La publicación anual de la Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICYT) ofrece un panorama del desempeño de la región
Por: Violeta Villar Liste | Jair Esquiaqui Buelvas (OEI)
El número de investigadores en Panamá pasó de 622 en el año 2022 a 1.122 en 2023, dato que representa un incremento de 500 personas (80.4%) y reflejo del fortalecimiento de la capacidad de generar conocimiento del país.
Los datos están recogidos en El Estado de la Ciencia 2025, publicación anual de la Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICYT) que coeditan la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) para la Educación, la Ciencia y la Cultura -a través de su Observatorio Iberoamericano de la Ciencia, la Tecnología y la Sociedad (OCTS) con sede en Buenos Aires- y la Unesco.
Sin embargo, el gasto en Investigación y Desarrollo (I+D).en relación con el Producto Interno Bruto (PIB) se mantiene invariable desde el año 2021 en 0.18%.
El Dr. Eduardo Ortega Barría, secretario nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), durante la sustentación de la Memoria Anual 2024 de la institución, ante la Comisión de Educación, Cultura y Deportes de la Asamblea Nacional de Panamá, ya había advertido que Panamá crece, pero no de manera proporcional a la inversión en I+D.
Se mantiene rezagado en la innovación y adopción tecnológica como resultado de la baja inversión en I+D, concretamente 0.18% del PIB, un porcentaje por debajo del promedio regional (0.61%).
En octubre de 2024, la Comisión de Educación, Cultura y Deportes de la Asamblea Nacional, aprobó en primer debate el proyecto de Ley No. 98 “Que establece y garantiza el 1% del PIB en Ciencia, Tecnología e Investigación para la República de Panamá”, pero la discusión no avanzó.
En relación con el gasto en Investigación y Desarrollo por sector de financiamiento (ver cuadro siguiente), el Gobierno representa el 53,0%, seguido por fondos extranjeros ( 21,1%) y la educación superior (19,9%).

Por solicitudes de patentes, el último dato corresponde al año 2022: 358 es el número recogido en el informe.
Brasil lidera la inversión

Una de las características de la inversión en I+D en América Latina y el Caribe es su fuerte concentración en pocos países.
En 2023 la inversión realizada en investigación y desarrollo (I+D) en ALC fue liderada por Brasil, que representó el 62,5% regional. México y Argentina rondaron el 10%, mientras que Chile y Colombia alcanzaron el 3%. El resto de los países de la región representó el 12,5% del total, expresa el informe.
Recursos económicos dedicados a I+D
Entre 2014 y 2023, la evolución del PBI de Iberoamérica muestra una tendencia expansiva; sin embargo, la inversión en actividades de investigación y desarrollo (I+D) siguió una trayectoria distinta a la de la actividad económica general.
Tras registrar una caída sostenida desde 2015 –particularmente marcada en los países de América Latina y el Caribe (ALC)–, la inversión en I+D comenzó a recuperarse a partir de 2020. No obstante, creció a un ritmo menor que el PBI, reflejando una recuperación rezagada.
La inversión en I+D de los países de ALC representó el 4,4% del total mundial. Si bien esta participación es levemente superior a la registrada en 2014, su peso relativo continúa siendo reducido dentro del agregado global.
En 2023, la inversión en I+D del conjunto de países de ALC representó el 0,60% de su PBI. Solo Brasil y Uruguay superaron el valor regional, con 1,19% y 0,71% respectivamente, mientras que Argentina se ubica justo en el promedio.
El análisis del origen de los recursos económicos destinados a actividades de I+D, muestra que el sector gobierno es la principal fuente de financiación a nivel regional y representa prácticamente la mitad de la inversión en la mayoría de los países.
Recursos humanos dedicados a I+D
Con un crecimiento sostenido año a año, la evolución del total de investigadores de ALC representó +45% de punta a punta. Los datos de la cantidad de investigadores medidos en equivalencia a jornada completa (EJC) por cada mil integrantes de la PEA muestran una marcada heterogeneidad dentro de Iberoamérica y una brecha significativa respecto de economías más desarrolladas.
Al concentrar el 74,2% de los investigadores activos, las universidades dan cuenta de su rol central en la I+D latinoamericana.
El análisis de la proporción de mujeres respecto al total de investigadores en la región muestra que en Argentina, Venezuela, Paraguay y Uruguay las mujeres representan más del 50% las personas dedicadas a la investigación, situándose por encima del promedio de ALC (46%). En contraste, su participación es claramente minoritaria en los casos de Perú y Chile.
Indicadores de producto
La cantidad de publicaciones indexadas en Scopus en 2023 y su comparación con 2014 muestran que en casi todos los países iberoamericanos se registró un crecimiento de su producción científica. Aunque aún presentan volúmenes de producción comparativamente reducidos, Perú y Ecuador registran los incrementos relativos más significativos.
La cantidad de solicitudes de patentes PCT por país de origen en 2014 y 2023 refleja una alta concentración de la capacidad de patentamiento en pocos países y un bajo desarrollo regional en materia de solicitudes. Iberoamérica registró 3152 solicitudes en 2014 y 2908 en 2023.
España se ubica claramente en primer lugar, con un aumento de 1552 a 1771 solicitudes, seguida por Brasil, que pasa de 554 a 665. Portugal, Chile, México y Colombia consolidan un grupo intermedio con volúmenes que oscilaron entre 132 y 260 solicitudes.
El resto de los países mostró niveles significativamente menores, por debajo de 50 solicitudes anuales en la mayoría de los casos.
El estado del arte de la ciencia y la tecnología
El Estado de la Ciencia 2025 despliega la mirada anual de la RICYT sobre el estado del arte de la ciencia y la tecnología en Iberoamérica.
“El Estado de la Ciencia en imágenes” entrega una representación gráfica de estos indicadores para sintetizar las tendencias de la ciencia y la tecnología en la región y su incidencia en el contexto global.
Los indicadores comparativos presentan una visión del contexto económico, la inversión en I+D, los recursos humanos disponibles para la investigación y la producción científica de los países de la región, entre otras importantes cuestiones.
A su vez, El Estado de la Ciencia 2025 presenta una selección de indicadores de la base de datos de la RICYT.
El conjunto total de datos, que abarca 135 series estadísticas, puede ser visitado en www.ricyt.org. A ellos también se suman indicadores de educación superior provenientes del relevamiento de datos de la Red Iberoamericana de Indicadores de Educación Superior (INDICES) -disponibles en www.redindices.org-, y datos de PoliticasCTI –www.politicascti.net– que recopila sistemas institucionales e instrumentos de financiamiento en la región.
En 2025, además, se ofrece un dossier que explora un ámbito crucial para el futuro global y el desarrollo de los países iberoamericanos: la computación cuántica.
Por: Violeta Villar Liste | Jair Esquiaqui Buelvas (OEI)


