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La Academia Nacional de Medicina (ANM) de Venezuela expresó su preocupación por la baja cobertura vacunal luego de seis meses de iniciada la vacunación; apoyó la inmunización de adolescentes con Sinopharm y reiteró que Abdala y Soberana 2 son candidatos vacunales sin aprobación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Por otra parte, estableció varias consideraciones para un oportuno y seguro regreso a clases.

En comunicado, la corporación académica expresó que «apoya la decisión del Ejecutivo Nacional de vacunar a los adolescentes de 12 a 18 años con la vacuna Sinopharm».

Señala que «de acuerdo a sugerencias expresadas en tres comunicados anteriores, debió ser hecho antes del inicio de clases y no esperar el primer día de clases para proceder a la vacunación, sin contar con información ni los planteles ni en las familias».

Insiste la ANM «en la baja cobertura vacunal luego de seis meses de iniciada la vacunación anti covid-19 en el país, por lo cual la ANM recomienda «que la vacunación debe ser hecha centrada en la familia, ya que aún hay una gran cantidad de adultos sin recibir este beneficio».

Ante la posibilidad expresada por el Ejecutivo Nacional y por razones no explicadas, de que se trate de introducir los candidatos a vacuna (Abdala y Soberana 2) , los cuales no tienen reconocimiento por ningún ente regulatorio internacional independiente, ni por la Organización Mundial de la Salud, la ANM reiteró su preocupación:

Nuevamente hacemos un exhorto al Ejecutivo Nacional para que reconsidere esta decisión de administrar los mismos a la población venezolana y menos a los niños y niñas, sin informar a los padres y representantes que no se trata de vacunas y que de hacerlo sería en el cumplimiento de una fase experimental, para lo cual deberían firmar un consentimiento informado, autorizando tal medida.


Por otra parte, reconociendo la necesidad de la población estudiantil de volver a las aulas, la ANM solicita cumplir varias premisas:

  • Tomar en consideración la presencia de la Cepa Delta , la cual es más contagiosa, de acuerdo a zonas geográficas e incidencia poblacional.
  • Vacunación del profesorado y personal de los planteles educativos.
  • Vacunación de los niños y niñas a partir de los 12 años de edad, con vacunas aprobadas por la OMS y no con prototipos vacunales.
  • Refacción de la planta física de las escuelas, dotación de baños funcionales, con suministro continuo de agua y jabón, proveer gel alcoholado para la entrada a los salones de clase, suministrar diariamente mascarillas o tapabocas en los planteles educativos para personal y estudiantes.
  • Entrenar al personal docente sobre normas de bioseguridad y hacer que las mismas se cumplan.
  • Planificar las clases presenciales con aforo reducido, dotar a profesores y estudiantes de equipos de computación y entrenarlos en el uso de los mismos.
  • Mejorar la disponibilidad y calidad de la internet, entre otras medidas a considerar. Solo así, podría pensarse en una vuelta a clases con el menor riesgo posible para todos.


La Academia Nacional de Medicina reiteró que ofrece su asesoría para la selección de vacunas que ya hayan demostrado seguridad y eficacia.

«Al mismo tiempo reiteramos nuestra preocupación ante la introducción en la población venezolana de productos no autorizados para su uso de emergencia, sin la previa presentación de resultados que avalen su calidad».