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Cortesía: Plataforma STAND UP contra el acoso callejero

Por: Delsis Gudiño

Delsis Gudiño es consultora y asesora independiente de comunicación para empresas

A lo largo de las generaciones el acoso callejero fue normalizado e incluso entendido como una situación ajena a la violencia sexual.

Sin embargo, una encuesta realizada por IPSO, junto a L’Oreal París, en el año 2019, reveló que el 80% de las mujeres ha experimentado acoso sexual en espacios públicos y un 25% comentó haber recibido ayuda por parte de un extraño. 

El impacto de las cifras motivó a  L’Oreal París a unir esfuerzos, junto a las oenegés Right To Be y la Fundación Ayuda en Acción, para trabajar en la campaña Stand UP Contra el Acoso Callejero que permitió capacitar a 1.5 millones de personas en el mundo con la metodología de las 5D’s.

La misión de esta metodología es orientar a la ciudadanía a prevenir situaciones de acoso y actuar de manera segura, creando un diálogo que ayude como sociedad a identificarlo y al mismo tiempo empezar a corregir esta situación que atenta contra el empoderamiento y la autoestima de mujeres, niñas y adolescentes en el mundo.

La violencia detrás de un piropo

Haydeé Méndez Illueca, vicepresidenta de la Fundación para la Equidad de Género (Fundagénero) y abogada en Panamá, explicó que el acoso callejero “es un fenómeno social recurrente y debemos comprender que esto es violencia.

Los piropos sí son acoso, son conductas que se aprenden  y detrás de estas acciones persiste  una cultura de abuso y poder: los hombres culturalmente son asumidos como sujetos y las mujeres como objetos”.

El acoso callejero constituye una violación a los derechos humanos de la mujer al coartar su libertad de movilidad.

Las personas que sufren de acoso callejero hacen cambios radicales en sus rutinas y en su forma de vestir por la sensación de inseguridad e impotencia. El acoso callejero viene de hombres desconocidos en nuestras calles, y este tiene una carga intimidatoria muy fuerte contra la mujer.

Méndez Illueca reflexionó que las sanciones en Panamá pueden percibirse difusas en materia de acoso callejero, pero pueden colocarse sanciones dependiendo de los casos.

“Si una mujer,por ejemplo, pasa por un sector de manera recurrente y todos los días es sometida a algún tipo de acoso, sea verbal o insinuaciones sexuales, puede asistir ante un juez de paz y exponer su caso.

En el caso de ser menores de edad debemos capacitar a las niñas para que denuncien. Si existe roce o tocamiento este es un delito de acuerdo a nuestro código penal y se convierte en una sanción por actos libidinosos: puede acarrear una sanción de 3 a 6 años”.

Por un camino seguro

Marisol Guizado, CEO de la Plataforma Panamá en Positivo, señala que “necesitamos promover la equidad, pero debe haber un balance”.

Es importante incluir a las partes en el proceso de cambio para que este sea real y llevar un mensaje cónsono: no podemos estigmatizar, ni excluir a nadie para lograr un verdaderos cambio.

Reflexionó que “la seguridad, la valentía, herramientas y caminos seguros para sentirnos bien” son fundamentales en esos momentos cuando “la vida nos quiebra como mujeres, la sociedad pone parámetros sobre nosotras como mamás, empresarias… todo lo que la sociedad nos rige y la única forma de romper es educando”.

A propósito de la campaña Stand UP Contra el Acoso Callejero y la metodología de las 5 D’s, dijo que es preciso “hacernos eco de lo bueno; esta campaña es diferente y muestra que al hacer cambios pequeños podemos modificar situaciones que afectan a otras personas, sin utilizar la violencia”.

El silencio es un obstáculo

Gabriela Camacho, fundadora de It’s Ok, grupo de apoyo para víctimas de violencia sexual en Guatemala, afirmó que “el silencio es el obstáculo más grande al que se enfrentan las personas afectadas por algún tipo de violencia sexual. Si aceptamos algo pequeño, permitimos que algo más grande pueda pasar”.

Aseguró que hemos aprendido a vivir con la violencia detrás de las puertas y a vivir bajo las reglas de alguien más. Hay muchos hombres buenos pero existe un patriarcado que no se atreve a mirarse en el espejo, para no enfrentar la vergüenza.  

La revelación, el proceso de denuncia y reacción de los interlocutores, en ocasiones termina anulando a las víctimas, que son además expuestas a la vergüenza y al juzgamiento social, un factor determinante para avanzar”.

“El señalamiento social puede aniquilar a las personas que pasan por una situación de violencia sexual y normalizan el silencio para evitar enfrentarlo. El silencio no solo duele, nos mata” concluyó Camacho.

Michelle Kayall, brand manager de L’Oreal París para la región, añadió  “que Standup UP reafirma el compromiso de L’Oreal París con todo el empoderamiento femenino, con la sociedad y el bienestar de niñas, mujeres y hombres”.

Una capacitación al alcance de la mano

Para realizar la capacitación en la metodología de las 5Ds, sólo debe ingresar a través del portal http://www.standup-centroamerica.com/

 La formación es completamente gratis y dotará de herramientas prácticas a cada participante.

Usted puede compartir su experiencia luego de tomar la capacitación y subir en redes sociales una foto con el  dibujo de la letra D, en la palma de su mano, utilizando  los  hashtag#WeStandUp #DFrenteAlAcosoCallejero.