Disminuir el riesgo de contraer un tumor maligno, la principal causa de muerte en Panamá, es una razón suficiente para incorporar estrategias saludables en nuestras vidas
Con información de Minsa | CSS | OPS
Si el cáncer de próstata se detecta temprano, cuando todavía está limitado a la glándula prostática, tiene mayores probabilidades de tratarse con éxito.
Es el cáncer de próstata el segundo en incidencia en la población panameña. En el año 2022, el Instituto Oncológico Nacional (ION) confirmó 1,016 defunciones por cáncer de mamas; 549 por cáncer de próstata y 415 por cáncer de cuello uterino.
Otros tumores malignos frecuentes en la población panameña son los de estómago, colon, endometrio y tiroides.
En Panamá hay cerca de 800 casos de próstata nuevos al año y es la primera causa tumoral de muerte en pacientes de 40 años, solo superado por las muertes por causa general (accidentes, traumas y la violencia).
Este 11 de junio, Día Mundial del Cáncer de Próstata, el llamado es a la prevención y adoptar estilos de vida saludables.
Disminuir el riesgo de contraer un tumor maligno, la principal causa de muerte en Panamá, es una razón suficiente para incorporar estrategias saludables en nuestras vidas, exhortó la directora médico del Ministerio de Salud en Chiriquí, Gladys Novoa.
Entre las recomendaciones: una dieta saludable con muchas frutas, verduras y cereales integrales, practicar diariamente ejercicios físicos y a partir de los 40 años de edad, practicarse exámenes que permitan detectar oportunamente algún problema.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) Los tipos de cáncer diagnosticados con mayor frecuencia en los hombres son: de próstata (8,6%), pulmón (11,7%), colorrectal (10,2%) y vejiga (5,9%).
Los tipos de cáncer con las tasas más elevadas de mortalidad en los hombres son: pulmón (20,6%), próstata (14,5%), colorrectal (10,6%), páncreas (7,0%) e hígado (6,6%).
Al igual que los tumores malignos en otras partes del cuerpo, si el cáncer de próstata se detecta temprano, cuando todavía está limitado a la glándula prostática, tiene mayores probabilidades de tratarse con éxito.
Posiblemente al inicio, el cáncer de próstata no provoca signos ni síntomas, pero al avanzar puede ocasionar problemas para orinar, sangre en la orina y/o semen, dolor en los huesos, pérdida de peso y disfunción eréctil.
El Dr. Edgar Figueroa, cirujano urólogo, de la Caja de Seguro Social, indicó (ver entrevista: https://prensa.css.gob.pa/2022/06/11/hagase-las-pruebas-y-evite-el-cancer-de-prostata/) que “la próstata es un órgano que se encuentra por debajo de la vejiga y realmente es un órgano sexual, pero se incluye dentro del sistema urinario.”
Señaló que esta glándula tiene básicamente tres funciones:
- La urinaria, porque la primera parte de la uretra la atraviesa
- Función reproductiva, secreta un líquido con un ph alcalino, que le permite a los espermatozoides, sobrevivir en el ambiente ácido de la vagina de la mujer.
- La sexual, ya que la misma se contrae para que el hombre eyacule.
Al principio esta enfermedad no presenta síntomas. Cuando se perciben, por lo general se trata de un tumor localmente avanzado, o ha salido de esta glándula y se ha propagado a otra parte del cuerpo (metástasis)”, destacó el Dr. Figueroa.
Malestares más frecuentes cuando esta enfermedad se ha desarrollado:
- Trastornos urinarios (chorro delgado)
- Dificultad para orinar
- Necesidad de empujar para orinar
- Levantarse muchas veces en la madrugada a orinar
- Sangrado en la orina
- Dolores en los huesos (como consecuencia de alguna metástasis)
Destacó que básicamente hay dos formas de hacer diagnóstico de este tipo de tumores: examen PSA (antígeno prostático específico) y tacto rectal.
No son excluyentes, es decir, ambos estudios son complementarias entre sí: la prueba sanguínea debe acompañarse de la valoración física y así aumentar la capacidad de diagnóstico.
“Si un paciente tiene un PSA elevado o un tacto rectal anormal, se pasa a la resonancia magnética de próstata. Esta prueba permite un reconocimiento en profundidad de la próstata y, dependiendo del resultado, se determina si al paciente se le debe practicar una biopsia”, destacó.
Señaló que en Panamá tenemos como factor de riesgo el gen afroamericano (40%). Su tez puede ser más clara pero por herencia este gen se asocia a un alto índice de este cáncer.
Otros factores que influyen: la alimentación alta en grasas saturadas y la obesidad. Aconsejó el chequeo anual, después de los 50 años.
De tener antecedentes de esta patología en la familia, especialmente en el primer grado de consanguinidad (papá, hermano) a partir de los 40 años.
Son estrategias que pueden permitir una detección temprana y actuar para que la vida tenga una nueva oportunidad.
Con información de Minsa | CSS | OPS
