No fumar, comer saludable, hacer ejercicio, seguir las indicaciones de su médico y dormir bien, son consejos necesarios que cambian la vida, para bien
Por: Dr. Daniel R. Pichel P.
El autor es graduado de medicina en la Universidad de Panamá en 1986. Realiza la especialidad de Cardiología y Ecocardiografía en el Hospital Español de México. Regresa a Panamá, para integrarse al equipo de Cardiólogos Asociados de Panamá y Hospiten Paitilla, donde labora hasta la fecha.Profesor de Cardiología en la Facultad de Medicina en la Universidad de Panamá y miembro del comité de docencia del Centro Médico Paitilla.Durante veinticinco años, ha dictado más de 400 conferencias sobre temas cardiológicos con interés particular en cardiología preventiva, insuficiencia cardíaca, ecocardiografía y atención cardiovascular de emergencias.Ha presentado trabajos en congresos nacionales e internacionales y ha publicado además varios, resúmenes clínicos, capítulos de libros y editoriales. Director Fundador del Museo de la Libertad y los Derechos Humanos.
Decía un profesor de Medicina que “El corazón no es lo más importante. Pero es el que mata más rápido”.
Todos podemos “cuidar” nuestro corazón, si seguimos estas sencillas recomendaciones que, no solamente constituyen la clave para prevenir enfermedades cardiovasculares, sino también representan una excelente forma de establecer hábitos saludables para conseguir no solo vivir más sino también vivir mejor. Tradicionalmente han sido cuatro estos pilares de la salud cardiovascular, aunque recientemente se ha agregado otro que mencionaremos.
No fumar
Los daños relacionados al hábito de fumar (médicamente llamado tabaquismo) han sido bien descritos y repetidos muchas veces. La relación del humo del tabaco con el cáncer esta más que demostrada.
A nivel pulmonar, de la boca y garganta, la inflamación crónica que el humo produce ocasiona cambios que degeneran en tumores malignos. Sin embargo, el cigarrillo se ha relacionado no solo con canceres respiratorios sino también con la presencia de cáncer de estomago, vías urinarias, colon, etc…
Desde el punto de vista cardiovascular, el cigarrillo afecta a las arterias y al corazón de muchas maneras. La nicotina, es un estimulante que aumenta la adrenalina que circula en la sangre, causando un aumento de trabajo cardiaco al igual que la elevación de la presión arterial que traen como consecuencia que el músculo del corazón necesite mas oxigeno para funcionar adecuadamente.
A nivel de las arterias, afecta el funcionamiento del endotelio que es la capa de células que esta en contacto con la sangre.
Actualmente se sabe que este “órgano” es uno de los encargados de la dilatación y contracción de las arterias. Estudios realizados con ultrasonido demuestran que después de fumar un solo cigarrillo, la capacidad de dilatación arterial mediada por el endotelio se pierde por aproximadamente seis horas. Esto significa que, fumar un cigarrillo cada seis horas ocasiona un aumento de la rigidez arterial durante todo el día.
Así mismo, los fumadores tienen un aumento en la coagulación, favoreciendo los infartos de miocardio.
Dieta saludable y perder peso
El sobre peso suele ser visto como consecuencia de “glotonería” o de “portarse mal a la hora de comer”. Su incidencia es tan alta que, por lo general, se identifica como un problema estético más que una enfermedad. La obesidad constituye un serio problema de salud pública.
Los individuos obesos tienen más enfermedades cardiovasculares, diabetes, hipertensión y lípidos elevados.
Es muy importante tener claro que, no todo quien “se siente gordo” es obeso. La obesidad se cuantifica con el índice de masa corporal (Talla en cm/(Peso en Kg)2. Con base en este cálculo una persona con IMC entre 25 y 29.9 tiene sobrepeso y por arriba de 30 es obeso. Otro aspecto importante que tomar en cuenta es que la grasa acumulada en la región abdominal constituye un mayor riesgo pues es metabólicamente mucho más activa y se asocia más a eventos cardiovasculares. Una relación Cintura en cm/Talla en cm mayor de 0.5, indica riesgo aumentado.
Actividad física
Los beneficios del ejercicio han sido demostrados en muchos estudios. Desde su efecto en mejorar la capacidad cardiovascular y pulmonar hasta efectos mucho más directos sobre la prevención de muchas enfermedades como obesidad, enfermedad cardiovascular, diabetes, hipertensión, cáncer, osteoporosis y depresión.
A diferencia de lo que se piensa, no es necesario realizar ejercicio en grandes cantidades para obtener beneficios. Se ha demostrado que 150 minutos de ejercicio enérgico por semana (dividido al menos en tres sesiones) ya representa beneficios en la salud. Hoy, se sabe que no solo se debe hacer ejercicio aeróbico, sino que es importante agregar ejercicios de resistencia para prevenir la pérdida de masa muscular asociada a la edad.
Seguir sus tratamientos
Muchas veces se tiene el concepto de que tomar medicinas es un signo de debilidad o, que al comenzar a tomar medicamentos habrá que seguirlos para siempre. Esto último posiblemente sea cierto cuando se habla de enfermedades como la hipertensión, la diabetes o los problemas de colesterol que son crónicos e incurables.
El control que se alcance se perderá si los medicamentos se suspenden. Así mismo, debe tenerse claro que tomar medicamentos no es necesariamente un sinónimo de controlar las enfermedades. Es esa la razón por la cual muchas veces es necesario agregar medicamentos para llegar a las metas de tratamiento que han demostrado realmente proteger el sistema cardiovascular. Si no se siguen las indicaciones, no se está engañando al médico… se engaña al paciente aumentando los riesgos de desarrollar enfermedades.
Desde el punto de vista cardiovascular, es importante seguir los tratamientos para hipertensión, diabetes, colesterol elevado y obesidad, si el médico ha considerado necesario agregar medicamentos al cambio de hábitos.
Dormir bien
Desde 2023, la American Heart Association agregó el sueño a las recomendaciones para mantener un corazón saludable.
En general se recomienda que se duerman entre siete y 9 horas diarias como promedio. Es importante determinar si existen trastornos específicos del sueño que puedan contribuir a desarrollar enfermedades cardiovasculares.
Recuerde… si quiere usted hacer algo por su corazón… debe, como mínimo, seguir estos cinco simples consejos…
- No fume
- Coma saludable y mantenga su peso
- Haga ejercicio
- Siga las indicaciones de su médico
- Duerma bien
Su corazón se lo agradecerá para siempre…
Por: Dr. Daniel R. Pichel P.
