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La decisión de Panamá de retomar las clases presenciales en 2022 se tropieza con la realidad de 4,000 docentes que se niegan a vacunarse contra la covid-19, de acuerdo con los datos compartidos a los medios por la ministra de Educación, Maruja Gorday de Villalobos.

Esta situación se presenta de manera particular en las comarcas y asociada a razones de tipo cultural. 

Al respecto, el Dr. Eduardo Ortega-Barría, secretario nacional de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), reflexionó que nosotros, los adultos, debemos proteger a los niños a través de nuestra vacunación porque es la manera de interrumpir la transmisión comunitaria. 

En el caso de los maestros y profesores es todavía más crítico porque ellos estarán en un ambiente donde habrá niños y la mayoría no se ha vacunado, en particular los niños de 5 a 11 años, a quienes esperamos poder vacunar el próximo trimestre”.

Dijo que además de los docentes,” debe estar vacunado el personal administrativo, quienes limpian,  dan alimentos o transportan… es la única manera de protegerlos”.

Es cierto, reflexionó el Dr. Ortega-Barría, que los niños tienen consecuencias menos severas o menos mortalidad en comparación con los adolescentes o adultos, “pero no queremos que muera un solo niño en este país”.

Lo que hemos visto en el Hospital del Niño, afirmó, es que la letalidad no es baja: Invitamos a los maestros, en solidaridad con los niños, a quienes debemos proteger, a vacunarse, es la única manera de protegernos además del uso de la mascarilla y el distanciamiento social”.

Vacunación obligatoria

-¿Podría el Estado panameño contemplar la vacunación obligatoria?

-Personalmente, creo que todos los trabajadores de la salud, y quienes laboramos en instituciones públicas desde las cuales ofrecemos un servicio a la sociedad, así como maestros y profesores, se deberían vacunar de manera obligatoria, de lo contrario somos un riesgo para las personas a quienes en teoría les estamos ofreciendo un servicio

“Es una discusión que deberíamos tener. Prefería que fuera voluntario, a través de la educación y entender que esto no ha terminado: es un virus con cambios, en la medida que las personas no se vacunen, y lo vimos de manera reciente en Sudáfrica.

Ómicron, llegará al país, no nos vamos a escapar, y aun cuando parece menos agresivo, se transmite de manera más eficiente y  hay una relación directa entre transmisión, hospitalización y mortalidad porque el sistema de salud se colapsa.

Ligero repunte de casos

-¿Cómo interpretamos los datos de la última actualización epidemiológica?

-Hay un repunte discreto de casos,  incremento del RT y de la positividad. Por fortuna, el 90% de la población vacunable ha recibido una dosis y el 80% dos dosis y esto se refleja en menos personas en terapia intensiva, menos fallecimientos y menos casos severos, pero en la medida que tengamos un virus más transmisible podemos regresar a una situación, en el futuro, de tener una cuarta ola.

Analizó que la estrategia contra la covid-19 amerita una reacción tipo jugada de ajedrez: anticiparse al contrario para vencer.

Reconoce que se facilitó la interacción social para reactivar la economía, sin embargo, la ciudadanía se ha descuidado.

“Hemos sido complacientes, pensamos que hemos controlado la pandemia, es cierto, pero es temporal”, subrayó.

Se inclina por intensificar los mensajes y llegar a la población con información más sencilla y directa.

Exhorta a mantener la colaboración público-privada y a la sociedad panameña le pide asumir su rol: “Sabemos qué debemos hacer: cubrebocas, vacunación, ventilación y distanciamiento social”.

El Dr. Ortega Barría ofreció estas declaraciones en la ceremonia previa a la entrega del Premio Nacional L’Oréal-Unesco Por las Mujeres en la Ciencia 2021, ganado por la Dra. Dafni Mora Guerra, investigadora de la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP):Dra. Dafni Mora recibe Premio Nacional L’Oréal-Unesco 2021

De igual modo, se reconoció la labor de la Dra. Mairim A. Solís Tejada, del Instituto Gorgas, quien ganó la edición de 2020, y de la Dra. Giselle Rangel, del Instituto de Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología (Indicasat AIP) por un proyecto en el ámbito de las Neurociencias.

Dijo el Dr. Ortega Barría: “Es un triple reconocimiento al papel de las mujeres en la ciencia y esto es crítico para nosotros. Sabemos que a nivel universitario más mujeres entran en la universidad, pero a los puestos de toma de decisiones, menos mujeres llegan. Debemos allanar ese camino”.