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Este grupo de apoyo de duelo mixto ya reúne a 85 personas: entre ellos, padres y madres que perdieron a sus hijos, y encuentran alivio al compartir sus experiencias, iniciando su proceso de sanación

Por: Violeta Villar Liste

En la cercanía del Día de la Madre, estos testimonios nos invitan a mostrar empatía hacia aquellos que han perdido a sus hijos, brindándoles un espacio para ser escuchados o recibir una palabra de aliento.

Cuando Jasury Jiménez perdió a su hijo de 14 años hace tres años, la desesperanza era más grande que sus ganas de vivir. Pero sabía que debía seguir adelante.

Comienza a investigar. Conoce a especialistas en Psiquiatría, Psicología y Tanatalogía. Reconoce que el dolor nunca pasará y sin embargo, “aprendí a vivir en gratitud”.

En esa búsqueda personal crea el grupo Vivir por dos PTY que reúne a padres y madres en duelo por la muerte de un hijo, quienes se conectan a través de Zoom, brindándoles un espacio seguro y confidencial donde pueden compartir y reflexionar sobre sus experiencias de pérdida, con el apoyo de especialistas que los guían a reconocer sus estrategias de afrontamiento y recursos internos para enfrentar la situación de pérdida.

A un año de Vivir por dos PTY

El 23 de diciembre de 2023 se creó este grupo de ayuda mutua en duelo.

Lo inició Jasury Jiménez, licenciada en Administración y Negocios Internacionales, junto a Lizza Pinilla y Maury de Gracia, las dos psicólogas.

A la fecha, en el chat del grupo ya son 85 personas, quienes escogieron el martes como el día de la reunión virtual. Sin embargo, al ser un grupo de duelo mixto abierto, la participación es libre, y cada persona puede unirse cuando lo desee y esté en condiciones de hacerlo.

Maury de Gracia

Maury De Gracia explica que el grupo de apoyo tiene muchos beneficios para quien está en duelo.

Cuando alguien se une a un grupo de apoyo, busca un acompañamiento mutuo. Es un lugar seguro donde puedo expresar mi dolor sin ser juzgado, porque vivimos en una cultura donde te dicen que tienes que ser fuerte o aceptar la muerte”, reflexiona.

“Allá afuera escuchamos que mi hijo se graduó o cumplió años. Son los temas permitidos. Nadie habla de la muerte. En  el grupo de apoyo puedes expresar tus emociones, pensamientos o experiencias desde el respeto y sin compararte. El dolor nunca se va a ir, pero siempre se va a transformar y podemos volver a sonreír y ser felices”.

Que nadie sea juzgado

Como grupo, realizan talleres y proporcionan herramientas adecuadas para brindar apoyo a quienes, legítimamente, no se sienten bien

El hijo de Jasury Jiménez tomó la decisión de no estar más.

Sobre la pérdida de su hijo, analiza “que los padres somos muy juzgados, en particular en América Latina, porque en Europa, donde estuve durante gran parte de mi proceso de duelo, son más conscientes de que el suicidio puede ocurrir por una emoción espontánea o debido a una enfermedad que no sabíamos que tenía o puede que si lo sabíamos, no así su gravedad”.

Expresa que cada persona vive su duelo de manera distinta. En caso de enfermedad, los padres son cuidadores primarios y el agotamiento es muy grande. “Viven un duelo adelantado”.

Maury de Gracia señala que este duelo anticipado “es distinto al que la persona va a vivir cuando un ser querido muere. Primero tiene lugar la negación; sigue la expresión emocional, luego la negociación, depresión (emociones muy intensas) y, finalmente, la aceptación”.

Resalta que las pérdidas gestacionales y por aborto se conocen como duelos desautorizados, porque no existe interacción ni recuerdos compartidos con sus hijos en el ámbito familiar y social, no se habla de ellos, y muchas madres sienten que no tienen permiso para expresar el dolor por la pérdida de sus hijos.

“Lo que hace la diferencia en los procesos de duelo es buscar ayuda y apoyarse”.

La fundadora del grupo Vivir por dos PTY afirma que los mitos no ayudan en el proceso de sanación. Frases como “no llores porque no lo dejas descansar”, no corresponden con un apoyo empático a quien sufre.

Como grupo, realizan talleres y proporcionan herramientas adecuadas para brindar apoyo a quienes, legítimamente, no se sienten bien.

“A través de mi dolor, puedo ofrecer mi experiencia para acompañar a otros en su propio proceso de búsqueda y sanación”, dice Jasury Jiménez.

Un título vitalicio

Ante fechas como el Día de la Madre, invitan a las madres del grupo a organizar aquello que su cuerpo, corazón, estado de ánimo y condición física le permita.

En su caso, Jasury Jiménez afirma que “el título de mamá es vitalicio” y sentir que las personas se lo recuerdan, la hace sentir bien y agradecida con la vida.

¿Qué palabras decir y cómo vivir este Día de la Madre con hijos fallecidos? De Gracia afirma que los tiempos de evolución del duelo son distintos.

Hay madres que en el primer año de ausencia de sus hijos pueden sentir que todavía es prematuro pensar en la fecha y otras que ya están preparadas.

Del lado de quien acompaña y da apoyo a personas que ya están preparadas para recordar el Día de la Madre sin sus hijos, la psicóloga sugiere utilizar frases empáticas: “Quiero que sepas que estoy orgullosa de la mamá que fuiste y serás siempre”.

Palabras que, en esta fecha especial, están llamadas a sanar, acompañar y demostrar cuán humanos nos hace escuchar a quien vive por dos.

Por: Violeta Villar Liste | [email protected]