«Consciente de la función integradora que históricamente ha desempeñado en las más importantes luchas nacionales», la Universidad de Panamá (UP) presenta a la ciudadanía y el Gobierno Nacional propuestas para atender la actual crisis social y pone a disposición de la sociedad «sus recursos humanos, salones y aulas magnas para servir de facilitador en lo que debe ser un Gran Diálogo Nacional por el Bien Común».
Este comunicado, con fecha 11 de julio, aprobado por el Consejo Académico de la UP, suscrito por el Dr. Eduardo Flores Castro, rector de la UP, y por el profesor Ricardo Parker, secretario general, recuerda que la institución, conciencia crítica de la Nación, «no puede permanecer impasible frente a la emergencia social inflacionaria que sufren los más humildes sectores de la sociedad desde hace años, y que ha empeorado en las recientes semanas en medio de protestas en las calles».
En el comunicado, señalan que las protestas de educadores, estudiantes, padres de familia, sindicatos y asociaciones sociales, reflejan la preocupación por «el desenfrenado precio de los productos de primera necesidad, como alimentos, transporte y medicinas».
En el comunicado se explica que si bien se comprende el contexto mundial que impacta en el suministro de bienes y alza del petróleo y escapa del control del Gobierno, «no menos cierto es que, de éste debe surgir la coordinación de las iniciativas responsables, efectivas y morales para aligerar la situación adversa y generar iniciativas coherentes».
Por otra parte, en el comunicado de la UP por la crisis nacional, señalan la preocupación por la ausencia de medidas gubernamentales efectivas, «la indolencia mercantil y la total amoralidad de sectores políticos que se aprovechan de las necesidades humanas a través del uso indebido de recursos patrimoniales del Estado que deberían estar destinados a responder a la emergencia social».
Proponen «un alto a la especulación en los precios de alimentos y mediamentos» y asegurar «el congelamiento del precio del combustible y la eliminación del suministro de combustible gratis a los funcionarios», a quienes piden practicar el principio de solidaridad.
Plan de Emergencia Nacional a favor de los desempleados
En comunicado emanado del Consejo Académico también se propone crear «un Plan de Emergencia Nacional a favor de los desempleados y tomar medidas enérgicas contra los evasores de impuestos, con el objetivo de ordenar las finanzas públicas y eliminar los onerosos privilegios fiscales que profundizan la brecha de la inequidad».
Consideran que en este momento la «sociedad panameña precisa de su mayor talento y creatividad para encontrar soluciones plausibles, austeras y efectivas que devuelvan el sosiego a la población y mitiguen, suficientemente, el dolor de los panameños más humildes».
Reiteran, en este sentido, la necesidad de hacer un alto y llamar al diálogo «para rescatar la cohesión social que nos lleve por caminos de compromisos de austeridad gubernamental, redistribución de los recursos nacionales para paliar la pesada carga en las espaldas de los más humildes de país y recuperar la moralidad, como mecanismo de compromiso y apoyo con el bien común».
Este diálogo, al cual se ofrece la UP como mediador, señalan que debe estar fundamentado «en una construcción social, justa y solidaria, con propuestas coherentes que conduzcan a una nueva relación entre el Estado y el ciudadano en materia de salud, educación, seguridad alimentaria, derechos humanos y solución de conflictos desatendidos».
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Con material del comunicado de la UP al país
