fbpx
La falta de confianza entre los países y dentro de ellos, la desigualdad, la agricultura intensiva y la probabilidad de transmisión de enfermedades de humanos a animales son algunas de las principales amenazas señaladas en el informe

Comunicado OMS

Un nuevo informe de la Junta Mundial de Vigilancia de la Preparación (GPMB) se ha presentado en la 15.ª  Cumbre Mundial de la Salud en Berlín

Los recientes brotes del virus de Marburgo, Mpox y la última cepa de gripe aviar (H5N1) son un duro recordatorio de la vulnerabilidad del mundo a las pandemias. Solo en 2024, ya se han producido 17 brotes de enfermedades peligrosas. Cada nuevo brote expone las fallas en la arquitectura existente de prevención de pandemias y en la preparación mundial para responder a los brotes de enfermedades.

Según un nuevo informe de la Junta Mundial de Vigilancia de la Preparación (GPMB), una plétora de riesgos aumenta la probabilidad de nuevas pandemias. El informe, presentado en la 15.ª  Cumbre Mundial de la Salud en Berlín, describe 15 factores clave del riesgo de pandemia, categorizados en cinco grupos distintos: sociales, tecnológicos, ambientales, económicos y políticos.

El GPMB, una iniciativa apoyada por la Organización Mundial de la Salud y el Banco Mundial, hace un seguimiento de los factores que impulsan el riesgo de pandemia y supervisa la preparación mundial. El informe destaca la urgencia de comprender la vulnerabilidad mundial a las amenazas y pide un reajuste radical del enfoque colectivo de preparación ante pandemias.

La falta de confianza entre los países y dentro de ellos, la desigualdad, la agricultura intensiva y la probabilidad de transmisión de enfermedades de humanos a animales son algunas de las principales amenazas señaladas en el informe. El informe también identifica nuevos riesgos más allá de los factores sanitarios tradicionales.

La conectividad digital ha permitido a los científicos secuenciar y compartir rápidamente datos sobre patógenos y adaptar las respuestas cada vez más rápido. Sin embargo, esta huella digital deja expuestos a los sistemas de salud y a las sociedades. Los ciberataques, las mayores amenazas a la bioseguridad y la rápida propagación de información errónea aumentan el riesgo de una pandemia.

“La próxima pandemia no esperará a que perfeccionemos nuestros sistemas”, afirmó Joy Phumaphi, copresidenta de la GPMB y exministra de Salud de Botsuana. “Debemos invertir ahora en sistemas de atención primaria de salud resilientes y equitativos para hacer frente a los desafíos del mañana”.

El informe identifica los factores complejos e interdependientes que configuran el riesgo de pandemias. Sin embargo, también destaca que la voluntad de incorporar flexibilidad a la respuesta, proteger proactivamente a la sociedad e invertir en esfuerzos colaborativos puede reducir significativamente el riesgo y mejorar la preparación.

Para protegerse eficazmente, todos los países deben fortalecer sus sistemas de salud, priorizar la protección social y garantizar que los servicios de salud esenciales estén disponibles para todas las comunidades, en particular las más vulnerables y desfavorecidas. El PIB por sí solo no es una medida de resiliencia ante una pandemia.

La preparación debe incorporar estrategias que abarquen las interfaces de salud humana, animal y ambiental. El informe insta a aumentar la colaboración entre sectores para mitigar los riesgos asociados a las pandemias, reconociendo que la salud de un sector está estrechamente vinculada a la salud de los demás.

“ Tenemos una pequeña ventana de oportunidad para repensar la preparación mundial: evaluar los riesgos que se extienden mucho más allá del sector de la salud y abordar algunos de ellos de manera mucho más proactiva, de una manera que se adapte a cada contexto”, dijo Kolinda Grabar-Kitarović, copresidenta de la GPMB y ex presidenta de Croacia. “La vigilancia, la adaptabilidad y la colaboración deben definir nuestra preparación ahora, de modo que estén incorporadas a la respuesta”.

El informe ofrece un marco para que los responsables de las políticas adapten las estrategias sanitarias existentes y mejoren las medidas de protección contra futuras pandemias. Esto incluye garantizar que los planes de prevención y respuesta se revisen periódicamente y sean lo suficientemente flexibles como para responder a todas las situaciones. La próxima pandemia no seguirá el mismo camino que la de COVID-19; las lecciones aprendidas de esa experiencia deben orientar la preparación, pero no definirla.

La resiliencia ante futuras emergencias sanitarias depende de la inversión en investigación y desarrollo, de la mejora de la tecnología, de una infraestructura sanitaria equitativa y de una mejor comprensión de la naturaleza dinámica de todos los factores que impulsan el riesgo de pandemia. En el mundo interconectado de hoy, la comunidad mundial debe asumir la responsabilidad colectiva de la prevención y la respuesta a las enfermedades, en lugar de considerar la preparación como una actividad individual de cada país o sector.

El informe está disponible en el sitio web del GPMB.

GPMB: contexto

La Junta de Vigilancia Mundial de la Preparación (GPMB, por sus siglas en inglés) es un organismo independiente de vigilancia y rendición de cuentas cuyo objetivo es garantizar la preparación para las crisis sanitarias mundiales.

Convocada conjuntamente por el Director General de la Organización Mundial de la Salud y el Presidente del Banco Mundial, la GPMB está integrada por líderes y expertos reconocidos a nivel mundial de una amplia gama de sectores, entre ellos la salud, la salud animal, el medio ambiente, los derechos humanos, la economía, el derecho, el género y el desarrollo.

Su tarea es proporcionar a los responsables de las políticas y al mundo una evaluación independiente y completa sobre los avances hacia una mayor preparación y capacidad de respuesta ante brotes de enfermedades, epidemias y pandemias. En resumen, la labor de la GPMB consiste en trazar una hoja de ruta para un mundo más seguro.

Comunicado OMS