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Itzel de Hewitt, Ana Rivière Cinnamond, Melva Cruz, Raquel Gutiérrez de Mock y Marvis Corro
La campaña, dirigida a niños de 1 a 4 años de edad, demuestra el éxito de su convocatoria y anima a seguir en esta tarea, puerta a puerta, en cada uno de los hogares

Por: Violeta Villar Liste

Es preciso alcanzar al 95% de la población meta para estar libres de sarampión y así, en caso de llegar un caso importado, con una población blindada será imposible que la enfermedad avance.

La coordinadora del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) del Ministerio de Salud (Minsa), Itzel de Hewitt, anunció que en solo cuatro días de la Campaña nacional contra sarampión y la rubéola, ya han logrado aplicar 41,594 dosis (14.2% de cobertura).

La campaña, dirigida a niños de 1 a 4 años de edad, demuestra el éxito de su convocatoria y anima a seguir en esta tarea, puerta a puerta, en cada uno de los hogares.

Hewitt es clara: es preciso alcanzar al 95% de la población meta para estar libres de sarampión y así, en caso de llegar un caso importado, con una población blindada será imposible que la enfermedad avance.

El 11 de marzo el Minsa inició la campaña que se extenderá por dos meses.

Los datos fueron compartidos en el contexto de una rueda de prensa del Ministerio de Salud (MINSA), con el apoyo de la Organización Mundial de Salud y la Organización Panamericana de la Salud (OMS/OPS), Colegio Médico de Panamá, el Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud, Sociedad Panameña de Pediatría y el Programa Ampliado de Inmunización (PAI).

Hewitt recordó un hecho histórico que prueba la capacidad de Panamá en vacunación: en 2011 ingresaron cuatro casos importados de sarampión, de estudiantes procedentes de Europa. El Instituto Gorgas los confirmó y de inmediato el Minsa desplegó una masiva campaña que permitió aplicar 76,000 dosis, desde Chiriquí a Colón, y así evitar casos secundarios posteriores a la importación.

De hecho, desde 1995 el país no tiene casos comprobados de sarampión, transmitidos de manera comunitaria.

Reflexionó que la pandemia a causa de COVID-19 hizo que los padres no llevaran a los niños a sus controles. Las coberturas bajaron y en este contexto se producen alertas epidemiológicas por incremento de casos de sarampión en la región.

Aclaró que la vacuna contra sarampión, como todas las que aplica Panamá en su sistema sanitario público, es gratuita.

Pidió abrir las puertas de manera confiada al personal de vacunación, identificado con su chaleco y logo de la institución.

También pidió la colaboración de los PH y en general de toda la sociedad porque se trata de un compromiso con la salud del país y con cada niño, de allí el lema:  “Mi amor va más allá por eso lo protejo contra el sarampión”.

Una acción por la salud pública

Melva Cruz, directora general de Salud Pública del Ministerio de Salud, agradeció a todos los aliados por apoyar las acciones del Minsa en beneficio de la salud de la población.

“Hoy le enviamos un mensaje en pro de la salud de la niñez panameña a todos los padres de familia, que vacunar a nuestros niños es una acción de amor, que le brinda seguridad y protección de enfermedades prevenibles”, dijo Cruz.

Afirmó que esta campaña nacional es una respuesta a los brotes de sarampión en la región y países vecinos y al llamado de la OPS/OMS de reformar la protección con campañas de vacunación.

Panamá no ha reportado “casos de sarampión, pero es indispensable hacer los reportes de ser necesario”.

Panamá es un destino de turismo frecuente y paso de flujo migratorio ilegal, además de sumar la cercanía y vinculación con países que han reportado casos como Costa Rica, Chile, Argentina, Perú, Brasil, Estados Unidos y Canadá, dijo la directora general del Minsa.

De hecho, Minsa declaró una alerta sanitaria el 27 de febrero de 2024 en el país para extremar los controles y evitar el ingreso de un caso.

Incrementan casos de sarampión

La Dra. Ana Rivière Cinnamond, representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), alertó que el incremento de los casos de sarampión es de 18% de manera global y 43% la mortalidad, “cifras que sorprenden porque tenemos vacunas”

«Debemos tener en cuenta que estas enfermedades causan muerte y morbilidad, problemas neurológicos, diarreicas y pueden afectar a los niños de por vida».

Expresó que América Latina es una de las regiones con coberturas vacunales más importantes, pero después de COVID-19 el descenso ha sido notorio.

Por amor a los niños

La Dra. Raquel Gutiérrez de Mock, presidenta del Colegio de Médicos de Panamá, afirmó que la vacuna es  un imperativo social.

Pidió recordar la época cuando no existían vacunas y las consecuencias se traducían en enfermedad, muertes y lesiones incapacitantes.

Hizo un llamado a la comunidad para vacunar a sus hijos, un auténtico acto de amor.

La Dra. Marvis Corro, presidenta de la Sociedad Panameña de Pediatría, reflexionó que las inmunizaciones pediátricas son escudos protectores que defienden de enfermedades que se cobran vidas.

La pandemia viene a dejar un saldo que se debe revertir: 20 millones de niños no han sido vacunados contra el sarampión, la tosferina y polio, entre otras.

Citó  datos del ultimo informe de Unicef de 2023: uno de cada 4 niños de Latam y el Caribe no tienen su cuadro de vacunación completo, el mayor de los descensos de la última década.

“No vacunar a los niños pone en riesgo la salud individual y también socava la inmunidad colectiva de la población, porque los brotes  causan discapacidad y muerte”.

Hay logros históricos asociados a la vacunación que destacó el Minsa: en 1905 fue erradicada la fiebre amarilla selvática; en 1947 la fiebre amarilla urbana; en 1972 la poliomielitis; en 1974 la difteria; en 1995 se conoció en Panamá el último caso de sarampión y en 2002 de rubeola.

Dejar que los equipos de salud entren en casa, facilitar la vacunación en centros de salud y asumir con decisión este momento histórico, une a asociaciones, gremios e instituciones en un solo llamado: vacunen a sus hijos.

Por: Violeta Villar Liste | [email protected]