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Autor: Dr. Oscar Aldrey Palacios

La alergia a un medicamento es una reacción anormal  exagerada del sistema inmunitario al estar en contacto con ese medicamento. Es una reacción inmunológica inesperada, impredecible e independiente de los efectos farmacológicos propios del medicamento en cuestión.

 La mayor parte de las reacciones adversas a los medicamentos no son inmunológicas, es decir, no son alérgicas.

Cuando una persona toma una cantidad de medicamento inadecuada para su talla, su peso, su edad o la química específica de su organismo, pueden ocurrir reacciones adversas que llamamos predecibles; la mayoría de ellas dependen de la dosis, y en muchos casos son inevitables.

La alergia a los medicamentos no es lo mismo que un efecto secundario, es decir, las posibles reacciones conocidas que se enumeran en la etiqueta de los medicamentos.

 Por otra parte la alergia a los medicamentos también se diferencia de la toxicidad que puede ocasionar la sobredosis de medicamentos.

Todos los medicamentos, sean de venta libre, recetados o a base de hierbas, pueden producir alergia.

Sin embargo, existen ciertos medicamentos que provocan alergia con mayor probabilidad.

¿Por qué se desarrollan alergias hacia los medicamentos?

Para que exista alergia a medicamentos, es indispensable que haya contacto previo con el medicamento y se produzca sensibilización al mismo.

Las reacciones alérgicas a medicamentos se dividen básicamente en dos grupos, de acuerdo con la rapidez de presentación: las de tipo inmediato, que se presenta dentro de la primera hora de la toma del medicamento; y las de tipo tardío, que se presentan pasada una hora, al menos, de la toma del medicamento (aunque a menudo pueden tardar semanas en desarrollarse).

Las reacciones de tipo inmediato se desencadenan por la producción del anticuerpo o inmunoglobulina E (IgE), mientras que las de tipo tardío lo hacen por distintos mecanismos inmunológicos, y pueden dar lugar a varios tipos de reacción:

  • enfermedad del suero, mediada por inmunocomplejos
  • aplasias medulares, mediadas por inmunoglobulinas G
  • dermatitis de contacto, desencadenadas por linfocitos T

 O distintos tipos de reacciones dérmicas (o toxicodermias) muy graves:

  • El  síndrome DRESS (síndrome de hipersensibilidad por fármacos con eosinofilia),
  • El eritema exudativo multiforme (EEM o síndrome de Stevens-Johnson),
  • La necrólisis epidérmica tóxica (NET) u otras.

Si la vía de administración es intramuscular, endovenosa o subcutánea, la respuesta puede ser mucho más rápida; si la vía de administración es por vía oral, esta respuesta puede aparecer pasada una hora o a veces hasta semanas.

¿Existen algunos componentes específicos que pueden generar mayor tipo de reacción?

Como ya se informó, el tipo de reacción que se diagnostica con más frecuencia es la de tipo inmediato, mediada por el anticuerpo IgE en respuesta a un medicamento.

El componente del medicamento que produce la reacción se denomina haptenos o antígenos incompletos, es decir, moléculas muy pequeñas que por sí mismas no son capaces de estimular el sistema inmune, sino que precisan unirse a proteínas del organismo, llamadas proteínas transportadoras.

De esta forma se genera un antígeno completo, que es el que origina la producción de IgE dirigida específicamente contra el fármaco en cuestión, dando reacciones a veces muy severas de inflamación y edema.

¿Qué medicamentos producen reacciones de alergia con más frecuencia?

Los antibióticos betalactámicos (penicilina y derivados como la amoxicilina y las cefalosporinas) son la causa principal de reacciones alérgicas a medicamentos, hasta un 50% de los diagnósticos.

Siguen los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) ácido acetilsalicílico, pirazolonas, ibuprofeno, diclofenaco…), responsables del 39% de dichas reacciones.

Otros antibióticos (sulfamidas, quinolonas, tetraciclinas, macrólidos); los medicamentos antiepilépticos (fenitoina, carbamacepina, lamotrigina) y ciertas medicinas utilizadas en anestesia general (bloqueadores o relajantes neuromusculares) son también comunes.

Las vacunas y las proteínas producidas por biotecnología pueden inducir reacciones ocasionalmente.

El látex en los guantes de goma y los dispositivos médicos también puede causar reacciones de alergia, que pueden confundirse con reacciones a fármacos.

¿Cuáles son las reacciones más frecuentes asociadas con las alergias a los medicamentos?

A menudo, los signos y síntomas de una alergia grave a los medicamentos se producen dentro de la hora de haber tomado el medicamento.

Otras reacciones, en especial las erupciones, pueden ocurrir horas, días o semanas más tarde.

Estos son algunos de los signos y síntomas de la alergia a un medicamento:

  • Erupción cutánea
  • Urticaria
  • Picazón
  • Fiebre
  • Hinchazón
  • Falta de aire
  • Silbido al respirar
  • Moqueo
  • Ojos llorosos y con picazón

Anafilaxia

La anafilaxia es una reacción poco frecuente de alergia a los medicamentos que pone en riesgo la vida y que causa una disfunción generalizada de los sistemas del cuerpo. Algunos de los signos y síntomas de la anafilaxia son los siguientes:

  • Estrechamiento de las vías respiratorias y de la garganta, lo que genera dificultad para respirar
  • Náuseas y cólicos
  • Vómitos o diarrea
  • Mareos o aturdimiento
  • Pulso débil y acelerado
  • Caída de la presión arterial
  • Convulsiones
  • Pérdida del conocimiento

Otras enfermedades causadas por la alergia a los medicamentos

Las reacciones menos frecuentes de alergia a los medicamentos ocurren días o semanas después de la exposición a la droga y pueden persistir durante un tiempo tras haber dejado de consumirla. Estas son algunas de ellas:

  • Enfermedad del suero, que puede causar fiebre, dolor en las articulaciones, erupciones, hinchazón y náuseas
  • Anemia inducida por los medicamentos, reducción de los glóbulos rojos que puede causar fatiga, latidos irregulares del corazón, falta de aire y otros síntomas
  • Erupción por medicamentos con eosinofilia y síntomas sistémicos, la cual ocasiona una erupción, recuentos altos de glóbulos blancos, hinchazón generalizada, inflamación de los ganglios linfáticos y recurrencia de la infección por hepatitis latente
  • Inflamación de los riñones (nefritis), que puede provocar fiebre, sangre en la orina, hinchazón generalizada, confusión y otros síntomas

¿Cómo determinar si una persona es alérgica a un medicamento y así evitar las consecuencias de su administración?

El problema principal en el diagnóstico de alergia a medicamentos es la falta de técnicas diagnósticas que ayuden a confirmar las sospechas clínicas.

El diagnóstico se basa primordialmente en una anamnesis o historia clínica detallada de la reacción y los medicamentos implicados.

Para confirmar las sospechas de la historia, de acuerdo con la evaluación del especialista, se pasa a estudios in vitro (de laboratorio) y/o estudios in vivo (sobre el propio paciente).

Los estudios in vivo entrañan un riesgo de reacción en el paciente sensibilizado, por lo que siempre deben estar en manos de personas expertas.

Incluyen la realización de las pruebas cutáneas de punción e intracutáneas, habitualmente con lectura inmediata del resultado a los quince minutos; y las pruebas epicutáneas o de parche, con lecturas tardías a las 48 y 96 horas.

En determinados casos, puede ser necesario realizar pruebas de exposición controlada al fármaco, en el caso de que el resto de pruebas previas haya sido negativo y sea necesaria una confirmación (varios medicamentos implicados en la reacción alérgica).

En general, en función del tipo y gravedad de la reacción, se indica una pauta u otra de pruebas, y se valora además el estado del paciente, la necesidad del medicamento y las alternativas válidas, entre otros datos clínicos de interés

¿Cómo se trata una alergia a los medicamentos?

Lo dividiremos en tratamiento de la crisis y control

Crisis

En el momento de la reacción, es muy importante la recogida de los signos y la relación con la toma del medicamento, para realizar la inmediata suspensión de su toma.

En ese momento se han de instaurar las medidas de rescate, que van a depender del tipo y la gravedad de la reacción.

En las reacciones de tipo inmediato, el tratamiento incluye adrenalina, corticoides y antihistamínicos, así como tratamiento farmacológico de los síntomas de los órganos más afectados: broncodilatadores, cardiotónicos

En las reacciones tardías, el tratamiento se basa fundamentalmente en la utilización de corticoides por vía general, o por vía tópica si se trata de dermatitis de contacto.

En las reacciones ampollosas y otras toxicodermias graves con desprendimiento cutáneo, se incluyen una serie de cuidados similares a los de los grandes quemados.

Control

Una vez que se ha resuelto la reacción desencadenada, el paso siguiente tras realizar el diagnóstico incluye de manera obvia evitar el medicamento causal, así como la familia de fármacos relacionados químicamente con el causal (reactividad cruzada), de forma que se prevengan reacciones posteriores, indicándose en tales casos cuáles serían los fármacos alternativos.

Desensibilizacion

La desensibilización es el procedimiento por el cual a un paciente alérgico a un fármaco se le administran dosis crecientes de dicho fármaco, con el propósito de inhibir temporalmente su capacidad de respuesta alérgica a éste.

Consiste, básicamente, en administrar el fármaco en cantidades inicialmente muy bajas y progresivamente crecientes, hasta alcanzar la dosis terapéutica en un tiempo que oscila entre unas horas y varios días.

La desensibilización no tiene validez indefinida, sino que suele ser reversible: en general se considera que pierde su efectividad al suspender la administración del fármaco por un período superior a las 48 horas. Es un procedimiento de riesgo, que requiere un estricto control de personal con experiencia.

Es útil, en aquellos casos en los que no exista un tratamiento alternativo válido, y prescindir del medicamento al que el paciente es alérgico, puede poner en peligro su vida, por ejemplo, uso de tratamiento oncológico.

Dr. Oscar Aldrey Palacios

El doctor Oscar Aldrey Palacios es pediatra inmunólogo clínico, profesor asociado (ad honorem) del Instituto de Inmunología Dr. Nicolás Bianco de la Universidad Central de Venezuela (UCV), expresidente de la Sociedad Venezolana de Asma, Alergia e Inmunología (Svaai), epónimo del XXVII Congreso Nacional de la Svaai 2019, presidente actual del grupo Aria Internacional para Venezuela (encargado de dictar pautas para el manejo del asma y la rinitis alérgica) y fellow de la American Academy of Asthma Allergy and Inmunology (Faaaai), miembro de la Academia Europea de Alergia e Inmunología (Eaai) con más de 140 trabajos publicados, tanto de manera nacional como internacional