Más de 110 reconocidos creadores de Panamá, América y Europa, participan en la Subasta Anual de Arte de la Fundación Oír es Vivir, cuyo catálogo virtual ya se puede consultar. La exhibición física será del 20 al 26 de septiembre y la puja del 24 al 26 de septiembre
Hay historias que en lugar de bifurcarse se encuentran en el destino común de la solidaridad.
De esta primera historia es deudora la Dra. Cynthia Guy: su esposo pierde de manera súbita la audición y la logra recuperar gracias a un implante coclear.
En lugar de poner punto final a esta historia personal, decidió que sumara varios capítulos. Crea la Fundación Oír es Vivir en el año 2008, con la motivación de ayudar a niños y a adultos a tener el “regalo del sonido”.
En 2011 la iniciativa crece con la fundación del Centro Integral de Salud Auditiva (CISA), que además de gestionar aparatos auditivos, ofrece atención integral.
En esta tarea incorpora voluntarios como Giovanna Troncoso, actual presidenta de la Fundación Oír es Vivir, quien ha conocido como mamá, el impacto de una pérdida de la audición, razón más que poderosa para impulsar un proyecto que desde su fundación ha logrado examinar un promedio de 26,000 pacientes.
Marsha Díaz, comunicadora social y especialista en Responsabilidad Social Empresarial (RSE), cuando llega a Panamá, ya venía de trabajar en el Instituto Venezolano de la Audición y el Lenguaje (IVAL), como voluntaria, sensibilizada por historias familiares de pérdida de audición.
Esta historia personal también desembarcó en la solidaridad al conocer el sentido social de la Fundación Oír es Vivir, de la cual forma parte desde hace siete años.
El arquitecto Reinier Rodríguez, gestor, investigador, profesor de historia del arte, fundador de la plataforma Menú Creativo, reflexiona que la sensibilidad hacia lo social es consustancial del artista y, en el caso particular de la pandemia y de Panamá, los creadores han participado en distintas subastas que apoyan la causa de la salud y del bienestar.
Estas voluntades e historias de servicio, desde lo social y lo artístico, dan pleno sentido a la Cuarta Subasta Anual de Arte de la Fundación Oír es Vivir, segunda en formato virtual, que se desarrollará a través de la plataforma www.32auctions.com
El arquitecto Reinier es cocurador junto con el Dr. Francisco Sousa Lenox, creador de Panamá Plástica (iniciativa digital de promoción de las artes plásticas panameñas) y de esta subasta en respaldo a la salud auditiva.
Desde ya los interesados pueden acceder al catálogo, seleccionar la obra escogida y luego estar atentos a la puja, prevista desde el viernes 24 de septiembre hasta el domingo 26 de septiembre de 2021.
De igual modo, podrán visitar la muestra presencial en el espacio de GAC Motors en calle 50, del 20 al 26 de septiembre (frente a la Casa de las Frutas y Helados).
Una labor indetenible
Marsha Díaz explicó que la Subasta Anual de Arte de la Fundación Oír es Vivir permitirá que la institución mantenga sus servicios de atención y prevención, dirigida a la población de menores recursos.
En la Fundación opera la economía circular de la solidaridad: todo el dinero que ingresa se reinvierte en programas que ayudan a convertir el sonido en silencios.
El 23% de la población en Panamá no pasa la prueba de audición, con independencia de si son personas con más o menos recursos, detalló.
La persona puede nacer con esta condición o perder la capacidad de oír por alguna infección o accidente.
Sin embargo, advierte, el 50% de las pérdidas auditivas son prevenibles y de allí la importancia de revisar nuestra audición todos los años.
Un dato revelador: Los 40 decibeles que emite una licuadora encendida, o una aspiradora, ya pueden afectar el oído.
Destaca que en Panamá están impulsando en la Asamblea Nacional, un proyecto de ley que garantice el despistaje auditivo neonatal, una prueba que se practica al recién nacido y permite determinar de inmediato si existe una pérdida de audición y actuar de manera temprana.
Giovanna Troncoso, presidenta de la Fundación Oír es Vivir, detalla en la presentación del catálogo virtual de la Subasta de Arte, que la institución “y su Centro Integral de Salud Auditiva se dedican a la identificación e intervención temprana de deficiencias auditivas en niños, jóvenes y adultos, para atenderles y educarles a ellos, sus familiares y a la comunidad en general”.
Reflexiona que la pandemia fue un tiempo de retos y obstáculos, sin embargo, “a prueba de toda adversidad”, lograron atender en 2020, y lo que va de 2021, a más de 1,500 pacientes.
Incluso crearon una “fabulosa idea de mascarillas transparentes que no solo protegió a quienes las usan y favoreció además a seis fundaciones amigas, sino que también apoyó a las artesanas que las confeccionaron”.
Estas mascarillas eliminan una barrera visual en quien necesita de los labios para interpretar y comprender el lenguaje de señas.
Troncoso describe que el “enorme compromiso por mejorar la salud auditiva en Panamá” los mantiene con fuerzas y aliento para seguir en la batalla.
La escucha del arte
Marsha Díaz y Reinier Rodríguez, documentan que la Subasta Anual de Arte de la Fundación Oír es una iniciativa del Dr. Francisco Sousa-Lennox (@PanamaPlastica), apasionado de las artes plásticas y papá de un niño con implante coclear.
Rodríguez se incorpora como artista en la segunda subasta y ahora, además de presentar una obra, apoya en la curaduría de una muestra que reúne el trabajo de artistas de Panamá, América y Europa y pone a dialogar propuestas plásticas y sus distintas tendencias.
Por Venezuela son tres las miradas: la de Ana Corina Guinand, quien viene de las artes gráficas y el branding; Juan Romano, artista plástico, fotógrafo y escultor, quien inauguró en fecha reciente la muestra Línea de vida en la galería Habitante y Manuel Ojeda, asistente del maestro Carlos Cruz Diez por más de 20 años y forma parte del taller Articruz con sede en ciudad de Panamá.
Desde Ecuador: Andrea Vernaza, Fernando Toledo e Iván Delgado.
Colombia: Armando Granja, Camila Bernal, Gladys Sevillano, Jairo Romero, Lala Valdés, Lida Castillejo, Omar Mendoza y Rodrigo Méndez
Argentina: Bárbara Cartier, Damián Hernández, Gustavo Fabbroni y Paloma Furlanis.
Rumanía: Botond Gagyi
Guatemala: Camilo Almaraz y Elsie Wunderlich
Honduras: Edgar Euceda
Costa Rica: Ernesto Asch
Cuba: Ernesto Córdova
Perú: Jorge Vallejos
España: José María Olivella, PP Bernal y Xavier Roselló
Estados Unidos: Lezlie Milson y Rodrigo Guardia
Francia: Monique De Roux
Panamá está presente con la amplia representación de su sólida escuela plástica, desde la maestra Coqui Calderón, promotora del arte contemporáneo y cuya obra ilustra la portada del catálogo, hasta la propuesta de las nuevas generaciones que representa Joaquín Sousa, con 12 años.
«Coqui Calderón es una de las grandes damas del arte panameño; también participa el célebre pintor “zonian” Al Sprague, conocido por sus obras de representación costumbrista; además, el maestro Adriano Herrerabarría, uno de los grandes impulsores de la plástica nacional y quien había estado ausente de las subastas en los últimos años.
Estará el gran Iván Delgado, maestro del realismo artístico, y Eduardo Navarro, uno de los artistas panameños de mayor proyección internacional.
Participa el artista Cisco Merel, el único panameño listado en el libro 100 Sculptors of Tomorrow (Kurt Beers, Thames & Hudson), libro curado por un numeroso jurado de personalidades internacionales del mundo del arte y la moda. Uno de los más grandes acuarelistas de Panamá, Ricaurte Martínez, director de la Universidad Ganexa, participa por primera vez.
Notar la presencia de Fernando Toledo, artista con una connotada trayectoria en Panamá y el extranjero.
Entre los artistas panameños más reconocidos de la siguiente generación: Brian Vergara, Eliézer Martínez, Remedios, Ricardo Sánchez Beitía, Diego Fábrega, Enrique Jaramillo, Franklin Rodríguez, Gabriel Wong, Ricaurte Him, Gabriela Batista, Emmanuel Moses, Alexander Wtges, Ahamed Hassán, Rolo De Sedas, Kansuet, Achu Kantule, Poonam Chatlani, Gladys Sevillano, Ana Lida Díaz, Armando Granja y Manuel Ojeda.
Mónica Lokan, Amir “Lucky” Candanedo, Camilo Almaraz, Celine Eskenazi, Cristian Pérez, Maikel Mendoza, Ricaurte Marín, Tello, Temy Maizón y Sofía Rivera, entre otros, son algunos de los prometedores artistas emergentes en la muestra».
Fundación Oír es Vivir
Reinier Rodríguez reflexiona que el artista tiene un impacto fundamental en la salud emocional de la sociedad: “Imagina cuán triste es una pared blanca, sin cuadros, o no encontrar el momento de disfrutar la música, ver una película o leer un libro. Esa sensibilidad hace que los artistas apoyen estos proyectos”.
Destaca que el espectador observará una amplia libertad creativa, así como propuestas que nacen de un artista en pandemia, con temas muy volcados hacia la cultura popular, la vuelta a la naturaleza por la añoranza que dejó el encierro y la liberación que resultó de pintar, por ejemplo, los objetos que veían desde su balcón.
Acrílico, óleo, fotografía, collage o esculturas son algunas de las técnicas presentes en una Subasta de Arte que expresa los mejores gestos de una sociedad: el de la Fundación Oír es Vivir que ayuda a recuperar sonidos ausentes; el de artistas en acto de escucha con auténtico compromiso social y el del comprador que al adquirir una de estas obras, hace su parte en este extraordinario camino de la solidaridad.