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Se consideran pacientes de riesgo a aquellos que tienen mayor probabilidad de sufrir complicaciones graves o incluso la muerte por una enfermedad infecciosa, en caso de no ser vacunados

Por: Dra. Karen Courville, FACP, SNI | Miembro de CENCAM y ISNi3C

La Dra. Karen Courville es egresada de la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá. Realizó estudios en Medicina Interna y Nefrología en el Complejo Hospitalario Dr. Arnulfo A. Madrid.  Tiene un Fellow en Investigación Renal del Instituto Mario Negri en Bérgamo, Italia.  Investigadora del Instituto de Ciencias Médicas de Las TablasMiembro del Sistema Nacional de Investigación (SNI)

Ciertas afecciones médicas predisponen a algunas personas a tener mayor riesgo de sufrir enfermedades graves.  Hay algunas enfermedades que podemos prevenir con vacunas, ya que, contra algunos virus y bacterias, se han podido aislar y desarrollar este método de prevención o de minimización de la enfermedad.

Se consideran pacientes de riesgo a aquellos que tienen mayor probabilidad de sufrir complicaciones graves o incluso la muerte por una enfermedad infecciosa, en caso de no ser vacunados. Estos pacientes se han definido debido a la observación durante muchos años, previo a la disponibilidad de vacunas, de cuáles eran los más afectados y luego de la vacunación, cómo cambió el curso de la enfermedad en estos grupos.

En estos grupos de alto riesgo se encuentran pacientes con enfermedades crónicas como las siguientes: enfermedades cardíacas (cardiopatía coronaria, insuficiencia cardíaca, valvulopatías cardíacas); enfermedades pulmonares (enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), asma grave, fibrosis quística); enfermedades renales  (enfermedad renal crónica, síndrome nefrótico, trasplante renal); enfermedades autoinmunes (artritis reumatoide, lupus eritematoso sistémico, enfermedad de Crohn, enfermedad celíaca); inmunodeficiencias (inmunodeficiencia primaria, VIH/SIDA, cáncer, trasplantes de órganos); diabetes mellitus (diabetes tipo 1 y tipo 2, especialmente con complicaciones).

Además, existen otros grupos por condiciones no modificables, como las personas mayores (el riesgo de complicaciones graves por enfermedades infecciosas aumenta con la edad, especialmente a partir de los 65 años); las embarazadas (las mujeres embarazadas son más susceptibles a ciertas infecciones, como la influenza, y las complicaciones asociadas pueden ser graves tanto para la madre como para el bebé); niños pequeños (los bebés y niños pequeños aún no han desarrollado completamente su sistema inmunológico, lo que los hace más vulnerables a las infecciones); y otros factores, como obesidad mórbida, desnutrición, tabaquismo, personas con exposición ocupacional a agentes infecciosos.

Infecciones que producen alta morbilidad y son prevenibles con vacunas

  • La influenza (gripe) es una enfermedad respiratoria altamente contagiosa que puede causar complicaciones graves, especialmente en personas con enfermedad cardíaca crónica, enfermedad pulmonar crónica (p. ej., EPOC, asma), diabetes mellitus, enfermedad renal crónica, sistema inmunológico debilitado (debido a enfermedad, medicación o edad).
  • La enfermedad neumocócica, que incluye neumonía y meningitis causadas por la bacteria Streptococcus pneumoniae. Puede ser particularmente grave para personas con enfermedad cardíaca crónica, enfermedad pulmonar crónica, enfermedad hepática crónica, diabetes mellitus, sistema inmunológico debilitado, o patologías con fuga de líquido cefalorraquídeo (fuga de LCR) y de alta morbilidad en niños pequeños, causando meningitis, sordera y complicaciones neurológicas irreversibles.
  • El Sarampión, Paperas y Rubéola (MMR) son enfermedades infantiles contagiosas pueden tener complicaciones graves en los adultos, especialmente aquellos con sistema inmunológico débil, mujeres embarazadas (especialmente rubéola).
  • La Hepatitis B es una infección del hígado puede provocar enfermedad hepática crónica, cirrosis y cáncer de hígado. Las personas con sistemas inmunitarios debilitados tienen un mayor riesgo de sufrir complicaciones graves.
  • La varicela (esta afección incómoda y que pica puede provocar complicaciones graves, especialmente en personas con sistema inmunológico débil, mujeres embarazadas (puede causar síndrome de varicela congénita en recién nacidos), o en adultos (enfermedad más grave que en niños).  
  • El Herpes zóster, que es causado por el virus varicela-zoster (el mismo virus que causa la varicela) puede ser particularmente grave para personas con sistema inmunológico débil, como los adultos mayores y pacientes de trasplante (mayor riesgo de complicaciones) y pacientes con cáncer.
  • El Virus del Papiloma Humano (VPH): este virus puede causar ciertos tipos de cáncer, incluido el cáncer de cuello uterino, cáncer de vulva, cáncer de vagina, cáncer de ano y algunos cánceres de cabeza y cuello.
  • El COVID-19 es una infección viral que infectó a 700 millones de personas a nivel mundial entre el 2020 y la actualidad, y produjo casi 7 millones de muertes, según las últimas estadísticas (www.trt.net.tr/espanol/covid19) y que afectó a ciertos grupos vulnerables más que a otros. En Panamá, la tasa de letalidad de país fue de 2% y la tasa de mortalidad en pacientes en diálisis fue de 26% antes de la disponibilidad de las vacunas  Infección por COVID-19 en pacientes en Hemodiálisis en Panamá 2020 | Revista Médica de Panamá (pediatricadepanama.org)

¿Qué producen las enfermedades crónicas en las personas que aumenta el riesgo de severidad de estas infecciones?

Las enfermedades crónicas, como la diabetes, la enfermedad renal, el cáncer y las enfermedades autoinmunes, pueden debilitar el sistema inmunológico, lo que dificulta al organismo combatir las infecciones virales. 

Muchos de estos pacientes tienen tratamientos como los corticosteroides y la quimioterapia, que también pueden suprimir la respuesta inmunológica, lo que hace que el paciente no pueda generar una respuesta normal de “lucha” o en caso contrario, produzca una respuesta “exagerada”, como sucedió en el COVID-19 y el paciente no pueda defenderse.

En el caso de los pacientes con enfermedad pulmonar preexistente, las infecciones virales pueden empeorar los síntomas de estas enfermedades y provocar neumonía, hospitalización e incluso la muerte, como los pacientes con EPOC y el asma, que hacen que los pulmones sean más susceptibles al daño por infecciones virales.

En el caso de los pacientes con enfermedades cardíacas, las infecciones virales pueden aumentar la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la demanda de oxígeno del corazón, lo que puede desencadenar eventos cardíacos como ataques cardíacos o insuficiencia cardíaca en un paciente con una alteración pre existente. Los pacientes con diabetes tienen niveles más altos de azúcar en sangre cuando no están controlados, lo que puede crear un ambiente favorable para la replicación viral.  Además, las infecciones virales también pueden dificultar el control del azúcar en sangre, lo que aumenta el riesgo de complicaciones.

En el caso de los mayores de 65 años, el sistema inmunológico se debilita naturalmente con la edad, lo que hace que las personas mayores sean más susceptibles a las infecciones virales, y además, las personas mayores también tienen más probabilidades de tener enfermedades crónicas que aumentan el riesgo de complicaciones.  Los pacientes con algunas condiciones, como la desnutrición, obesidad, fumadores, los que consumen alcohol en exceso presentan estados de inflamación crónica y disminución en la capacidad de respuesta a infecciones, por lo que son más susceptibles a complicaciones en caso de enfermar por alguna de estas infecciones.

Importancia de la vacunación en grupos de riesgo

A medida que envejecemos, nuestro sistema inmunológico se debilita. Esto nos hace más propensos a enfermarnos de enfermedades graves, como la gripe, la neumonía y el herpes zóster. En el vientre materno o en los primeros años de vida no hemos terminado de desarrollar nuestro sistema inmune. Las vacunas ayudan a fortalecer nuestro sistema inmunológico para que pueda combatir estas enfermedades.

Las vacunas son seguras y efectivas. Millones de personas en todo el mundo se han vacunado y han demostrado ser seguras y eficaces para prevenir enfermedades.

Es importante que nuestros pacientes de riesgo mantengan sus vacunas al día. Las vacunas no solo lo protegen a usted, sino que también protegen a las personas que lo rodean. Esto es especialmente importante para los adultos mayores que pueden tener contacto con niños pequeños o personas con sistemas inmunológicos debilitado.

Acérquese a su centro de salud más cercano y vacúnese a tiempo.

Por: Dra. Karen Courville, FACP, SNI