Violeta Villar Liste
La COVID-19, por ser una enfermedad sistémica, afecta a múltiples órganos y, de hecho, cuatro de 10 infectados en Panamá, sin importar si la enfermedad fue leve o grave, están presentando complicaciones a largo plazo, alertó el Dr. Arturo Rebollón, quien reitera la importancia de la vacunación por su comprobada capacidad de evitar hospitalización y muerte.
Médico-epidemiológico e investigador de Salud Pública, el Dr. Rebollón ha sido uno de los especialistas más activos en esta tarea de hablar con la verdad científica, aliado con el Movimiento Todo Panamá, iniciativa ciudadana, cívica y gremial que emprende acciones para el control de la pandemia, con monitoreo y ayuda social.
Al respecto, en esta visión compartida de derribar mitos y acercar la verdad, el Dr. Rebollón mantuvo un conversatorio con los colaboradores de las distintas unidades del grupo empresarial VerdeAzul, por iniciativa de la Fundación VerdeAzul, brazo de responsabilidad social de la organización.
Su intervención, a partir de las interrogantes de los participantes, dio como resultado respuestas claras, basadas en la evidencia científica y que se comparten por su valor para la ciudadanía.
Hasta la tarde del lunes 2 de agosto, el Programa Ampliado de Inmunización del Ministerio de Salud (Minsa) había informado la aplicación de 2,803,185 dosis de la vacuna contra la COVID-19, demostración del interés de la población panameña en vacunarse.
Sin embargo, este entusiasmo no evita que las cadenas de informaciones falsas y erróneas se multipliquen, generando confusión en la población.
Tecnología, colaboración y recursos
El Dr. Rebollón comenzó por aclarar una duda recurrente en la discusión acerca de las vacunas contra la COVID-19: ¿Cómo fue posible lograr su desarrollo tan rápido?
Razones fundamentales: tecnología (el poder computacional que tenemos ahora, es solo una muestra de la rapidez con la cual podemos procesar la información), la colaboración internacional entre los científicos y el aporte de dinero para investigación.
Por otra parte, enfatizó, los expertos a nivel mundial se reunieron para eliminar los procesos redundantes y la burocracia.
“Cuando haces investigación y vacunas, hay otro elemento crucial: los voluntarios, porque los estudios se realizan en personas sanas, no en enfermos”.
Señaló que un proceso de reclutamiento de voluntarios, de manera usual puede durar de tres a cinco años. En este caso, contó con una respuesta inmediata de los voluntarios.
Incluso Panamá logró reclutar 3,500 voluntarios, en un tiempo récord de 42 días, para la investigación de la vacuna alemana de Curevac contra la COVID-19, a cargo del Consorcio de Investigaciones de Vacunas COVID-19, conformado por el Centro de investigación de Vacunas CEVAXIN y el Instituto de Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología (Indicasat-AIP), bajo el paraguas de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt).
Dudas y respuestas
-¿Cuál es la mejor vacuna?
-La mejor vacuna es la que se ponga; aquella a la cual tenga acceso. En Panamá tenemos las vacunas que han demostrado los mejores perfiles de seguridad; las más aprobadas en el mundo por organismos regulatorios como la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) y la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).
-¿Puedo vacunarme si estoy enfermo?
-La respuesta siempre es sí. La vacuna ha demostrado ser segura y efectiva, y a quienes tienen enfermedades crónicas les va mucho mejor con la vacuna porque con el virus les va peor.
-¿La vacuna quita el deseo sexual y provoca disfunción eréctil?
-Falso. La vacuna protege; lo que afecta es la enfermedad por el efecto de la COVID-19 en la inflamación de los vasos sanguíneos que genera esa disfunción sexual.
-¿Cuánto tiempo de efectividad tienen las vacunas?
-La vacunación oficialmente arrancó en el mundo en septiembre de 2020, en Israel, país que ha estado colaborando y publicando datos de efectividad de las vacunas de manera abierta. En el último registro mostraban que la vacuna que habían aplicado era altamente eficiente, eficaz y segura y se mantenía por encima de los estándares.
La eficacia de las vacunas se compara con una luz: está prendida o apagada, es decir, la tienes o no la tienes. Todas las vacunas aprobadas han mostrado tener buena efectividad.
-¿Existen efectos secundarios con la menstruación?
-No se ha visto relación directa entre vacunación y alteración menstrual. Está en estudio. Ocurre que la presión emocional, de grupo y de familia, sea porque te vacunaste o no, puede causar alteraciones por la ansiedad.
-¿Si una persona tiene un cuadro familiar de trombosis es peligroso ponerse la vacuna?
-No es peligroso ponerse la vacuna. El alto riesgo lo tiene si le da COVID-19. La vacuna protege y evita complicación. El riesgo de trombosis es de uno en un millón de casos. En una población como la de Panamá (de cuatro millones de habitantes), solo cuatro personas tendrían ese riesgo.
-¿Si me puse la vacuna de Johnson & Johnson debo colocarme la de Pfizer?
–Panamá no tiene la vacuna de Johnson & Johnson aprobada. Hasta que no se apruebe no va a existir la autorización de un refuerzo de Pfizer desde el punto de vista de recomendación médica. Otros países que tienen aceleración de casos, presencia de la variante delta y liberación de medidas de control (lavado de manos, distanciamiento y uso de mascarilla), pueden hacer la recomendación.
-¿De qué manera afecta la vacuna el sistema digestivo de la persona con colón irritable o diverticulitis?
-La COVID-19 tiene síntomas gastrointestinales: una de cada diez personas presenta diarreas, vómitos, cólicos… si tienes ya esta condición, eres una persona que se puede descontrolar con la enfermedad. La vacuna te protege contra esas manifestaciones.
-¿Cómo se crea la inmunidad de rebaño?
-El virus completo equivale a un edificio. La vacuna tiene un ladrillo de ese edificio y cuando la recibes, le enseña al cuerpo a protegerse. La respuesta de memoria y de lifoncitos (lo que se mide cuando nos toman la muestra de sangre) se dispara de una manera importante y te protege.
La inmunidad de rebaño, dependiendo de la variante, es un número dinámico. Al inicio de la pandemia, con la variante que teníamos circulando, se calculaba que con el 70% de la población vacunada se alcanzaba la inmunidad de rebaño.
En Los países que tienen la variante delta en su población, que no es el caso de Panamá, la inmunidad colectiva se calcula ahora entre el 85% y 90% de la población inmunizada y allí debamos estar claros: cuanto más infeccioso es el tipo de virus que tenemos, más alto es el número de población que debemos vacunar.
La clave es que la vacuna protege. Estudios de medición genética demuestran que las personas que en su gran mayoría tienen infección grave con delta son los no vacunados.
En Panamá, hasta el domingo 1° de agosto, de acuerdo con el Dr. Juan Pascale, director del Instituto Gorgas, la variante delta no se había detectado a nivel comunitario. Se ha localizado en la frontera con Colombia y en pasajeros, quienes se han aislado, impidiendo su circulación.
-¿Complicaciones en la mujer embarazada?
-La vacuna no tiene virus; no pasa a la placenta del bebé. Grupos científicos y académicos, tanto de Estados Unidos como de Europa y Panamá la recomiendan porque no tiene efectos en el bebé. Algunos ginecólogos recomiendan aplicarla en el último trimestre porque ya el cuerpo del niño está formado, pero no causa malformación en el bebé; tampoco acelera el parto ni causa pérdidas.
-¿Si una persona vacunada se contagia de COVID-19 disminuye el poder de contagiar a otras personas?
-Por cada 100 mil vacunados tenemos 100 que se pueden infectar. Mil veces menos infecciosos si recibiste la vacuna y, al ser menos infeccioso, desarrollas menor carga viral (cantidad de virus que tienes para contagiar). Por supuesto, con menos carga viral, aun cuando la persona se infecte, que es muy raro, contagias menos a las personas. Más del 90% de los hospitalizados y muertes ocurre en no vacunados.
-¿Cada cuánto tiempo será necesario vacunarse?
-Hasta ahora se recomiendan las dos dosis. Todavía no se sabe si se requerirá un refuerzo anual como la influenza. Está en estudio.
-¿Si no me coloco la segunda dosis a las cuatro semanas debo iniciar el cuadro de vacunación con dos dosis más?
-La clave es tener las dos dosis separadas: el tiempo mínimo es cuatro semanas. Los estudios han demostrado que la separación entre las dos dosis puede ser de 4 a 12 semanas y le va bien a la persona.
-¿Los que se han vacunado con Pfizer necesitarán tercera dosis?
-La tercera dosis se está recomendando en países con más disponibilidad de vacunas, que están pasando por la aceleración de casos debido a la variante delta. Por ejemplo, Israel, en su segunda ola, tenía 10 mil casos diarios. Ahora, registran entre 600 y 1,000 casos diarios, es decir, diez veces menos, gracias a las vacunas. En hospitalización, prácticamente el ingreso es cero.
Al analizar, investigaron que en esta etapa solo se hospitalizan adultos mayores con enfermedades crónicas descontroladas, leucemia, VIH o personas trasplantadas. Solamente a este tipo de paciente están recomendando la tercera dosis.
-¿La COVID-19 se contagia y expresa sus síntomas en los primeros quince días?
-Es correcto. El periodo de infección del virus ocurre entre 0 y 14 días.
-¿Las personas que ya tuvieron COVID-19 necesitan dos dosis?
-Solo necesitan una dosis porque la infección equivale a la primera vacuna. ¿Qué pasa si se le coloca completo el esquema a la persona, es decir, dos dosis más infección? Aumenta la inmunidad con la primera dosis, pero entre la primera y segunda dosis no hay diferencias. Eso quiere decir que si le aplicas las dos dosis le quitas la dosis a una persona que la necesita. Hay que ser lo más estratégico posible.
-¿Cuánto tiempo dura la inmunidad natural si te da la infección?
-La persona puede tener de tres a nueve meses de inmunidad natural, pero no es igual de fuerte que la vacuna. La vacuna está diseñada para generar la mayor cantidad de respuesta inmunológica con el menor número de síntomas.
-¿Cuánto tiempo debo esperar para hacerme la prueba si entré en contacto con una persona positiva?
-De manera automática la persona se considera un contacto. Se debe aislar de manera preventiva de 10 a 14 días y hacer la prueba cinco días después del contacto.
-¿Cuáles complicaciones puede tener una persona si se vacuna con resfriado?
-La vacuna no será igual de fuerte porque no estará enfocada en construir defensas, sino en destruir enemigos. Puede generar menos inmunidad.
-Si a alguien le da COVID-19, ¿cuándo puede vacunarse?
-Inmunológicamente, cuatro semanas después de sufrir la enfermedad.
-¿Cuál es la diferencia entre Pfizer y Astrazeneca?
-No importa la marca: todas han demostrado ser efectivas y seguras, protegen contra enfermedad grave y severa.
-¿Niños y adultos con enfermedad crónica se pueden vacunar?
-En Panamá, las personas mayores de doce años, con enfermedades crónicas, se pueden vacunar y los adultos todos, sin problemas, no hay restricción; solo depende de la disponibilidad.
-¿Qué pasa si una persona demora más de un mes con el virus activo?
-El coronavirus tiene una manifestación crónica: se le denomina COVID-19 largo. Se expresa como a la persona que le da dengue o Influenza, que se cura, no tiene fiebre, pero persiste, luego de un mes, el cansancio, la debilidad y la dificultad para respirar. La COVID-19, por ser una enfermedad sistémica, afecta múltiples órganos y, de hecho, cuatro de 10 infectados, sin importar si fue leve o grave, están presentando complicaciones a largo plazo.
De hecho, ya Panamá tiene 15 clínicas poscovid, con terapias respiratorias, física y acceso a medicamentos crónicos. Los cupos están llenos, justo porque el virus tiene complicaciones.
El Dr. Rebollón detalló que mientras una vacuna le cuesta al Estado panameño entre 7 a 10 dólares por persona, una hospitalización en sala, sencilla, de uno a 10 días, significa un gasto de entre $10,000 a $30,000 y una intervención en UCI, entre $70,000 y $300,000.
“La economía y la salud no están separados. Es lo mismo, solo que desde dos perspectivas”, advirtió y exhortó a la prevención por la salud y el impacto económico.
-¿Pruebas de sangre para saber si me dio COVID-19?
-No gasten plata en esa prueba porque solo mide un tipo de inmunidad.
-¿Qué decirle a las personas que tienen miedo de vacunarse por los efectos adversos?
-Los eventos adversos son muy extraños. En Panamá, con 1.6 millones de dosis aplicadas, se reportaron 600 eventos adversos, es decir, .04%, de los cuales el 90% fueron eventos leves: Fiebre, malestar general, dolor en el sitio de la inyección, es decir, manejables.
Es muy seguro vacunarse y los eventos graves son raros a nivel mundial.
Ese .04% se debe comparar con el porcentaje de los eventos crónicos que sufre quien enferma de COVID-19.
Por ejemplo, 3 de cada 10 personas a quienes les da COVID-19 quedan con alteraciones cardiovasculares, quiere decir, 100,000 enfermos cardiovasculares que se agregan al sistema de salud.
Incluso, las personas hospitalizadas por COVID-19 registran tiempos más largos de ingreso en comparación con otras enfermedades. Pueden perder masa muscular y por tanto, movilidad.
-¿Qué ocurre en el caso de las personas con alergias?
-Se pueden vacunar. Solo deben informar si han tenido casos de choques anafilácticos (reacción severa que cierra las vías respiratorias y puede comprometer la vida) para que la enfermera esté prevenida y tratarlo si fuera necesario.
-¿Qué debe hacer la persona que se vacunó en el extranjero?
-Ir a la página de panamadigital.gob.pa y registrar su información.
Con respecto a la reiterada consulta, ¿puedo tomar alcohol si me vacuné?, explicó que se recomienda no hacerlo porque si usted se vacunó y ese día tomó en exceso, ¿cómo diferenciar los síntomas de la popular «goma» de una reacción a la vacuna? Mejor celebre de otra manera.