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Diseñar un Proyecto de vida personal o compartido con la pareja, es una tarea hermosa de toma de conciencia de nuestra propia vida y posibilidades

Por: María Mercedes Armas (psicóloga)

La licenciada María Mercedes Armas Barrios es psicóloga. Egresada de la Universidad Central de Venezuela. Es integrante del Observatorio Venezolano de los DDHH de las Mujeres y del Centro de Investigación Social Formación y Estudios de la Mujer.
@psico.mm.armas
[email protected]

“Cuando perseguimos un propósito, parece que un conocimiento claro y preciso del propósito sería lo primeramente necesario, en vez de lo último que hubiera de esperarse”.

John Stuart Mill.

En esta oportunidad trataremos otro de los aspectos fundamentales del proyecto de vida: el  propósito y algunos puntos relevantes en cuanto al proyecto de vida en pareja. Quise unir estos dos aspectos debido a la importancia y trascendencia humana que conlleva la realización del proyecto de vida en pareja.

El Propósito:

  • Es intangible, genuino y muy personal.
  • Nos mueve a la acción, impregna todas las categorías de nuestra vida y que nos hace tener un sentido de trascendencia.
  • Se traduce en la emoción que nos impulsa a ser consistentes en nuestro accionar y nos mantiene avanzando hacia las metas.
  • En el fondo, el Propósito responde al ¿Para qué?, al profundo significado que le damos a nuestros planes y acciones.
  • Actúa como hilo conductor que vincula todo nuestro Proyecto de vida.
  • Si bien los propósitos pueden cambiar, tienden a ser perdurables a lo largo de la vida y buscan resultados permanentes, tiene que ver con nuestros valores de vida.

Te dejo en esta reflexión personal acerca del Propósito que sustenta tu Proyecto de vida personal, mientras voy abordando algunos aspectos importantes a tomar en cuenta cuando se diseña un Proyecto de vida en pareja.

“El amor no consiste en dos personas que se miran una a la otra, sino en dos personas que miran juntas en la misma dirección”. Antoine de Saint-Exupéry.

Construir el  proyecto de vida en pareja:

  • Requiere de un espacio y tiempo de reflexión y discusión  sobre lo que desean lograr juntos.
  • Comienza por poner sobre la mesa el proyecto de vida de cada uno y establecer las áreas en las que tienen que llegar a acuerdos porque los implica a ambos, articulando las necesidades, metas y sueños individuales con las del plano de pareja.
  • Hay que incluir todos los aspectos importantes y básicos para, posteriormente, entrar en los detalles.

Soñar y planear juntos.

Para tener un proyecto de vida en pareja, la primera fase consiste en soñar, visualizar el futuro juntos, dejando que fluyan todos aquellos sueños y hermosos deseos que quieren compartir. Pero luego de volar con los sueños hay que ATERRIZAR para poder concretarlos. El pensar juntos, conversar y discutir sobre estos sueños y como pueden hacerlos reales en su vida, es la segunda fase indispensable para el logro de los mismos.

En este nivel  todos los temas son importantes, sin embargo hay dos grandes temas que resulta necesario abordar:

El dinero:

El aspecto financiero es muy importante tenerlo claro. El dinero tiende a ser uno de los temas más conflictivos en la pareja; desde quien lo gana hasta como se distribuye y utiliza. De allí la importancia de tener metas y prioridades claras en cuanto a las inversiones, metas de ahorro, gastos a cubrir y compras a realizar. Discutir cómo se manejarán las necesidades y gastos individuales con criterio de equidad.

Es recomendable que dialoguen acerca de cómo se manejaba el dinero en sus familias de origen para identificar aquellos patrones familiares y culturales que pueden afectar negativamente el manejo de las finanzas en pareja. Es importante estar conscientes de estás influencias, pero las parejas están en el derecho de definir cada área de su relación a su manera y crear su propio estilo; lo importante es que ambos se sientan cómodos y que sus proyectos de vida individuales estén incluidos.

Los roles:

Aunque ha habido cambios, aún los roles de pareja están bastante estereotipados, sobre todo lo referido a los roles de trabajo doméstico y de cuidados. El construir juntos su Proyecto de vida en pareja, pasa por conversar sobre esto y revisar los «sobreentendidos» en cuanto a lo que «le toca» hacer a cada uno.

Este es un tema conflictivo y frecuente de consulta por parte de las parejas que, si no se revisa, va generando incomodidad e incluso resentimientos en el tiempo, porque los trabajos domésticos y de cuidados son desgastantes y continuos, nunca terminan, exigen tiempo y esfuerzo adicional a lo que sería el empleo o actividad laboral de cada quien.  Considerar los trabajos domésticos y de cuidados como parte de su Proyecto de vida en pareja, les dará otra perspectiva de dichas tareas que son básicas para el buen funcionamiento de su sistema.

Sistematizar y dividir las tareas para hacerlas de manera compartida les permitirá:

  • Fluir mejor en la relación.
  • Ser equitativos en las cargas y responsabilidades.
  • Estar más descansados y dispuestos para su pareja.
  • Tener más tiempo libre para compartir juntos.
  • Sentirse apreciados por su pareja.
  • Valorar más el aporte de cada uno.
  • Brindar un modelo positivo a sus hijos.

Como hemos visto, diseñar un Proyecto de vida personal o compartido con la pareja, es una tarea hermosa de toma de conciencia de nuestra propia vida y posibilidades. En la próxima publicación trataremos otros puntos importantes para la pareja y analizaremos el peso que tienen nuestras debilidades y fortalezas en el proceso de lograr lo que queremos en nuestras vidas.

Por: María Mercedes Armas (psicóloga)