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Por: Rainer Tuñón C. En Revista Hacia La Luz de la UP

Uno de los discos que más he disfrutado de la discografía del maestro Rubén Blades es Mundo, que pertenece a una trilogía de música fusión que le valió sendos premios Grammy en las categorías Tropical, Latin Pop y World Músic, respectivamente, lo que le permitió tomar cierta distancia creativa de lo que hacía en salsa, ya que se había vuelto parte del oficio de costumbre gracias a sus clásicos en ese género.


Rubén Blades
siempre será querido por su compromiso en la escena musical de la época fecunda de la salsa dura, pero su propuesta se expandió y se diversificó hasta alcanzar un genial status de Maestro, dando otros matices a sus productos ya conocidos.


En el disco Mundo (2000), la colaboración con Boca Livre, una extraordinaria agrupación brasileña que se destaca por el uso de disonancias y solos fuera de lo convencional en el estilo de voces que juegan entre lo popular y el bossa, integrando métricas elaboradas y el toque refrescante en cada una de sus melodías.


El año pasado, Blades y Boca Livre produjeron el disco Pasieros/Paceiros que, según palabras del cantautor, “describe el amor, alegría y respeto entre nosotros, y por el arte, la gente y la música del mundo”.


El maestro Blades explicaba que supo de ellos por intermedio de “Nano” Alemán, baterista de la agrupación local Son Miserables, y su deseo de grabar música con arreglos vocales provenía de sus experiencias cuando escuchó al grupo brasileño “Jongo Trio”, en 1966.

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“He sido un fiel admirador. Trabajé primero con Boca Livre en «MUNDO» (Latín Grammy 2002 y Grammy 2003) y ahora en este álbum titulado, ¨PASIEROS¨, donde han hecho arreglos vocales para composiciones que antes grabe en el género de Salsa”, argumentó Blades.


La primera vez que los Grammy premiaron en esta categoría fue en 1984 con la producción del puertorriqueño José Feliciano Me Enamoré, y desde entonces, la comunidad artística de los Estados Unidos abrió el espacio para que el trabajo latino en el género pop tuviera mayor posicionamiento.


Para Blades, es su tercer triunfo en la categoría Mejor Álbum de Pop Latino. El primero fue por el extraordinario disco Tiempos; luego, por su trabajo al incorporar temas suyos en la producción Tangos, y este año compitió con Pasieros, junto a producciones de estrellas de la talla de Christina Aguilera, Camilo, Fonseca y Sebastián Yatra.


“Raras veces se incluye mi trabajo reciente en las programaciones de la radio comercial. No formo parte de sellos multinacionales y tampoco cuento con sus gigantescas conexiones publicitarias. Boca Livre y yo no somos un producto de la propaganda sino de lo que se conoce como «word of mouth»: el que sabe, sabe. Boca Livre es un grupo vocal de primer orden, con una gran trayectoria y merece esta distinción, concedida por la Academia de las Artes Fonográficas de Estados Unidos: el Grammy a la excelencia discográfica, categoría Pop”, comentó el panameño en sus redes sociales.


Pasieros contiene mucha riqueza musical en los arreglos de Sin tu cariñom Buscando Guayaba, Paula C, Caminando, Día a Día, Adán García, Juana Mayo, Dime, Vida, Aguacero y Pedro Navaja. El resultado es excepcional y un orgullo para la música Pop que la da vitalidad a un género que se pierde entre rimas reggetoneras, secuencias rítmicas con loops prefabricados y sampleos de fácil recordación.


Zé Renato
(guitarra, voz), Lourenço Baeta (guitarra, flauta, voz), David Tygel (viola caipira, voz) y Mauricio Maestro (bajo, guitarra, voz, arreglos) se reunieron de nuevo con Rubén y vaya que confirman lo muy “pasieros” que son, por esos azares felices que describiera el profesor Martín Jamieson al referirse al término que en ciertas regiones nuestras significa “amigos”.


“Lo que más vende no es necesariamente lo que representa a la mejor calidad. Eso es lo que prueba el resultado que hoy agradecemos”, destacó Blades. El hecho cierto es que Pasieros tiene “buco mendó”.

Por: Rainer Tuñón C. En Revista Hacia La Luz de la UP