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Por: Hisvet Fernández

Hisvet Fernández es psicóloga social, feminista, activista de los DDHH de las Mujeres y los Derechos Sexuales y Reproductivos, directora del Centro de Capacitación para la Vida (Cecavid). Integrante de la Alianza Salud Para Todas. Coordinadora del Observatorio Venezolano de los Derechos Humanos de las Mujeres, núcleo Lara. 
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Desde el año 1987, cada 28 de mayo se celebra el Día Internacional de la Acción por la Salud de las Mujeres. Iniciativa que tomó la Red Mundial de Mujeres por los Derechos Sexuales y Reproductivos, en una reunión realizada ese día para tomar en cuenta las distintas enfermedades que afectan a la población femenina mundial y en particular las enfermedades reproductivas.

Es muy importante entender la integralidad de la salud y asumir la no separación de sus dimensiones, porque cada una se articula con la otra y no podemos verlas ni comprenderlas por separado, ya que no existen de esa manera. Solo existen de manera integrada, para bien o para mal.

Eso quiere decir que lo que beneficie la salud física, beneficia la salud mental, social y sexual y así lo que beneficie a cada dimensión beneficia a toda la mujer de manera integral.

De igual manera, lo que perjudica o afecta a cada dimensión directamente afectará indirectamente a las otras dimensiones. Cuando hablamos de salud sexual y reproductiva de las mujeres, necesitamos tener en cuenta su salud en todas las dimensiones.

Las cifras de enfermedades asociadas a la maternidad y la mortalidad materna son hechos que han preocupado siempre a las mujeres. Por estas razones cada año, alrededor de este día, organizaciones de mujeres tratan de mostrar problemas de salud de las mujeres como la interrupción del embarazo y la violación de los Derechos Sexuales y Reproductivos. Pero también hay que tomar en cuenta todas las enfermedades asociadas al hecho de ser mujeres y a las que se viven de una manera mas agravada por el solo hecho de serlo.

Una salud integral es necesaria para que las mujeres en toda su línea de vida puedan tener una vida plena y jugar un papel importante y activo en la sociedad. Salud integral que incluye sus dimensiones de salud física, mental, social y sexual. De allí que este día permitiera realizar acciones que coadyuven a esta posibilidad y visibilicen las diferentes condiciones de vida: económicas, culturales, políticas, religiosas, educativas, laborales y otras, que impiden a las niñas, adolescentes, mujeres adultas y mujeres de la tercera edad el disfrute de su salud integral.

Este día se reconoce que la pobreza, la violencia, las guerras, la discriminación y exclusión social ya sea por sexo, género, religión, etnia, preferencia sexual, niveles de instrucción, discapacidades, situación migratoria, estado civil y otras, afectan a las mujeres en todo el planeta y les impiden alcanzar su Derecho Humano a la Salud Integral. Es necesario activarnos, y, a propósito del reciente 28 de mayo, hacer visibles los obstáculos físicos, mentales, sociales y sexuales que le puedan impedir a las mujeres alcanzar su plena salud y así prevenirlos, erradicarlos y evitarlos.

#SaluddelasMujeres #OurHealthOurRights


Por: Hisvet Fernández