor versión como persona” y, esta frase, tiene en su madre ya fallecida, un recordatorio de la importancia de lograr ser recordado por haber marcado vidas y trato con respeto y en igualdad.

Hombre de tierra que conoce el mar con prudencia, no olvida la otra lección que dejó la pandemia: “Ser solidarios es la única forma de salvar a la humanidad”.

De tierra al mar, con un capitán que lleva carga de ONE

La flota marítima de ONE depende de manera exclusiva de Japón. Su tripulación hace posible que los barcos transiten con su cargamento valioso de uno a otro continente.

Y en el timón, que indica mando y alta responsabilidad, capitanes como el panameño Douglas Rodríguez, quien acababa de llegar al puerto PSA Panama International Terminal S.A., situado en la antigua base naval de Rodman, en el oeste de la entrada del Canal, en el lado Pacífico, luego de 10 días de travesía desde puertos de Estados Unidos.

Este diálogo periodístico en PSA fue posible por gestión del CEO de ONE, autorización y cortesía de PSA y guía de César Pineda, del Departamento de Operaciones de ONE Panamá, encargado de la recepción de barcos y de la operación de contenedores en los puertos.

Pineda está a punto de cumplir cinco años en ONE Panamá, forma parte del equipo de 51 colaboradores y ha seguido la evolución de esta cumpleañera.

Formado en la Universidad Marítima Internacional de Panamá (UMIP), trabajó un año en MOL.

César Pineda

Su trabajo es desafiante porque está a cargo de tener a punto la recepción del barco, notificar la visita a la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) y los detalles (itinerario, ruta en aguas panameñas…), un trabajo que implica control de procesos y también garantizar atención y servicios a la tripulación, oficiales y capitán.

Cae la tarde en el puerto de PSA y ya el barco de ONE ha llegado. Sus medidas son de vértigo:  56 metros de alto, desde la parte más profunda del barco (parte externa) hasta la parte superior del mástil. De ancho, 294.12 metros: de alto, un rascacielos en el mar.

Las medidas del barco son de vértigo: es una historia en alta mar

PSA se define como un “importante puerto de escala para las líneas navieras que manejan contenedores y carga Ro-Ro”.

La empresa documenta que la terminal ha operado con 11 grúas pórtico, 9 RTGs (grúas de patio sobre neumáticos de caucho) y 12 RMG (grúas de patio sobre rieles).

La capacidad anual de PSA Panamá es de 2 millones de TEUS  (unidad de medida que equivale a  20 pies) da empleo a más de 1,030 colaboradores y aporta a la economía del país.

Puerto de PSA Foto | Cortesía

El capitán Douglas Rodríguez se graduó en el año 2004 de la UMIP y en el 2005 se hizo cadete. En el año 2008 ingresa como tercer oficial en la naviera NYK y comienza su trayectoria: más de 20 años en la marina mercante.

De los tiempos difíciles, los 11 meses sin poder bajar del barco a causa de la pandemia. Entrenado en las lides del oficio, lo acompañó la resiliencia.

Una familia espera siempre al capitán: su esposa, Rina Fandiño; su hija Diana de 10 años y su hijo Samuel de 5 años. La vuelta, y el reencuentro acercan la distancia que nunca parece haber existido. “Sabía lo que venía, pero es una emoción cada vez que nos vemos. La empresa lo quiere mucho y su carrera es bonita y como familia nos hemos mantenido”, cuenta su esposa.

El capitán habla desde el NYK Remus que viaja con bandera panameña y atraca en PSA bajo la logística de ONE.

El capitán Douglas Rodríguez junto con la tripulación Foto | cortesía

Luego del trasbordo de contenedores en puerto panameño, seguiría hacia Cartagena en rumbo a Europa y luego de regreso a cubrir la ruta.

Como capitán, monitorear el clima y cuidar que no afecte la carga seca que trasladan los contenedores, es parte de sus retos cotidianos.

“El cambio climático es causa de tormentas más frecuentes. El monitoreo ha mejorado porque contamos con más recursos que ayudan a tomar medidas rápidas de desvío y reducción de velocidad”.

El trabajo en equipo multinacional es parte del éxito: tripulantes de Filipinas, Indonesia, India, Singapur y de países de Europa, son mayoritarios.

Explica que el profesional panameño trabaja más en cruceros y menos en marina mercante. Les hace un llamado a los nuevos egresados, porque si bien no es carrera fácil, y menos por estar lejos, es otra oportunidad de servicio.

Esta familia del mar que viaja con ONE

Desde el puente de navegación, el capitán Douglas Rodríguez describe las posiciones y misiones que se cumplen en un buque como el NYK Remus que traslada contenedores de carga seca de ONE. 4,888 TEUS admite este barco.

Desde la mañana inicia la jornada de sincronía perfecta con el amanecer en cubierta.

El primer oficial se encarga del mantenimiento del buque, de las tareas de seguridad y salvamento.

El segundo oficial de navegación está atento a las cartas náuticas, al plan de viaje y vigilancia de radares y equipos que deben funcionar de manera sincronizada.

El tercer oficial da apoyo al primer oficial en lo que respecta al cuidado de equipos de salvamento y contra incendio.

Como capitán, es el responsable de lograr el óptimo desempeño del conjunto de la operación.

Entre otras acciones con viento a favor de la sostenibilidad, al atracar el barco, los generadores de energía se apagan por tiempo prudencial, y se apoyan en los servicios de tierra para reducir las emisiones.

Con respecto al combustible, emplean una nueva generación de gasoil con menos cantidad de sulfuro.

“Ya en la navegación, si hay mal tiempo se reduce la velocidad porque de nada vale consumir más combustible”.

El futuro verde es indetenible. Cuenta que la incorporación de paneles solares en algunos barcos es un camino hacia la reducción del uso de combustibles fósiles.

Por otra parte, son respetuosos del convenio sobre la gestión del agua de lastre, adoptado por la Organización Marítima Internacional, para neutralizar el impacto de los patógenos y evitar afectar los mares.

El encuentro con el Canal de Panamá

En 2010 transitó por primera vez el Canal de Panamá. El paso del tiempo, y los sucesivos tránsitos, no cambian su emoción cuando llega a Panamá: “Transitar por el Canal es sentir que estoy en casa”.

Su padre es de Bocas del Toro y su madre de Herrera. La pasión por los barcos y el mar le vienen en la sangre: su padre, quien se llama como él, es piloto del Canal y tres hermanos también se inclinaron por la profesión marítima.

“La navegación por el Canal debe ser lenta; con cuidado y meticulosa por la naturaleza de las maniobras. Al llegar a las compuertas hay que cuidar no golpear las compuertas con el barco”, relata.

Antes de ingresar al Canal, son los prácticos quienes se encargan de asumir el control de la navegación, con apego a las normas locales e internacionales, mientras el capitán titular del barco los acompaña en la tarea.

Es un proceso repetido cada vez que vuelve a casa en este tránsito circular de llegadas y venidas.

Cae la noche en PSA. La descarga del barco se adelanta y las grúas despiertan su poderío para ayudar a continuar el viaje, hacia otros barcos y rutas, de esta mercancía que unos despiden y otros reciben.

Proceso de descarga en PSA Foto | Cortesía

Es parte de la experiencia del hub logístico panameño que de la tierra al mar pone la carga en movimiento para que comida, medicinas, ropa o repuestos puedan transitar.

Largas horas de una historia que se cuenta, en esta oportunidad desde la mirada de ONE Panamá, de su CEO, Julio De La Lastra y el capitán Douglas Rodríguez, voces que le ponen rostro y corazón a la industria del mar, alma de Panamá.

Violeta Villar Liste
[email protected]