El Dr. Fermín Acosta, quien forma parte del TB team, dirigido por el Dr. Amador Goodridge, se ha dedicado al estudio de esta cepa que presenta mayor virulencia, resistencia y tasas de transmisión más altas. Sus estudios tienen impacto regional
Por: Violeta Villar Liste
El estudio de la circulación regional de la cepa muestra el impacto de las migraciones y cómo “ha desarrollado resistencia a los medicamentos en contextos de alta densidad poblacional y sistemas de salud fragmentados”.
La tuberculosis (TB) es una enfermedad y un desafío para la salud pública. Eliminarla, un compromiso que explica el empeño de la ciencia por buscar nuevos medicamentos, vacunas y estrategias de prevención.
Una preocupación asociada a la TB es la existencia de cepas resistentes a los medicamentos. En el caso de Panamá, y en concreto en la provincia de Colón, destaca la cepa Beijing, “que se distingue por su rápida transmisión y resistencia, representando un desafío global”.
Mayor virulencia, resistencia y tasas de transmisión más altas, son tres características de esta cepa, responsable de 1 de cada 3 casos de tuberculosis en Colón.
De su estudio se ocupa el Dr. Fermín Acosta, quien forma parte del TB team, dirigido por el Dr. Amador Goodridge, desde el Instituto de Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología de Panamá (Indicasat): Dr.Amador Goodridge: Erradicar la tuberculosis de la mano con la ciencia, con nuevas vacunas y en red nacional
Una historia de esfuerzo y amor por la ciencia

El Dr. Fermín Acosta nació en la Comarca Ngäbe-Buglé. Luego de recibir su grado de formación en Biotecnología por la Universidad Santo Tomas en Chile, gracias a una beca de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), regresa a Panamá y se incorpora como asistente de investigación en el Grupo de Biomarcadores de Tuberculosis en el Indicasat AIP.
Luego, culmina su doctorado en la Universidad de Alcalá de Henares en el 2020 (España) “con la calificación máxima sobresaliente de tesis doctoral y la obtención de Cum-laude”.
En el año 2021 fue seleccionado por el Programa de Inserción de Talento de la Senacyt (2021). Forma parte del Sistema Nacional de Investigadores (SNI)
Contó el Dr. Goodridge en entrevista reciente, que el Dr. Acosta “fue el único estudiante de su generación que llegó (de regreso de sus estudios en el exterior a Panamá) con una publicación científica; era algo inusual que un joven graduado de licenciatura ya tuviera un artículo”.
Es investigador postdoctoral en el Centro de Biología Celular y Molecular de Enfermedades del Indicasat-AIP en Ciudad del Saber.
Es una persona que se preocupa por lograr que la ciencia llegue a las poblaciónes vulnerables en forma de respuestas a sus problemas de salud.
De manera fundamental, sus estudios han permitido “identificar patrones de resistencia a los medicamentos en cepas como Beijing y otras variantes prevalentes en la región”.
“La idea es entender la cepa que más circula en el país; ver cómo podemos romper la cadena de transmisión y que no se sigan generando más casos secundarios”, precisa.
Diversidad genética de la cepa Beijing y resistencia a los medicamentos
El Dr. Acosta reitera que la cepa Beijing de la TB “se distingue por su rápida transmisión y resistencia”.
“En Panamá, particularmente en la ciudad de Colón, hemos estudiado la diversidad genética y la evolución de esta cepa para comprender mejor su comportamiento y diseñar estrategias efectivas de control”.
Durante el periodo de enero 2021 a octubre de 2023, analizaron 274 muestras de la bacteria Mycobacterium tuberculosis provenientes de pacientes en Colón.
“Este trabajo incluyó pruebas avanzadas como GeneXpert y MTBDRplus para determinar resistencia a medicamentos, técnicas de identificación genética específicas de clasificación de la cepa (ASO-PCR) y análisis de genoma completo (WGS), dirigido a investigar su evolución y relación con otras cepas en la región”.
El investigador describe que “los resultados mostraron que el 31.7% de las muestras pertenecían a la sublínea Beijing L2.2, una variante moderna de la cepa Beijing. Además, el análisis genómico confirmó que esta sublínea (L2.2.1 M3) es altamente prevalente en Panamá, con una conexión genética estrecha con cepas encontradas en Perú, Colombia y Guatemala”.
Un hallazgo relevante es que si bien “la mayoría de las muestras eran susceptibles a los medicamentos, se identificaron casos de resistencia a rifampicina y multidroga, lo que subraya la necesidad de vigilancia constante”.
La Mycobacterium tuberculosis es la bacteria que causa la tuberculosis (TB), una “enfermedad infecciosa que casi siempre afecta a los pulmones. Se transmite de persona a persona a través del aire. Los síntomas de la tuberculosis activa incluyen tos, dolores torácicos, debilidad, pérdida de peso, fiebre y sudores nocturnos”, define la OPS.
“Este estudio también reveló que la evolución de la cepa Beijing en Panamá es relativamente lenta, lo que podría estar relacionado con su transmisión endémica en Colón”.
Estos datos recientes son la base para proponer “combinar información genética con datos epidemiológicos” y así identificar las zonas críticas de transmisión y enfocar las medidas de control en estas áreas.
Evolución de las cepas de TB en el continente

Los estudios del Dr. Acosta y el TB team tienen impacto regional. De hecho, realizan un mapeo genómico de cepas latinoamericanas.
Con Perú y Colombia han estado verificando los datos genómicos de las micobacterias que circulan en estos países.
“Colombia es un país que está cerca de nosotros; es nuestro vecino y por el flujo migratorio puede ocurrir introducción de cepas en el país”.
Resalta que las herramientas genómicas permiten hacer la comparación entre la cepa de Panamá con la colombiana, al igual que con Perú.
El estudio de la circulación regional de cepas de tuberculosis muestra el impacto de las migraciones y cómo “desarrollan resistencia a los medicamentos en contextos de alta densidad poblacional y sistemas de salud fragmentados”.
El investigador explica que este conocimiento puede ayudar a mejorar las estrategias de control en zonas urbanas y rurales, tanto de Panamá como de países de la región.
Micobacterias no tuberculosas
El Dr. Acosta también ha desarrollado una línea de estudio de las llamadas micobacterias no tuberculosas.
Son bacterias que causan infecciones en humanos y, a diferencia de Mycobacterium tuberculosis que se transmite de persona a persona, son bacterias que están en el ambiente, en el suelo, en el agua o en áreas hospitalarias y pueden afectar a personas inmunosuprimidas o con complicaciones de salud, en pulmones, ganglios linfáticos, huesos o piel.
La idea es estudiar la prevalencia en áreas específicas como unidades de cuidados intensivos para determinar el riesgo de un paciente diabético o con VIH, por ejemplo.
El mejor conocimiento de estos patógenos permitirá diagnósticos más rápidos y con menos margen de error.
Nueva vacuna; más esperanzas

En relación con el desarrollo de nuevas vacunas que ayuden al fin de la TB, reflexionó que la vacuna contra la enfermedad, conocida como BCG o bacilo de Calmette-Guérin, tiene más de 100 años.
Ayudó a reducir la mortalidad y los casos de TB, pero es necesario adaptar a cepas como la Beijing.
Dijo que la Universidad de Zaragoza en España está desarrollando una vacuna (fase II). En Sudáfrica también hay avances.
La historia demuestra que “las bacterias y los patógenos tienden a cambiar su parte genómica; a mutar cada cierto tiempo: evaden el sistema inmunológico y es necesario contar con una vacuna eficaz”.
El Dr. Acosta afirma que estamos en el camino de erradicar la TB, proceso que debe estar acompañado de conciencia en la población y docencia.
“En Panamá estamos en el proceso, con la actualización de los programas académicos, más docencia e investigación”.
La idea, observa, es que se pueda avanzar en este conocimiento, no solo en la ciudad sino en las comarcas donde la atención es limitada.
Reflexiona que combatir la TB demanda esfuerzos conjuntos del sector oficial, de comunidad médica, científica y de la comunidad.
Por su parte, junto a su equipo, se han propuesto ayudar a la mejor comprensión de cómo se transmite la cepa Beijing, la más virulenta y resistente, y en general, evitar más casos y mortalidad debido a la tuberculosis.
El TB team sale del laboratorio para conectar desde los medios, las redes sociales, de la mano con la cultura y la educación, y así crear docencia y conciencia en la población sobre la enfermedade. El trabajo del Dr. Fermín Acosta es un ejemplo. Se trata de una lucha colectiva por la salud y alcanzar la meta de fin de la TB.
Por: Violeta Villar Liste | [email protected]