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Dr. Alexis Bello

El Dr. Alexis Bello nos honró en 2020 con la publicación de este texto, el primero de varias colaboraciones para La Web de la Salud. Además del tema cardiovascular, el Dr. Bello ha abordado la importancia de la bioética y de respetar los límites de la vida. En este artículo, el Dr. Bello demuestra que el corazón lo inspira más allá de la práctica médica. Lo volvemos a publicar como parte del homenaje semanal a médicos y científicos que hacen posible que este medio exista y en la antesala del 29 de septiembre, Día Mundial del Corazón.


El corazón es el órgano responsable de toda la “economía humana”; bella e ingeniosa especie de bomba hidráulica, no igualada a nada de lo hecho por el hombre.

Se trata de un complicado ensamble de válvulas, tuberías, generadores y un sistema eléctrico autónomo, el cual se activa más de 100,000 veces por día para bombear 5,600 litros de combustible a lo largo de 100,000 Km. de tuberías (más de dos veces la circunferencia de la tierra).

Alimenta diariamente a 100,000 trillones de células en 20 segundos (es excluyente, omitió de este sustento a las córneas), para ello requiere realizar un trabajo energético equivalente a que una grúa levantase por la punta el Empire State Building, 1,000 metros, más de 1,200 veces, cada 24 horas.

Además, con algo de suerte, este asombroso dispositivo podría funcionar sin mayor mantenimiento durante más de 70 años, después de haber latido 2.5 billones de veces. 

Por otra parte, el corazón, es asiento de muchos atributos, condiciones, vilipendios, sentimientos, maltratos…, por parte de autores, músicos, poetas, escritores, en fin, de todos los que vivimos parcialmente gracias a la dedicación y trabajo de esta tramoya, las 24 horas de todos los días de nuestra existencia

Asimismo, resulta extraño por decir lo menos, el hecho de que otros órganos igualmente vitales sean mayormente ignorados y no constituyen motivo importante, de nuestras diarias vivencias existenciales.

He aquí algunos ejemplos: En el amor los riñones no te traicionan, pero el corazón sí. No existe en el juego de cartas el “tres de estómago”, pero sí el tres de corazón.

La gente lo tiene erróneamente ubicado en el lado izquierdo. En materia de conciencia y responsabilidad no hemos oído “hazle caso a tu cerebro”, solo debes obedecer lo que diga tu corazón.

La sociedad no relaciona la compasión y los rasgos de humanidad con el hígado, pero es común la expresión ¿es que no tienes corazón?

Además, lo utilizamos para estimular el coraje diciendo: Ponle corazón. Si quieres llamar a una persona querida, no decimos: Ven mi vesícula; debes decir acércate mi corazón. Alejandro Sanz no escribió: “Ojos partíos, por el contrario, sí la conocida canción: corazón partío. 

No hay personas despreciables sin oídos, pero sí miserables sin corazón. Se trata de un órgano responsable de agresiones.

No existe la exclamación: Me rompió el bazo; pero sí me rompió el corazón. Es curioso que la “proactividad” no resida en órganos como el olfato, tan solo basta animar diciendo “ponle corazón”.

Es resiliente: “Tiene un corazón indomable”. Consecuentemente, no existen testimonios, por ejemplo: Con la mano los ojos en, sino: Con el corazón en la mano.

Los otros órganos son poco mencionados por los autores, pero el corazón, está plasmado en casi 50% de todos los poemas y canciones.

No existe “el día del fémur” pero celebramos el Día Mundial del Corazón.

Por ser entusiasta, panegírico y vilipendiado también es “justiciero”: A pesar de múltiples escuadrones de rescate (cardiólogos, cirujanos, intensivistas…), es responsable del secuestro y de la primera causa de muerte en el mundo, cómplice de la desaparición anual de más de 14 millones de personas.

Solamente en USA asesina a una persona cada 40 segundos.

Es el responsable de más fallecimientos que las producidas por la combinación de cáncer y enfermedades respiratorias, y extremadamente caprichoso: sus emboscadas son mayores en diciembre y los lunes en la mañana.

En fin, tal como lo establece la liturgia… levantemos el corazón.

Dr. Alexis Bello

El doctor Alexis Bello es cirujano cardiovascular del Hospital de Clínicas Caracas, egresado de la Universidad Central de Venezuela, Harvard University y Cleveland Clinic Foundation.Ex Presidente de la junta directiva del Hospital de Clínicas Caracas 1986-2009 (23 años), presidente de la Fundación Cardioamigos, miembro del Consejo Asesor de la Asociación de Clínicas y Hospitales privados de Venezuela y expresidente de la Asociación de Hospitales Líderes en América Latina. Tiene más de 300 trabajos, películas y videos científicos presentados o publicados, con más de 9,500 procedimientos de cirugía cardiaca realizados a lo largo de su vida profesional y pionero en el uso de once avances tecnológicos en América Latina.