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La Academia Nacional de Medicina (ANM), ante la llegada de las primeras 100,000 dosis de la vacuna rusa a Venezuela, se pronunció porque el país acceda a  un abanico de diferentes vacunas “seguras y efectivas”, en el contexto de un Plan Nacional de Vacunación contra la covid-19 “basado en principios de equidad y evidencia científica”.

Por otra parte, debido a la circulación en la región de variantes más infecciosas del covid-19, pidió extremar la vigilancia, en particular en relación con los virus circulantes en estados fronterizos y en los viajeros provenientes del exterior.

La posición de la ANM está contenida en dos comunicados, suscritos por el Dr. Enrique López-Loyo, presidente de la ANM, el Dr. Huníades Urbina-Medina, secretario académico de la ANM y por la Dra. Mireya Goldwasser, presidenta de la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales (Acifman).

Consideraciones ante la vacuna rusa

Con respecto al anuncio de la llegada a Venezuela de 100.000 dosis de la vacuna Sputnik V (Gam-COVID-Vac) producida por el Instituto Gamaleya de Moscú, Rusia, la ANM ofreció varias consideraciones de orden científico:

“Dicha vacuna está basada en una tecnología bien conocida basada en vectores de adenovirus y muy próximamente comenzará su aplicación en nuestro país, aunque desafortunadamente no se han dado a conocen los detalles.

Esta vacuna todavía se encuentra en fase III de experimentación y un análisis interino fue publicado el pasado 2 de febrero en la prestigiosa revista médica The Lancet.

El análisis publicado se basó en el seguimiento de 21.977 voluntarios en una prueba que se realizó en Rusia entre septiembre y noviembre del 2020.

Los resultados indicaron que la vacuna tiene una eficacia del 91,6% con muy pocos efectos adversos, entre ellos locales como dolor en el sitio de inyección y generales como cefalea, síntomas de resfriado y cansancio.

Limitaciones en la información

Aunque los resultados preliminares publicados son alentadores, existen ciertas limitaciones en la información:

(1) El seguimiento de los voluntarios fue muy corto, solo 80 días después de la administración de la primera dosis.

(2) El número de voluntarios mayores de 60 años no especifica el rango de edades

(3) Aunque la vacuna ha sido autorizada en varios países, todavía no ha recibido la autorización de la Agencia Europea de Medicamentos. Sin embargo, ya se han administrado cerca de medio millón de dosis de la vacuna Sputnik V en Argentina, sin que se hayan reportado efectos adversos de importancia”.

Ensayo clínico en Venezuela

La ANM recordó que en Venezuela la vacuna se está evaluando en un ensayo clínico doble ciego (Protocolo clínico NCT04642339) que se inició en diciembre del 2020.

A la fecha se ha administrado la primera dosis a 200 voluntarios y la segunda a 155 y los efectos adversos observados han sido similares a los reportados en otros estudios con la misma vacuna.

“Venezuela debe acceder a un abanico de diferentes vacunas seguras y efectivas que se distribuyan en la población siguiendo los lineamientos de un Plan Nacional basado en principios de equidad y evidencia científica”.

La ANM recordó que  “Venezuela necesita 30 millones de dosis de vacunas para vacunar a 15 millones de venezolanos, 3,5 millones de ellos de manera prioritaria”.

Alerta con las variantes

Con relación a las mutaciones del covid-19, en comunicado se recuerda que “a la par del rápido y exitoso desarrollo de vacunas efectivas contra la covid-19, el coronavirus causante de esta enfermedad ha ido acumulado mutaciones, algunas de ellas con impacto en la Salud Pública”.

La ANM recuerda que son “de particular relevancia en este momento  las variantes que han generado brotes importantes en el Reino Unido (B.1.1.7), Sudáfrica (B.1.351) y Brasil (P.1), las cuales agrupan a virus que poseen varias mutaciones en su genoma, siendo las más relevantes dos mutaciones en la proteína S de la espiga: la mutación N501Y, presente en las tres variantes virales y la E484K, presente en las dos últimas”.

La evidencia, describe la ANM con el concurso de expertos en el tema, apunta a que la variante B.1.1.7 del Reino Unido presenta una mayor capacidad de transmisión y quizás también una mayor tasa de letalidad, aunque afortunadamente las vacunas actuales protegen contra la misma.

La situación, señalan, puede ser diferente con las variedades de Sudáfrica y Brasil, que contienen la mutación E484K, que escapan de la protección provista por infecciones previas o por la vacunación.

Otra variante, recuerdan, surgió en California, EEUU: los virus de este grupo presentan la mutación L452R en la proteína de la espiga. La aparición de esta variante coincidió con un incremento en el número de casos en la región.

“Aunque es probable que las vacunas actuales puedan prevenir los casos graves y muertes ocasionadas por las variantes antes mencionadas, ya se está trabajando en el diseño de refuerzos vacunales que induzcan anticuerpos neutralizantes e inmunidad celular contra las nuevas variantes”.

Vigilancia genómica

La Academia recuerda que debido a la emergencia a causa de estas variantes virales, la OMS recomienda la vigilancia genómica de estas variantes en cada país.

“En Venezuela, esta vigilancia debe enfocarse en particular en los virus circulantes en estados fronterizos, y a los viajeros provenientes del exterior”.

Ante su eventual introducción al país, se insiste en la necesidad de “acelerar los programas de vacunación, ya que, si bien se ha visto una reducción en la eficacia de las vacunas frente a estas variantes, la vacunación parece seguir protegiendo contra la manifestación grave de la enfermedad”.

Por otra parte, exhortan, la recomendación para toda la población es redoblar las medidas de prevención, ante la existencia de virus con mayor capacidad de transmisión.

La Academia Nacional de Medicina y la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales ofrecen al país y a las autoridades “su experiencia y conocimientos para colaborar en las estrategias necesarias para el control de esta epidemia en el país”.

La ANM, de igual modo, reitera que “ ofrece su experiencia y conocimientos en lo que debe ser un gran esfuerzo nacional para vacunar contra la covid-19”.