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A medida que las mujeres retrasan su momento de ser madres debido a factores demográficos y socioeconómicos, el envejecimiento reproductivo y la disfunción ovárica asociada se convierten en causas cada vez más comunes de infertilidad.

Con la edad, disminuyen cualitativa y cuantitativamente los óvulos, ocasionando frecuentemente problemas reproductivos.

“Es importante destacar que los trastornos del envejecimiento se asocian con frecuencia con disfunción mitocondrial, al igual que alteraciones de la ovogénesis –proceso de formación de las células sexuales femeninas- y la embriogénesis –formación y desarrollo del embrión-”, apunta el doctor Emre Seli, director de Investigación de IVI en Estados Unidos.

Al respecto, el especialista presentó en congreso reciente, un estudio que explora el papel de la disfunción mitocondrial en el envejecimiento ovárico y las posibles formas de atender los mecanismos mitocondriales para ralentizar o revertir los cambios relacionados con la edad en las gónadas femeninas –glándula genital que se encarga de elaborar las células reproductoras.

“Las mitocondrias son orgánulos muy especiales e importantes que juegan un papel clave en el metabolismo celular. Además, tienen su propio ADN mitocondrial y han estado implicadas durante mucho tiempo en el envejecimiento somático.

La hipótesis de la que partían los científicos era que el ADN mitocondrial sufriría mutaciones con el tiempo, y eso haría que la producción de proteínas derivadas del ADN mitocondrial fuera menos eficiente y una vez que la célula perdiera su capacidad para generar energía de manera efectiva, envejecería más rápido”, comenta el Dr. Seli.

Aunque esta hipótesis es sólida y ha estado respaldada por modelos animales, generalmente no es una causa común de envejecimiento de las células somáticas en los seres humanos. 

 “Desde entonces, han surgido muchas otras teorías sobre cómo las mitocondrias pueden afectar a la salud celular y al envejecimiento.

Algunas sugieren que los problemas de fusión mitocondrial -entendiendo por fusión que las mitocondrias se encuentran entre sí o se fusionan- o los problemas derivados del estrés de las mitocondrias podrían acelerar el envejecimiento.

De hecho, se observó este escenario en ensayos animales, lo que provocó un envejecimiento ovárico acelerado y dañó la reserva”, explica el Dr. Seli.

Además, las mitocondrias se han utilizado como herramientas de diagnóstico midiendo el número de copias de ADN mitocondrial como un pronóstico de la salud y viabilidad del embrión. 

A día de hoy, no existe solución ante la aceleración del envejecimiento ligada a las mitocondrias, pero IVI lidera una línea de investigación que podría suponer una alternativa.

“De manera similar, se ha utilizado el reemplazo de mitocondrias, tomando mitocondrias autólogas de las células madre de la paciente y poniéndolas en la fuente con un fin potencialmente rejuvenecedor, aunque un estudio de IVI Valencia demostró que este enfoque aún no es concluyente”, concluye el Dr. Seli.

Reactivación ovárica: Una opción viable para revertir el envejecimiento ovárico

Uno de los temas que mayor interés han despertado recientemente en el ámbito reproductivo es el envejecimiento ovárico.

En España, aproximadamente 1 de cada 100 mujeres menores de 40 años padece fallo ovárico prematuro (POI, por sus siglas en inglés).

Esta situación les impide concebir un bebé con sus propios óvulos.

Sobre este tema, el profesor Antonio Pellicer, presidente y CEO de IVI, presentó un estudio sobre la reactivación ovárica.

“Durante los últimos años nuestro grupo de investigación se ha centrado en desarrollar nuevas alternativas para pacientes con reserva ovárica disminuida, cuya única opción era la donación de óvulos.

Nuestros estudios anteriores muestran que el trasplante autólogo de células madre ováricas había sido capaz de optimizar el crecimiento de los folículos existentes, permitiendo embarazos y nacimientos de bebés en pacientes bajas respondedoras y con muy mal pronóstico”, explica.

Como parte de la investigación, se desarrolló un estudio experimental para probar la capacidad de diferentes factores secretados de células madre para reactivar los ovarios.

 También probaron otros factores contenidos dentro de las plaquetas, que son la base del tratamiento PRP (Plasma Rico en Plaquetas) propuesto para las mujeres con insuficiencia ovárica.

En este estudio, argumentó Pellicer, observamos que diferentes fuentes de plasma o factores de células madre o plasma sanguíneo de cordón umbilical fueron capaces de inducir diferentes grados de vascularización local ovárica, proliferación celular, reduciendo la apoptosis y finalmente promoviendo el crecimiento folicular en ratones con los ovarios dañados.

En conclusión, «estos hallazgos sugieren que combinar los beneficios de los componentes no celulares de la técnica ASCOT con los factores de crecimiento contenidos en plaquetas puede mejorar y acelerar los efectos regenerativos en el ovario y ser un tratamiento eficaz para que las pacientes con escasa reserva ovárica utilicen sus propios ovocitos con alentadores resultados».

Con información de IVI