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Por: María Mercedes Armas (Psicóloga)

La licenciada María Mercedes Armas Barrios es psicóloga egresada de la Universidad Central de Venezuela. Es integrante del Observatorio Venezolano de los DDHH de las Mujeres y del Centro de Investigación Social Formación y Estudios de la Mujer.
@psico.mm.armas
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Las redes sociales pueden ser una carta de presentación profesional. Pero no todo lo que brilla es oro en las RRSS. Además de las conductas adictivas que promueven, hay aspectos muy riesgosos que han ido causando cada vez más impacto y daños, en particular entre los jóvenes que se ven expuestos a este tipo de riesgos.

Las estafas de diversa índole son muy comunes en el ámbito digital; tales como ofertas falsas de premios o descuentos, perfiles falsos solicitando donaciones, ofertas de empleo o casting, oportunidades de negocios, entre otras. Es muy importante estar alerta, seguir los procedimientos de seguridad, verificar bien antes, buscar ayuda con alguien experto y no dejarse llevar por la necesidad o el impulso para aceptar este tipo de enlaces y situaciones.

Las noticias falsas o fake news son otra manera de usar las RRSS con el fin de desinformar, confundir y alarmar sobre temas de interés o actualidad; por lo cual es importante contrastar la información antes de difundirla.

La suplantación de identidad, con diversos fines, es frecuente en las redes sociales. En el ámbito digital cualquiera puede hacerse pasar por cualquier cosa, incluso por nosotros mismos, y desde allí actuar para obtener beneficios y acceso a información confidencial. El Sexting consiste en el envío de imágenes o videos de contenido sexual, lo cual puede poner en riesgo la privacidad al perder el control de la información al ser compartido en redes, cadenas de WhatsApp y llegar a ser vistas por familiares, amigos o miles de personas desconocidas o incluso terminar en páginas de pornografía sin que esta haya sido la intención inicial.

Es importante recordar también que las relaciones cambian y, en muchas ocasiones, terminan. ¿Quieres que alguien que ya no está en tu vida, conserve esas imágenes sin tener el control del uso que pueda darle?

Otra forma de acoso es el  Grooming que tiene como blanco a los niños, niñas y adolescentes y es ejecutado intencionalmente por un adulto, hombre o mujer, que se hace pasar por un niño, niña o adolescente, construyendo perfiles falsos en las redes, con fotos que captan el interés y la confianza de los menores que pretende victimizar, ofreciéndole amistad o mostrando su interés o atracción hacia él o ella, con el objetivo central de llevar al menor al plano sexual para obtener material explícito que le sirva posteriormente para chantajearlo.

Aunque cada uno de estos puntos merece una publicación aparte, vamos a cerrar el tema con el Ciberbullying el cual consiste en diversas acciones de violencia digital como hostigamiento, amenazas, humillación, entre otras, ejercida por parte de un menor hacia otro menor mediante la publicación de textos, imágenes, videos y audios a través de medios electrónicos.

Todo lo mencionado genera efectos dañinos a nivel de la salud mental e incluso física, siendo su expresión más extrema la difusión de los retos extremos que se hacen virales que van cobrando víctimas entre los más jóvenes.

Dado el aumento de este tipo de acosos, es indispensable la supervisión de los padres de la actividad en línea de sus hijos pequeños y proporcionarles a los adolescentes las herramientas necesarias para proteger su seguridad respetando su privacidad.  Las RRSS tienen sus ventajas pero hay que usarlas con extrema cautela, pensamiento crítico y conocer las normas de seguridad y protección.

Por: María Mercedes Armas (Psicóloga)