Durante la Semana de la Vacunación de las Américas, que se desarrollará en Panamá del 26 al 30 de abril, se estará actualizando el esquema de vacunación en las áreas de riesgo
Con información de Minsa | OPS | Minsa Colombia
El «amarillo» en el nombre de fiebre amarilla se refiere a la ictericia que afecta a algunos pacientes.
El Ministerio de Salud informó a la población en general que fortalecerá la vacunación y vigilancia de fiebre amarilla ante un brote de esta enfermedad en la hermana República de Colombia y otros países de Sudamérica.
En Panamá, desde 1974 hasta la fecha no se han notificado casos en humanos, y desde 1978 no se han notificado brotes en primates no humanos.
Esta estrategia implica las modalidades pasiva, activa y comunitaria a fin de detectar de manera temprana y oportuna cualquier caso sospechoso.
Se pide a la población reportar cualquier rumor o sospecha de primates no humanos enfermos o muertos a la instalación de salud más cercana.
Durante la Semana de la Vacunación de las Américas, que se desarrollará en Panamá del 26 al 30 de abril, se estará actualizando el esquema de vacunación en las áreas de riesgo (Darién, Kuna Yala y Panamá Este), asegurando que la población mayor de un año esté adecuadamente inmunizada.
Una sola dosis de la vacuna proporciona protección de por vida contra la enfermedad.
El Minsa estará garantizando la vacunación de todas las personas que se desplacen a zonas de riesgo, especialmente por motivos laborales o de turismo ecológico, si no residen en dichas áreas.
¿Qué es la fiebre amarilla?
La fiebre amarilla, informa la OPS, es una enfermedad viral hemorrágica aguda que es endémica en áreas tropicales de África y de América Central y del Sur. El «amarillo» en el nombre de fiebre amarilla se refiere a la ictericia que afecta a algunos pacientes.
Los casos pueden ser difíciles de distinguir de otras fiebres hemorrágicas virales como el arenavirus, hantavirus o dengue.

Una vez contraído, el virus de la fiebre amarilla incuba en el cuerpo durante 3 a 6 días. Muchas personas no experimentan síntomas, pero cuando estos ocurren, los más comunes son fiebre, dolor muscular con prominente dolor de espalda, dolor de cabeza, pérdida de apetito y náuseas o vómitos.
En la mayoría de los casos, los síntomas desaparecen después de 3 a 4 días. Sin embargo, un pequeño porcentaje de pacientes entra en una segunda fase más tóxica dentro de las 24 horas posteriores a la recuperación de los síntomas iniciales.
La fiebre alta regresa y varios sistemas del cuerpo se ven afectados, generalmente el hígado y los riñones. En esta fase, es probable que las personas desarrollen ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos, de ahí el nombre «fiebre amarilla»), orina oscura y dolor abdominal con vómitos. Puede ocurrir sangrado de la boca, nariz, ojos o estómago. La mitad de los pacientes que entran en la fase tóxica mueren dentro de 7 a 10 días.
¿Qué está pasando en la región?

El Ministerio de Salud y Protección Social de Colombia pidió a su población vacunarse debido al incremento de casos y muertes en las últimas semanas. Entre 2024 y 2025, Colombia ha confirmado 60 casos con 30 fallecimientos.
“En 2024 se registraron 23 casos con 13 fallecimientos, mientras que, en 2025 hasta la fecha, se han confirmado 37 casos de los cuales 17 fallecieron, las personas afectadas tienen edades entre 11 y 89 años. El departamento más afectado en 2025 es el Tolima con 34 casos, seguido de Caquetá (1), Putumayo (1) y Caldas (1). Para un total de 37 casos”, reporta el Ministerio de Salud colombiano.
Debido al aumento de casos humanos de fiebre amarilla en el 2025 en países de la Región de las Américas, la Organización Panamericana de la Salud / Organización Mundial de la Salud (OPS / OMS) emitió la Alerta Epidemiológica Fiebre amarilla en la Región de las Américas, con fecha 26 de marzo del 2025, con recomendaciones a los Estados Miembros.

En concreto, en el caso de las áreas de riesgo, pide continuar los esfuerzos para fortalecer la vigilancia en zonas endémicas, vacunar a las poblaciones en riesgo y tomar las acciones necesarias para garantizar que los viajeros que se dirigen a zonas donde se recomienda la vacunación, estén correctamente informados y protegidos contra la fiebre amarilla.
Además, se resalta la necesidad de fortalecer el manejo clínico, con énfasis en la detección y tratamiento oportuno de los casos graves:OPS llama a fortalecer vigilancia y vacunar a poblaciones en riesgo por incremento de casos de fiebre amarilla
La OPS/OMS también recomienda disponer de dosis de reserva, de acuerdo con la disponibilidad de vacunas en cada país, para garantizar una respuesta rápida ante posibles brotes.
Con información de Minsa | OPS | Minsa Colombia