El Dr. Aparicio se caracterizó por su trato humano, accesibilidad y alto nivel de compromiso. Fue un amigo leal, un médico con auténtica vocación y un clínico excepcional
Por: Dra. Raquel Gutiérrez de Mock

La autora es presidenta del Colegio Médico de Panamá. Profesora distinguida y directora del Departamento de Medicina Familiar y Comunitaria de la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá

El Dr. Rafael Aparicio, médico internista y hematólogo, fue el primer presidente del Colegio Médico de Panamá, organización que representa a los médicos del país conforme a la Ley 41 de 2002, fruto de su incansable lucha gremial.
“Rafa”, como cariñosamente lo llamábamos en el Colegio Médico, se distinguió por su profundo interés en el bien común de la medicina, manifestando siempre un genuino compromiso con la autorregulación médica, la educación continua y la defensa de las condiciones laborales de los médicos.
Creía firmemente en la autonomía profesional como valor esencial para ejercer la medicina con ética y responsabilidad.
Su vocación de servicio se reflejó también en su participación activa en comisiones de medicamentos, tecnologías e insumos, donde promovió la disponibilidad de tratamientos adecuados para beneficio de la población, con un sentido de justicia, equidad y entrega ejemplar.
El Dr. Aparicio se caracterizó por su trato humano, accesibilidad y alto nivel de compromiso.
Fue un amigo leal, un médico con auténtica vocación y un clínico excepcional, humilde en sus logros y generoso con sus conocimientos.
Su legado permanece como el de un modelo a seguir, ejemplo de profesionalismo, ética y amor por la medicina y por Panamá
Por: Dra. Raquel Gutiérrez de Mock

