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El 9 de octubre se cumple el primer año del fallecimiento del Dr. Manuel Velasco Pernía, reconocido médico, farmacólogo, docente e investigador venezolano, quien dejó una huella en la Medicina venezolana y regional. Compartimos al respecto semblanza publicada por la Dra. Claudia Blandenier en la Gaceta Médica de Caracas (Volumen 130 No 3. Julio-septiembre 2022), como homenaje a su memoria

Por: Claudia Antonieta Blandenier Bosson de Suárez

Por: Claudia Antonieta Blandenier Bosson de Suárez
Profesora titular jubilada de la Facultad de Medicina. Universidad Central de Venezuela. Anatomopatólogo cardiovascular.
Individuo de Número, Sillón XXI. Academia Nacional de Medicina. Venezuela
ORCID: 0000-0001-6405-1059.

Dedicatoria:

A. Magaly Villegas Godoy de Velasco, esposa e hijos

A todos sus amigos de la Universidad Central de Venezuela y de la Academia Nacional de Medicina

Agradecimientos:

Al abogado Jorge Velasco Villegas, sin cuya colaboración hubiera sido imposible relatar los aspectos más personales de su padre, el Dr. Manuel Velasco.

A la abogado Mervin Ortega Díaz de Guerra, asesora jurídica de la UCV, quien proporcionó los datos del expediente del Dr. Velasco para la elaboración de su trayectoria universitaria.

Introducción


            El Dr. Manuel de Jesús Velasco Pernía, es uno de los más reconocidos y ensalzados médicos de nuestra Facultad de Medicina de la Universidad Central de Venezuela, llamado por algunos de sus colegas como el “gigante de la medicina”. Doctor en Ciencias Médicas, farmacólogo, docente, académico e investigador venezolano inolvidable en la comunidad galena venezolana e internacional. Profesor Titular y jefe de la Cátedra de Farmacología de la Facultad de Medicina” José María Vargas” a dedicación exclusiva. Consagró su vida a la docencia y contribuyó a la formación de un gran número de médicos, farmacéuticos y farmacólogos venezolanos, como tutor y orientador en muchos trabajos de ascenso en la carrera académica de docentes en la Escuela José María Vargas y en otras de la Facultad de Medicina.  

Durante más de tres décadas, el Dr. Velasco no solo se destacó por su capacidad docente, sino por sus investigaciones en el campo de la hipertensión arterial, diabetes y otras complicaciones cardiovasculares / metabólicas.

Por su capacidad organizativa extraordinaria fue nombrado director de la Unidad de Farmacología Clínica (CPU) de la Escuela de Medicina José María Vargas y llegó a ocupar los importantes cargos administrativos de Coordinador General y el de Decano Encargado de la Facultad de Medicina de la UCV (1). Figura 1.

Entre las actividades gremiales más importantes que desempeñó el Dr. Velasco, los especialistas en Farmacología, recuerdan que él reorganizó y revivió a dos Sociedades médicas importantes: la Sociedad Venezolana de Farmacología y la Sociedad Latinoamericana de Farmacología. En 1977, el Dr. Velasco también fue el fundador del Comité Venezolano de Hipertensión Arterial, adscrito a la Sociedad Venezolana de Cardiología, organización que luego se transformaría en la Sociedad Venezolana de Hipertensión arterial,la cualnació en 1998, bajo la presidencia del reconocido cardiólogo Simón Muñoz Armas y de Manuel Velasco Pernía, en calidad de secretario.

Cuatro años antes, en 1994, el Dr. Velasco también había participado activamente en la fundación de la Sociedad Latinoamericana de Hipertensión arterial.

            Otra actividad relevante que enaltece la obra gremial del Dr. Velasco, en el medio de la Medicina nacional, fue la divulgación de los adelantos, hechos e investigaciones de sus colegas, en revistas y libros. Para el año 2021, el Dr. Velasco tenía más de 44 años de experiencia editorial.

No solo fue editor de varias revistas médicas como la Revista de la Asociación Venezolana de Farmacología y Terapéutica, la Revista Diabetes Internacional, la Revista Cardiometabólica, la Revista Venezolana de Hipertensión arterial y la Revista de la Facultad de Medicina, sino que, con su cooperación se editaron más de 14 libros, sin contar numerosas memorias de congresos y de otros eventos similares.

Últimamente, fue editor en jefe de la primera edición de la revista” Nuevos avances en Endocrinología, metabolismo e Inmunología”, la cual comenzó a circular en enero de 2021 y fue insertada en el catálogo de “Bentham Science Publisher “, editorial de Ciencia, Tecnología y Medicina (STM) (2).

Cuando lo sorprendió la muerte a los 78 años de edad, el 9 de octubre de 2021, era el editor en jefe de la centenaria e importante revista médica la “Gaceta Médica de Caracas”, órgano divulgativo de la Academia Nacional de Medicina, institución a la cual pertenecía en calidad de Miembro Correspondiente, Puesto 30. Además, también en esta corporación, ocupaba el cargo de coordinador médico de La Web de la Salud.

Es importante recalcar que el Dr. Velasco, logró colocar estas revistas en el ámbito internacional, porque tuvo la iniciativa de estar acompañado de un comité editorial internacional, compuesto por expertos de varios países de América latina, Estados Unidos, Méjico, Canadá, Alemania, República Checa, España, Italia y Reino Unido.

Además, fue nombrado como gobernador por Venezuela de la Sociedad Interamericana de Hipertensión arterial, cargo que desempeño con éxito siguiendo su línea de acción que lo impulsó a asumir nuevos desafíos, como estructurar un equipo de carácter nacional que aglutinara el esfuerzo de las diferentes instituciones y personalidades líderes en el campo de esta especialidad médica (3).

Nos unimos a los sentimientos del Dr. Carmona quien opinaba que la gente como Manuel, nunca moría, que estaría permanentemente vivo en los corazones de quienes no sólo lo respetaban y admiraban, sino también los que compartimos con él una estrecha relación familiar (4).  

El objetivo de este trabajo, es rendirle un póstumo homenaje al Dr. Manuel de Jesús Velasco Pernía, quien se destacó como profesor e investigador en su desempeño no solo en la Facultad de Medicina de la Universidad Central, sino también en la Academia Nacional de Medicina, entre otros ámbitos médicos. El Dr. Velasco fue y sigue siendo un ejemplo para las futuras generaciones de médicos y hombres de Venezuela

Datos personales

El Dr. Manuel de Jesús Velasco Pernía, nació el 28 de noviembre de 1943, en la población de Santa Bárbara, ciudad llanera, capital del Municipio Ezequiel Zamora del Estado Barinas o Altamira de Cáceres (1577-1628). Santa Bárbara había formado parte del distrito Pedraza del estado Barinas hasta 1970.

La fecha de la fundación de Santa Bárbara, es discutida. Algunos historiadores, refieren que fue fundada en el siglo XVIII y para fijar la fecha exacta, tomaron como referencia la creación de la Diócesis Eclesiástica en 1964. Sin embargo, los datos históricos mencionan que, en 1911, con el padre José Adonay Noguera Mora y otros personajes del lugar, fundaron en ese sitio la Comunidad del Horno, denominada de esta manera, por el horno que se construyó para obtener cal para pintar la iglesia de Santa Bárbara. La gente del lugar vivía de la producción de carne, leche de ganado vacuno en primer lugar y de la siembra del maíz, arroz, ocumo entre otras legumbres. Figura 2.

 Los padres de Manuel fueron: Sofía Pernía y Pascual Velasco, originarios del estado Táchira (Pregonero) y de Mérida (Zea) respectivamente. De la unión de Sofía y Pascual, nacieron siete (7) hijos de los cuales, Manuel de Jesús, fue el menor de los hijos varones. Pascual Velasco era hijo de Giovanni Francesco Velasco P, italiano radicado en Zea y casado con Teresa de Jesús Márquez Mendes.

El apellido Velasco es de origen italiano específicamente de la isla de Elba (en italiano: isola d’Elba y antiguamente Ilva o Aethalia) , de origen volcánico de unos 225 km², situada al oeste de Italia, y perteneciente a la provincia de Livorno (Italia). Forma en su totalidad parte del parque nacional Archipiélago Toscano que se extiende por las provincias de Livorno y Grosseto. Además, es la isla más grande del archipiélago Toscano. El apellido Pernía es procedente del Valle de Liébana, montes de Santander que luego pasaron a Palencia, a Clavijo y Andalucía de España (5).

Por la cercanía de los Andes con los llanos de Barinas, era frecuente la emigración de los andinos a estas tierras llaneras, aunque según algunos historiadores, Barinas, al igual que todas las ciudades vecinas del llano venezolano, vivió absolutamente sola debido a la ausencia de vías de comunicación con los centros más adelantados, ya que cinco grandes ríos la aislaron inclementemente hasta 1948 (6).


Manuel recién graduado de médico, cuando estaba ejerciendo en el Seguro Social de los Teques, conoció a la joven Magaly Villegas Godoy, de origen Trujillano. Cuando le fue concedida una beca a Manuel, para continuar estudios de posgrado en los Estados Unidos de América, se efectuó el matrimonio en la iglesia catedral de San Felipe Neri, en la ciudad de los Teques. Su esposa fiel y consecuente lo acompañó al extranjero y estuvo siempre a su lado hasta el momento de su fallecimiento.  De esta unión, nacieron dos hijos: Manuel Alejandro y Jorge Luis, ambos, abogados. Manuel pudo antes de fallecer, disfrutar el afecto y vivencias de 4 nietas. Figura 3.

La época histórica de la infancia y adolescencia de Manuel Velasco. Santa Bárbara de Barinas. Estudios de primaria, bachillerato y Medicina.

Cuando nació Manuel de Jesús, comenzaba la presidencia del General Isaías Medina Angarita (1941-1945), durante la cual, se dieron los primeros pasos hacia la apertura democrática con la fundación de los partidos políticos como, Acción Democrática (1941) y el Partido Comunista de Venezuela, así como, la formación de la agrupación de los empresarios en Fedecámaras. Se hicieron importantes reformas y obras que modernizaron la ciudad capital, como lo fue la construcción de la urbanización del Silencio. Se funda el periódico “Últimas noticias”, luego “El Nacional” y se compra el terreno de la hacienda Ibarra para comenzar con la construcción de la Ciudad Universitaria de la Universidad Central de Venezuela y se redacta la nueva Ley de Hidrocarburos (7).

            Sin embargo, la modernización no alcanzó a la mayoría de los pueblos del interior del país, especialmente a los pueblos llaneros. Fue solo a partir de la década del 50, cuando comenzaron a fundarse en Santa Bárbara, algunas instituciones públicas.

El sacerdote Félix de Zubicaray funda en 1953, el único grupo escolar de Santa Bárbara, denominado con el pomposo nombre de “Márquez del Pumar”, donde Manuel, cursó sus estudios de primaria. Se menciona para la época la existencia en esa localidad de un comedor escolar y la construcción del hospital “Br Rafael Rangel”, así como la instalación de la primera planta eléctrica. El establecimiento de la compañía estadounidense Soconi Vacum Oil en el Yaure y en el caserío de la Idea, favoreció la siembra del maíz, la yuca, el arroz, el plátano y el ocumo, así como la aparición de fincas, las cuales funcionaban aun con maquinaria rudimentaria.

De tal manera que la infancia del Dr. Velasco transcurrió en la Venezuela de las “Casas muertas” de Miguel Otero Silva; en un pueblo rodeado de hermosos paisajes del piedemonte andino y cálidos ríos, pero con enfermedades endémicas como el paludismo, la Enfermedad de Chagas, la Anquilostomiasis, entre otras patologías propias de estas regiones y de la época sanitaria.

Hasta la década del 60, aun no se había construido el templo (1961-62), ni los puentes sobre el río Santa Bárbara en San Antonio de Pajén, Suripá ni los de la “carretera negra”. De tal manera que los habitantes de Santa Bárbara tenían que desplazarse a la capital, Barinas para los bautizos, matrimonios y otras celebraciones eclesiásticas. La Catedral de Barinas, en su advocación de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza (Navarra, España) data de la época colonial española entre 1770 y 1780, es una joya patrimonial.

Deducimos por las propias palabras de Manuel, que tuvo “una infancia humilde pero muy bonita, jugando en las fincas, comiendo frutas y bañándose en los ríos” lo cual era propio de los niños llaneros. Desde su infancia era aficionado a la música propia del llano y a las rancheras mejicanas, las cuales se oían predominantemente en todos los radios de aquella época.

Esta confesión revela que, Manuel como muchos niños del campo y los que vivíamos en el interior del país en esa época, no disponía de juguetes modernos.  En esos ambientes, los juguetes eran rudimentarios fabricados por los mismos niños, como los trompos hechos de madera, los carritos de latas arrastrados con una cabuya, y quizás disponían de algunas metras que traían de las ciudades más modernas y cercanas cuando había carreteras o los llamados” caminos reales”.

Usualmente, cuando los niños vivían cerca de ríos, manantiales, pozos o lagunas, ellos se bañaban y jugaban en el agua como lo describió Manuel, de tal manera que estos niños aprendían rápidamente a nadar. Algunos niños tenían caballos o montaban burros para desplazarse.

Sin embargo, ya para la época de Manuel, aparecieron las bicicletas en Barinas. Era un niño que le encantaba andar en bicicleta con sus amigos. Obtuvo una de ellas de marca Benotto, cuando se ganó un premio por haber llenado un álbum de barajitas de los próceres de Venezuela.

Las bicicletas de esa marca eran famosas, habían llegado a Venezuela a mediados de 1948.

Una vez terminados sus estudios de primaria, sus padres buscando una mejor calidad de vida como nos refiere su hijo Jorge, se mudaron a la capital (Barinas), donde Manuel comenzó sus estudios de Bachillerato en el Liceo O’Leary.

Posteriormente, en 1955, cuando él contaba con 15 años, su familia decide mudarse a los Teques, ciudad del estado Miranda, donde completó sus estudios de bachillerato en el Liceo” Francisco de Miranda”, en 1958.  En este plantel, Manuel, se destaca como uno de los mejores estudiantes, mereciendo el apodo de “El 20-20, que le colocaron sus compañeros de estudio.

El mismo Manuel contaba que, cuando su profesor de Física Rafael Ortuño Suárez, basado en su facilidad para esta materia, le aconsejó:” ahora Manuel, deberíasestudiar Ingeniería, Física o Matemática”,a lo que él le contestó, muy firme y decidido: “Seré médico” (8).

En 1961, Manuel comienza a estudiar Medicina en la Universidad Central de Venezuela. Durante sus estudios, Manuel se destaca como un estudiante brillante, obteniendo cuatro diplomas de excelencia con 19 y 20 puntos de calificación en las materias de: Bioquímica, Medicina I, Farmacología y Toxicología y Medicina IV.  Se graduó de Médico Cirujano en el año 1968, de manos del rector Dr. Jesús María Bianco y en 1979, obtuvo el Título de Doctor en Ciencias Médicas.

Algunos aspectos de su personalidad

Llanero honorable y ejemplar desde todo punto de vista, pero, ante todo, el Dr. Manuel fue, un buen hijo, esposo, yerno, padre y abuelo. En principio, siempre colocó su familia en el primer lugar de sus afectos y actividades. Una anécdota que nos recuerda su hijo Jorge, ilustra ampliamente la grandeza y generosidad de la personalidad de Manuel.

Cuando apenas se graduó de Médico, comenzó a trabajar en diferentes centros de salud y con la participación de su hermano José Ramón, pudieron ahorrar el monto que costaba una casa en la California Sur en Caracas, para alojar a sus padres y hermanas.

Cuando se enfermó su suegra, Manuel estuvo permanentemente pendiente de su recuperación y pedía oraciones por ella. Esta actitud la pude comprobar personalmente con las constantes llamadas telefónicas que me hacía, para compartir conmigo su dolor y preocupación, la cual aumentó cuando la señora falleció (9).

El Dr. Enrique Santiago López Loyo, presidente de la Academia Nacional de Medicina, lo describe como lo vimos siempre nosotros, sus amigos y conocidos: colaborador, dispuesto siempre a trabajar, con una extraordinaria hoja de vida científica. Su trabajo al frente de la Gaceta Médica de Caracas, marcó huella y dejó un gran legado. El Dr. López consideró que tuvo la fortuna de “conocer en la Academia Nacional de Medicina a este hombre afectuoso”. En efecto, el Dr. Velasco era proverbialmente afectuoso, lo que lo diferenciaba de muchos de nuestros colegas.

             El Dr. Velasco era solidario, con un espíritu de servicio y entrega. Generoso al compartir sus conocimientos, entregar su amistad y buscar la proyección de sus colegas. Además, era sumamente agradecido.

Yo recordaba sus palabras de elogio y agradecimiento que expresaba sobre el eminente internista, Dr. Rafael Muci- Mendoza, quien, según su relato, le había salvado la vida cuando se le presentó una grave complicación yatrogénica. En esta circunstancia, generoso y discreto, no nombraba el galeno causante de su enfermedad por mala praxis.

Según la mayoría de sus amigos fue fiel, sincero y abnegado. Su amistad siempre fue invalorable. No fue una persona envidiosa; reconocía el valor moral y académico de sus colegas. Su temperamento era alegre, jovial, abierto a las alabanzas y ajeno al comentario amargo y desagradable.

En una entrevista realizada a varios amigos de Manuel,  la cual fue publicada, se puede evidenciar la multitud y variedad de elogios que emitieron los Dres: Augusto Campos, Freddy Contreras, Honorio José Silva Alvarado, Oswaldo Carmona, Igor Morr García, Rafael Muci Mendoza, Salvador Pluchino, Oscar Aldrey, Lilia Cruz, Henry Collet, Juan A Yabur , Leopoldo Briceño-Iragory, Alicia Ponte Sucre, Harry Acquatella, Valmore Bermúdez, Juan B De Santis, Carlos M Ferrario, Bernardo Rodríguez-Iturbe ,Rafael Hernández Hernández, José Antonio O’Daly Carbonell,  Luis Alcocer, Gianfranco Parati, Ronald Evans, Minofa C Prieto, Lorena Cudris Torres, José Ramón Poleo, Claudio Ferri y Claudia Blandenier de Suárez, entre muchos otros(10).

Testimonios de recuerdo personales

Hace más de 50 años, conocí, a Manuel Velasco a través de mi esposo José Ángel Suárez Rengifo, quien en aquel entonces era presidente de la Comisión de la “Revista Médica Acta Médica venezolana”, órgano del colegio de Médicos del Distrito Federal.

A partir de este momento, mantuvimos una estrecha comunicación debido a su actitud abierta y amigable. Posteriormente, me llamó para colaborar con la Revista de la Facultad de Medicina y pude comprobar sus cualidades organizativas. Una de ellas era su puntualidad, la revista se publicaba regularmente. Por otra parte, siempre me motivaba para publicar mis trabajos sobre Patología Cardiovascular. Un hecho inolvidable sucedió recientemente, cuando nosotros, nuevamente reunidos en la Academia Nacional de Medicina, Manuel se ocupó que yo realizara la semblanza de mi promoción de médicos del 63, de la cual estuvo atento para su publicación hasta el último momento de su vida, aun estando enfermo, varios días antes de fallecer, actitud que considero heroica (11).

Manuel, coleccionista

Como relatamos anteriormente, en su adolescencia, Manuel, se ganó una bicicleta cuando llenó su álbum de “barajitas”. Las barajitas comenzaron a venderse en quioscos y librerías del país, en la década del 50. El álbum de Manuel, contenía las barajitas de todos los próceres y de las batallas más famosas de la Independencia Venezolana, con las cuales se narraban las peripecias de esta gesta.

Las barajitas se consideraban un medio importante para la enseñanza histórica del país a los niños. Los niños intercambiaban cromos para completar los álbumes y al mismo tiempo aprendían los temas que se exhibían.

Manuel recordaba que le costó mucho conseguir la barajita de Pedro de la Trinidad León de la Torres y Arrieche (militar caroreño, independentista a las órdenes del Libertador), para ganarse el premio que consistía en la bicicleta. En este relato, constatamos que ya a temprana edad, Manuel, mostró ser poseedor de un temperamento competitivo, tenaz y con ganas de progresar.

La afición por las colecciones continuó durante toda su vida. El Dr. Velasco fue un coleccionista numismático de monedas antiguas, no solo de nuestro país, sino también de monedas extranjeras.

Según su amigo César Contreras, el Dr. Velasco perteneció a La Orden Exhibís, Asociación de Escritores del estado Miranda (1985). Esta afirmación significa que era, poseedor de libros raros y valiosos de medicina entre otros, los cuales fueron sellados con escudo de la orden de Santo Domingo colocado sobre las tapas de la encuadernación en su biblioteca en ExLibris (12). Figura 4.

Vida profesional

Ingreso a la Facultad de Medicina

La vocación docente del Dr. Velasco se manifestó tempranamente, cuando ingresó en la Facultad de Medicina en calidad de preparador en la Cátedra de Farmacología de la Escuela de Medicina Luis Razetti, bajo la jefatura del Dr. Alfonso Jacir, en los años 1967-1968, donde se destacó por su responsabilidad, eficiencia y espíritu de trabajo en todas sus labores (13).

En 1968 se presentó como instructor interino por concurso de credenciales (1968-69) en la Cátedra de Farmacología, Escuela de Medicina José María Vargas y Hospital Vargas. En ese mismo hospital, fungió como profesor del Curso de posgrado de Psiquiatría (1968) y al año siguiente, fue profesor del Curso Fármaco-Terapia (1969).

Durante su desempeño, no solo se dedicó a la docencia sino también a la investigación y fue ascendiendo puntualmente según el Reglamento de la Facultad.

En 1970, ascendió a la categoría de Profesor Asistente a dedicación exclusiva y la prueba de capacitación pedagógica fue presentada al año siguiente. Es de hacer notar, que además de las actividades docente, comenzó en esa época a publicar trabajos de investigación experimental. 

A pesar de sus actividades docente en la Cátedra de Farmacología, el Dr. Velasco se desempeñó como interno residente y como médico suplente del IVSS en el Hospital Policlínico de Los Teques en 1968, ciudad donde vivía. También fue interno permanente en la Maternidad Concepción Palacios entre 1957- 1968. 

Estudios de especialización en el extranjero

En el año 1970, el Dr. Velasco solicita un permiso para cursar estudios de posgrado en Estados Unidos de América. De tal manera que obtuvo una beca del   CONICIT para realizar estudios de internado de Medicina interna con énfasis en Farmacología Clínica cardiovascular (Clinical Pharmacology Fellowship), durante tres años. (01-07-71 al 31-12-74).

El Dr. Velasco realizó estos estudios primero, en el Hahnemann Medical College and Hospital, Philadelphia, Pa. desde julio 1971 a junio de 1972, bajo la supervisión del Dr. John Nodine.  Durante este período de tiempo realizó dos cursos, uno avanzado de Bioestadística y otro curso de Radioisótopos en la Oak Ridge Associated Universities, Tn.

Enseguida, completó estos estudios con un Fellowship en Medicina interna (Farmacología clínica) en la Escuela de Medicina de la Universidad de Emory, de Atlanta, Georgia, Estados Unidos de América (Medical College and Hospital, Emory University school of medicine) desde julio de 1972, hasta diciembre de 1974. Figura 5.

Posteriormente, el Dr. Velasco completó sus conocimientos en Farmacología Clínica en el Royal College of Physicians de Edinburgo,UK  Escocia, Reino Unido (1991).

Actividades docentes, de investigación y administrativas

            El Dr. Velasco, reingresó en la Cátedra de Farmacología de la Facultad de Medicina de la Escuela de Medicina Vargas, el primero de enero de 1975. Desde entonces los campos de sus investigaciones fueron la diabetes, la hipertensión arterial y sobre todo en sus aspectos terapéuticos.

En 1978, asciende a la categoría de Profesor Agregado, presentando su trabajo de investigación intitulado “Efectos cardiovasculares y renales de la Dopamina y de la L- Alanildopamina (ABBOTT 37301) en pacientes con Hipertensión arterial esencial”.

Para la misma época obtuvo por reconsideración de la Comisión de Credenciales, la categoría de Profesor Asociado a dedicación exclusiva, hasta alcanzar el escalafón de Profesor Titular a partir de 1983. El trabajo presentado para este último ascenso, se tituló: “Estudio farmacológico de la mediación química de la cicatrización de las heridas de la rata”.

En 1979, obtuvo el Doctorado en Medicina en la Universidad Nacional del Zulia, Maracaibo, estado Zulia. Su tesis versó sobre los “vasodilatadores en la Hipertensión arterial”, tema que escogió principalmente para sus investigaciones posteriores. Desde 1987, ocupó el cargo de jefe la Cátedra de Farmacología.

El 12 de mayo de 1993, fue designado jefe del Departamento de Ciencias Fisiológicas de la Escuela José María Vagas, hasta 1997.  Luego en el mismo año, ocupa nuevamente la jefatura de la Cátedra de Farmacología hasta el año 2003, cuando fue nombrado coordinador general de la Facultad de Medicina (2002-2005).

 En 2005, solicitó al Decano su jubilación, cumplidos 37 años de servicios activos en esta Institución según la relación de Cargo y Tiempo de servicio de la Dirección de Personal y Documentación de la Facultad de Medicina. Acogido a las normas de Permanencia el 21 de junio de 1999.

Al término de sus actividades profesionales, como el mismo lo expresó, consideraba que el ejercicio médico lo había hecho “un hombre feliz” y podríamos añadir: plenamente realizado en todos los sentidos, un hombre que, como él, supo valorar la vida, el tiempo y los dones que Dios le había concedido (14).

Otros cargos honoríficos

            En el Hospital Vargas, el Dr. Velasco desempeñó varios cargos con gran eficacia. Desde 1976, ocupó los cargos de: Médico Adjunto del Servicio de Cardiología y el de Médico Adjunto de la Unidad de Hipertensión. También para la misma época, se encargó de la Dirección de la Unidad de Farmacología Clínica y en 1985, fue nombrado director de la Unidad de Hipertensión entre muchos otros galardones merecidos por su labor incansable y eficaz. Desde el año 2002, fue nombrado director de la dirección de la Unidad de Farmacología Clínica Cardiovascular y Respiratoria de la Escuela de Medicina Vargas.

Como investigador ocupó el nivel más alto que otorga nuestra universidad en el Sistema de Promoción al Investigador (PPI), donde ocupó el último nivel como miembro Nivel III. En 1992, el Dr. Velasco tuvo el honor de ocupar la Secretaría Técnica de este importante organismo universitario.

Sociedades médicas

Como menciona el Dr. Contreras, el Dr. Velasco ha sido miembro de casi 30 Sociedades Médicas nacionales e internacionales, donde muchas veces se desempeñó como presidente o vicepresidente de innumerables Congresos médicos entre otras actividades similares. Perteneció a la   Asociación Médica Americana USA, desde 1974; a la American Association for the advancement of Sciences y a la World Medical Association; a la Sociedad Venezolana de Cardiología; al Colegio Médico de Costa Rica, 1979; a la Sociedad de Cardiología de la República Dominicana, 1980; a la Sociedad Interamericana de Farmacología Clínica y Terapéutica; a la Fundación Procardias, Montevideo Uruguay 1990, y la Sociedad de Cardiología de Guayaquil, Ecuador en1991. En Venezuela también perteneció a la Sociedad Venezolana de Geriatría y Gerontología; a la Asociación Venezolana para el avance de la Ciencia (ASOVAC) y a la Sociedad Venezolana de Farmacología.  

Condecoraciones y Premios

El Dr. Velasco como lo mencionamos anteriormente, se destacó como un profesional de la medicina, lo que le valió recibir galardones en más de 20 ocasiones. Fue acreedor de varios Premios y condecoraciones como: La Orden Guaicaipuro (Primera Clase), Concejo Municipal del Distrito Guaicaipuro, Estado Miranda (1985); Orden “Universidad Central de Venezuela”, Consejo Universitario Asamblea Legislativa del Estado Miranda(1986); Orden “Roque Pinto”; (1986); Orden Leonidas Monasterios en su única clase, Asamblea Legislativa, Estado Miranda; Orden Teófilo Moros, Gobernación del estado Miranda; Orden al Mérito en el Trabajo, Ministerio de Sanidad y Asistencia Social (Primera Clase)(1993); Orden José María Vargas, Universidad Central de Venezuela (Primera Clase) (1996);  Orden Cecilio Acosta ,Gobernación, Estado Miranda(Primera Clase) (1997);  Orden Honor al Mérito de la Gobernación del Estado Miranda(1997);   Orden Francisco de Venanzi, Universidad Central de Venezuela, (1998); Orden Dr. Humberto Fernández Morán (Primera Clase(2000) y La  Orden General en Jefe José Laurencio Silva, Alcaldía de Tinaco, Estado Cojedes( 2001).

Entre otros galardones se distinguen varios nombramientos distinguidos: el de “Visitante de Honor” de la Gobernación del Estado Zulia; “Presidente honorario vitalicio” de la Sociedad Venezolana de Farmacología Clínica y Terapéuticas (2001).

En 2012, el Dr. Velasco obtuvo el “Premio Nacional de la Academia Nacional de Medicina de Venezuela” y el mismo año, el “Premio Fundación Juan Alberto Olivares de ACFIMAN”, el cual se otorga anualmente a científicos venezolanos o extranjeros, cuyos logros originales y sobresalientes en el área de su competencia, hayan resultado de importancia, significación y proyección y redundando en un mejor conocimiento de las ciencias médicas o del bienestar universal.

Publicaciones

Fueron de su autoría 340 trabajos internacionales en revistas indexadas, la mayoría de ellos publicados en la revista Journal Human Hypertension y en, la American Journal of Therapeutics entre otras de la misma naturaleza. Se mencionan: Diabetes and hypertension physiopathology and therapeutics; Hypertension in seven Latin American cities: the cardiovascular risk factor multiple evaluation in Latin America (CARMELA) study;  Calcium antagonists and atherosclerosis protection in hypertension ; Angiotensin II receptor antagonists role in arterial hypertension ; Metabolic syndrome: treatment of hypertensive patients. También conjuntamente con el Dr. Luis Manuel Hernández V, publicó un Manual de Hipertensión para médicos (Ed. Mac Graw-HiI Interamericana) (15).

Conclusiones

Escribí la semblanza, de mi amigo, colega y compañero de la Academia Nacional de Medicina, estimulada por un sentimiento de afecto y de deber moral. Su fallecimiento inesperado dejó en mi alma, un gran dolor, como el que se siente por la pérdida de un ser querido.

Tampoco, no podía dejar que su actuación en nuestro gremio, pasara desapercibida, aunque ya varios de sus amigos, especialmente el Dr. Contreras y la Dra. Villar, se habían ocupado de publicar varios aspectos importantes de su vida personal y profesional. 

Con la ayuda de su hijo menor, el abogado Jorge Luis Velasco Villegas, quisimos darle a su semblanza, un nuevo enfoque, basado en las circunstancias políticas y sociales de la época de su infancia y adolescencia, las cuales le dan más valor a su actuación como científico.

También, se hizo hincapié en sus aportes personales culturales como coleccionista de libros antiguos y como numismático del estado Miranda. Los hombres como Manuel demuestran que las circunstancias difíciles de la infancia, como la que sufrieron muchos llaneros de nuestro país de aquella época, no son un impedimento para progresar en la ciencia, artes, etc.

Al contrario, muchas veces son un estímulo grande para demostrar que independiente del ambiente externo, es la grandeza espiritual del sujeto, que lo levanta continuamente.

Otro gigante de nuestra medicina, el Dr. Juan José Puigbó García, también fallecido decía que, en la década del 50, se instaló por primera vez en el país, la bomba de cobalto, época que correspondía al nacimiento de Manuel, y ahora, en el momento histórico de su muerte, existe una profunda crisis en Venezuela. Crisis que afecta profundamente la asistencia médica que ha llegado a la clausura de servicios especializados como los relacionados con los problemas cardiovasculares, tema de las investigaciones de nuestro homenajeado (16,17).

Los últimos años de su vida, Manuel Velasco, estuvo muy atareado en la edición de la Gaceta Médica de Caracas, como lo mencionamos anteriormente en este relato.  La muerte lo sorprendió en plena actividad, cuando se iba a publicar el número cuatro (4) del volumen 121 del 2021 de esta revista.

Verdaderamente, el Dr. Velasco deja una huella permanente en nuestro gremio médico y entre sus colegas de la Academia Nacional de Medicina.

Referencias

  1. Contreras Freddy. Editorial. Diabetes Internacional, [S.l.], v. 4, n. 2, sep. 2015. ISSN 1856-965X. Disponible:<http://saber.ucv.ve/ojs/index.php/rev_di/article/view/9313>. Fecha de acceso: 07 june 2022.
  2. Villar Liste V. Dr. Manuel Velasco edita revista de Bentham Science. La Web de La Salud. Ago 5, 2020. Disponible en: https://lawebdelasalud.com › dr-manuel-velasco-edita-r..
  3. Villar Liste V. Dr. Manuel Velasco, gobernador por Venezuela de la Sociedad Interamericana de Hipertensión.La Web de la salud. Disponible en: Dr. Manuel Velasco, gobernador por Venezuela …https://lawebdelasalud.com › dr-manuel-velasco-gobern.
  4. Suárez C B. Comunicación personal.
  5. Velasco VJ. Documento online dirigido a C Suárez. 28 junio 2022.
  6. Tapia Contreras JL. Barinas y su medicina en tiempo pasado y presente. Imprenta y Publicaciones del Estado Barinas. 1970 pag 7.
  7. Arráiz Lucca. R. Venezuela: 1830 a nuestros días. Presidencia del General Isaías Medina Angarita (1941-1945) en: La hegemonía militar tachirense (1899-1945). Editorial Alfa 2007. Biblioteca Rafael Arráiz Lucca O1. Ed. Arte. Venezuela p 135-137.
  8. Velasco V J . Documento online dirigido a la Dra. Suárez. 16/junio/2022
  9.  Suárez C B. Comunicación personal.
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Ver enlace original en la Gaceta Médica de Caracas: