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Por Dr. Oscar Aldrey Palacios

El Dr. Oscar Aldrey Palacios es pediatra inmunólogo clínico, profesor asociado (ad honorem) del Instituto de Inmunología Dr. Nicolás Bianco de la Universidad Central de Venezuela (UCV), presidente actual del grupo Aria Internacional para Venezuela y fellow de la American Academy of Asthma Allergy and Inmunology (Faaaai), miembro de la Academia Europea de Alergia e Inmunología (Eaai) con más de 140 trabajos publicados, tanto de manera nacional como internacional.

La variante ómicron de la covid-19 que surgió en el sur de África a fines de noviembre, ya está extendida en más de 120 países de todo el mundo.

En el Reino Unido la tasa de infecciones ( que ya era alta pero estable,) comenzó a subir en el periodo previo a la Navidad. 

El último informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), indica que en América del Norte, los casos en los Estados Unidos disminuyeron alrededor de un millón durante la última semana; en muchos de los estados del sur de México han visto triplicarse las nuevas infecciones.

«Belice reporta las tasas más altas de nuevas infecciones en América Central, aunque las infecciones también se están acelerando en Honduras y Costa Rica. Los casos de covid-19 también están aumentando en América del Sur, con picos en Argentina y Brasil, así como un alto número de infecciones en Paraguay, las Guayanas, Bolivia, Perú y Ecuador. En el Caribe, se informaron aumentos significativos de infecciones en Haití y Martinica«.

Venezuela reporta a la fecha, 475,135 casos de covid-19 acumulados y 5, 419 defunciones desde el inicio de la pandemia.

¿Qué tan peligrosa es la variante ómicron?

Ya se conoce  que la variante ómicron es más transmisible que la variante delta.

El 26 de noviembre, la Organización Mundial de la Salud declaró a ómicron una “variante de preocupación”, alarmada por sus 32 mutaciones en la proteína de la espícula, lo que sugería un potencial para evadir el conjunto de vacunas contra el covid-19 actualmente disponibles.

Los síntomas de ómicron parecen ser leves, con  signos similares a los del resfriado común, como congestión nasal, dolor de garganta y dolores de cabeza. 

Los primeros análisis que llegaron de Sudáfrica sugerían un riesgo reducido de hospitalización entre las personas infectadas con ómicron, en comparación con las infectadas con otras variantes, en el mismo período de tiempo.

Además, una vez hospitalizadas, las personas infectadas con ómicron tenían un riesgo reducido de enfermedad grave en comparación con las personas infectadas por delta. Es probable que parte de esta reducción se deba a una alta inmunidad de la población.

En otros países empieza también a ser ilustrativo el desacoplamiento entre infectados por ómicron y el número de pacientes que entran en UCI y fallecen por covid-19, aunque todavía sea difícil determinar si la nueva variante es menos virulenta o si es efecto de la inmunidad de la población (infecciones previas y vacunación), o por ambas cosas a la vez.

La Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido, en su informe de evaluación de riesgos para la variante, ya califica de «riesgo relativo moderado» la posibilidad de hospitalización por ómicron, comparado con delta (aunque admite que todavía no hay datos sobre la gravedad una vez en el hospital o la mortalidad)

En Noruega, Holanda, Bélgica, Alemania, Sudáfrica o Austria ya ha comenzado a disminuir el número de casos. Es posible que en varios de estos países se mezclen el efecto de delta y ómicron. Algunos, además, llevaban varias semanas con restricciones.

 Aunque la posibilidad individual de hospitalización sea menor, demasiados casos pueden llevar al colapso a los sistemas sanitarios.

¿Cuáles son los síntomas clínicos más frecuentes de la infección por ómicron?

La nueva variante del coronavirus se diferencia de otras cepas por sus manifestaciones clínicas.

A diferencia de otras variantes, como por ejemplo la delta, que es la más común todavía en Europa, la variante ómicron presenta otras características.

Entre los síntomas potenciales relacionados con las infecciones por ómicron destaca principalmente la fatiga, sensación de cansancio o agotamiento y dolor en varios grupos de músculos del cuerpo.

El problema de la fatiga es que puede darse también en otras enfermedades, incluido el resfriado común, por lo que es difícil de detectar si no nos hacemos una prueba. Por eso, los especialistas recomiendan que al notar los síntomas, proceder con la prueba. 

Otros síntomas

Ómicron puede causar síntomas leves como irritación de garganta, fatiga o dolor de cabeza, y síntomas más graves como fiebre e insuficiencia respiratoria. Pero todos ellos también dependen del estado de vacunación, edad, condiciones de comorbilidad y historia de infecciones naturales.

 En general y resumiendo,  los síntomas más comunes de las infecciones por covid-19, incluidos los causados por ómicron, incluyen fiebre o escalofríos en el cuerpo, tos, dolor de garganta, falta de aire o dificultad para respirar, fatiga o dolores musculares o corporales, dolor de cabeza, congestión o secreción nasal, náuseas o vómitos y diarrea.

Cualquiera de estos síntomas, puede aparecer de dos a 14 días después de haber estado expuesto al SARS-CoV-2

Las primeras investigaciones sobre la nueva cepa indican que ómicron no causa síntomas tan graves como los experimentados debido a las infecciones del delta. Tampoco se produce el efecto de pérdida del gusto ni del olfato que han sufrido los infectados por otras variantes.

Sin embargo, la OMS advierte que, si bien la variante ómicron pueda causar menos casos graves que la delta, podría aumentar las hospitalizaciones y las muertes si, como se teme, es más contagiosa y causa más infecciones en general.

¿Las vacunas protegen frente a ómicron?

 Las personas con dos dosis permanecen protegidas frente a la hospitalización, aunque hayan perdido parte de la protección frente a la infección.

Probablemente esto es debido a que la mayoría de las vacunas proporcionan una respuesta celular que no se ve afectada por esta variante.

También hay datos que demuestran que una tercera dosis de las vacunas ARN mensajero tienen una potente capacidad neutralizante contra ómicron.

Además, ya se están desarrollando nuevas vacunas universales frente al SARS-CoV-2 y todas sus variantes, incluida ómicron.

 ¿Hay fármacos eficaces contra ómicron?

La revista Science (1) presenta en su portada al medicamento Paxlovid, un nuevo antiviral oral, inhibidor de la proteasa viral, con una capacidad de disminuir el riesgo de covid-19 grave en más de un 90 %. Este antiviral ya ha sido aprobado por la FDA.

El Paxlovid es un inhibidor de una de las proteasas del SARS-CoV-2, la denominada 3CL. El tratamiento se combina con otro inhibidor de las proteasas, el ritonavir, que ha sido empleado contra el VIH.

Como la variante ómicron no presenta mutaciones en esas proteínas que son la diana de Paxlovid, es muy probable que este fármaco sea igualmente eficaz con la nueva variante en la vida real. Al menos, según ha informado la empresa Pfizer, los ensayos in vitro así lo demuestran (2).

Pero todavía hay más. El anticuerpo monoclonal Sotrovimab, (3) de la empresa GSK, también parece que es eficaz contra ómicron. Se trata de un anticuerpo que se une a una zona concreta (epítopo) en el SARS-CoV-2 compartida con el SARS-CoV-1 (el virus que causa el SARS), lo que indica que ese epítopo está muy conservado. Esto dificulta que se desarrollen resistencias en las nuevas variants

El Remdesivir, un inhibidor de la ARN polimerasa viral, es otro antiviral que en pacientes no hospitalizados con síntomas covid-19 resultó en un 87 % menos de riesgo de hospitalización o muerte que el placebo.

Gilead, el fabricante de Remdesivir, ha llevado a cabo un análisis de la información genética de ómicron y no ha encontrado mutaciones que afecten a la diana de este fármaco, por lo que es muy probable que este antiviral siga siendo activo contra esta variante.

Hasta la fecha, la actividad antiviral de Remdesivir ha sido confirmada in vitro contra todas las otras variantes del SARS-CoV-2, incluyendo alfa, beta, gamma, delta y épsilon.

 ¿Cómo prevenir un contagio?

Las vacunas se consideran, por el momento, la mejor medida de protección contra enfermedad grave y la muerte por variantes de covid-19. 

La OMS insiste en que las medidas más eficaces que pueden tomar las personas para reducir la propagación del virus COVID-19 es mantener una distancia física de al menos un metro de los demás; usa una mascarilla ajustada; abrir ventanas para mejorar la ventilación; evitar los espacios mal ventilados o abarrotados; mantener las manos limpias; toser o estornudar con un codo o un pañuelo doblado; y sobre todo, vacunarse cuando sea su turno.

Conclusión

Todavía la situación es muy delicada, en particular por el explosivo aumento de casos que están llevando al sistema sanitario al colapso. La buena noticia es que si antes uno de cada 100 casos acababa en el hospital, ahora, gracias a las vacunas, es uno de cada 1.000.

Por supuesto,  si aumenta de manera exponencial el número de casos, las hospitalizaciones también lo harán con riesgo del colapso del sistema. La cautela es una palabra adecuada y confiar que el 2022, ya con vacunas, sea el principio del fin de la pandemia.

Referencias

1  Science 1  Bethany Halford
January 14, 2022 | A version of this story appeared in Volume 100, Issue 3

2 Recon: Pfizer says Paxlovid appears effective against omicron; Unilever ends pursuit of GSK consumer arm

Posted 19 January 2022 | By Joanne S. Eglovitch 3   Early Treatment for Covid-19 with SARS-CoV-2 Neutralizing Antibody Sotrovimab  Anil Gupta, MD et al November 18, 2021N Engl J Med 2021; 385:1941-1950