Por: María Mercedes Armas (Psicóloga)
La licenciada María Mercedes Armas Barrios es psicóloga egresada de la Universidad Central de Venezuela. Es integrante del Observatorio Venezolano de los DDHH de las Mujeres y del Centro de Investigación Social Formación y Estudios de la Mujer.
@psico.mm.armas
mariamercedesarmas2112@gmail.com
En esta publicación de dos partes, estaré enfocando cuatro aspectos fundamentales para construir una buena base en la relación con nuestros niños(as); estos son: la demostración del amor, el estímulo, la dedicación de tiempo para recreación y el respeto. Podemos trabajar estos aspectos de manera consciente y consistente para crear relaciones saludables y nutritivas en la familia.
- Nada sustituye un ¡Te amo! y un abrazo como demostración del amor a nuestros hijos(as)
Se dice que, para sentirse seguro/a, cada niño o niña debe tener al menos una persona significativa que sea su fuente de afecto y protección. Muchas veces el amor se da por sentado o se considera que cumpliendo con las responsabilidades materiales con la familia ya es suficiente; sin embargo, es importante la expresión clara y directa del amor en la familia, a través de palabras y gestos, caricias, abrazos, besos. No hay limitaciones de tiempo o económicas para la expresión del amor.
Está demostrado que el amor que podamos expresarle a nuestros hijos(as) desde su nacimiento, influye directamente en su desarrollo y crecimiento, tanto en el aspecto físico, como psico-emocional. El amor fortalece el sistema inmunológico, el desarrollo cerebral y la capacidad para aprender. El amor ejerce un efecto de protección para los niños y niñas que perdura a lo largo de su vida, ya que les proporciona una fuente interna, una reserva emocional de auto aceptación, a la cual podrá recurrir para sentirse fortalecido/a
En cuanto al tema del amor es muy importante la coherencia. Los cuidados y la expresión del afecto van de la mano. Para que nuestros niñas y niñas se sientan queridos/as y aprendan de un modelaje positivo del amor en su infancia es importante que se sientan cuidados en sus necesidades básicas y no sentirse abandonados. Puede que de adultos/as hayamos olvidado muchas cosas y detalles de nuestra infancia, pero el recuerdo de la persona que nos dio amor no será borrado nunca.
¿A quién recuerdas como fuente de amor y cariño en tu infancia?
A lo mejor cuando niños/as sufrimos de algunas privaciones o hubo elementos negativos o limitantes en nuestra familias, pero los gestos de amor son los que se tienden a recordar con mayor intensidad.
- La importancia del estímulo.
¿A quién no le agrada recibir palabras de estímulo, de aliento o reconocimiento ante una situación difícil o al concretar un logro?
El estímulo es un elemento muy importante en la construcción del auto concepto de las niñas y niños. Algunas funciones del estímulo son:
- Refuerza los aspectos positivos y su potencialidad.
- Minimiza la importancia de sus errores, los apoya a que aprendan de ellos y da nuevas oportunidades para superarlos.
- Reconoce sus virtudes y sus esfuerzos y apoya a que ellos mismos los reconozcan.
- Fortalece el sentido de responsabilidad.
- Ofrece oportunidades para su crecimiento y desarrollo personal.
- Favorece que se sienta valorado(a).
- Modela positivamente la empatía, la solidaridad, la comprensión y el apoyo.
- El estímulo contribuye a construir un auto concepto fuerte y positivo, fortaleciendo la confianza en sí mismos.
- Agradecer sus aportes positivos es una gran forma de estimular.
Pensamos que es más fácil estimular cuando las cosas van bien, pero cuando hay fallas y errores por parte de nuestros hijos(as), nos cuesta ofrecer el estímulo y caemos en las críticas destructivas.
Es en estos momentos cuando necesitamos recurrir al estímulo adecuado. Los niños/s que demuestran comportamientos inadecuados se sienten desalentados y no esperan nada bueno de ellos mismos, expresando sentimientos de insuficiencia e incapacidad. Y así se va construyendo un auto concepto pobre y negativo.
Revisemos cómo se está inclinando la balanza del comportamiento de nuestros niños(as): si notamos que la inclinación está hacia lo negativo, es momento de comenzar a usar el estímulo para equilibrar y lograr un impacto en la construcción de un auto concepto fuerte y positivo.
Por: María Mercedes Armas (Psicóloga)